La Justicia dictó una fuerte sentencia contra Edgar Adhemar Bacchiani, un trader oriundo de Catamarca, quien fue condenado a 9 años de prisión por una serie de estafas que afectaron a no menos 50 ahorristas en la ciudad de Córdoba.
Al igual que con Cositorto y tantos otros, las víctimas eran atraídas por las promesas de altos rendimientos.
El juicio marca el primer fallo en contra de Bacchiani, quien se presentaba ante sus clientes bajo el alias de "God trader", un título que hacía alarde de sus supuestas habilidades para realizar inversiones exitosas.
Sin embargo, detrás de esa imagen se escondían prácticas fraudulentas que dejaron una estela de denuncias de personas que confiaron en él y que no vieron ningún retorno de sus fondos.
La primera condena, pero con otros procesos abiertos
El proceso judicial, que fue impulsado por la fiscal Valeria Rissi, se resolvió a través de un juicio abreviado en el que las partes acordaron una condena de 10 años de prisión.
No obstante, el tribunal, tras la intervención del abogado defensor Eduardo Gómez Caminos, redujo la pena en un año, dejándola en 9 años de cárcel.
"A pesar de la rebaja, la condena es considerablemente alta. Hay que tener presente que este sujeto aún enfrenta varios procesos judiciales pendientes tanto en Córdoba como en su provincia natal, Catamarca, donde también surgieron denuncias similares", confía a iProUP Luis, uno de los damnificados.
Además de la sentencia privativa de libertad, la Justicia dispuso el decomiso de los teléfonos y otros dispositivos electrónicos del financista catamarqueño detrás de Adhemar Capital SRL.
Bacchiani, de 48 años, admitió su culpabilidad en un juicio abreviado ante la Cámara Décima del Crimen.
"Orquestó una estafa que superó los $378 millones y u$s1.2 millones, operando desde su sede en Catamarca y sucursales en Córdoba, Tucumán y otras provincias", resume a iProUP Carlos Nayi, abogado querellante que representa a 120 personas.
El raid de engaños se extiende por cuatro provincias. Hay denuncias contra Bacchiani en Catamarca, La Rioja y Tucumán. El abogado tucumano Alfredo Aydar, representante de unos 400 damnificados, tiene potenciales clientes en Buenos Aires, Mar del Plata y otros puntos del país.
"Este fallo viene a dejar en claro que no da lo mismo. Que no podes engañar a la gente, irte al Caribe y no pasa nada. Me deja conforme, aunque no haya recuperado mi dinero", cuenta a iProUP Alejandra, otra de las tantas personas estafadas.
Entre marzo de 2020 y enero de 2022, Bacchiani sedujo a sus víctimas con la promesa de retornos mensuales de entre el 13% y el 18% en dólares, invirtiendo en criptomonedas.
"Al principio y como pasa siempre en estos esquemas, algunos inversores obtuvieron ganancias fabulosas, lo que llevó a otros meterse. Incluso lo hicieron vendiendo autos, propiedades o utilizando hasta indemnizaciones laborales", agrega Nayi.
Tras la condena, Bacchiani fue trasladado a Catamarca, donde enfrenta otras causas pendientes. Su abogado, Eduardo Gómez Caminos, apuntó que los damnificados deberán iniciar acciones civiles para recuperar sus fondos, sumándose a la quiebra en curso en Catamarca.
Un antecedente crucial para evitar futuros esquemas Ponzi
La caída de Bacchiani, el autoproclamado gurú de las criptomonedas, marca un quiebre en la lucha contra las estafas financieras en Argentina. Su arresto en abril de 2022, tras las advertencias del Banco Central (BCRA) sobre su esquema Ponzi disfrazado de inversiones cripto, desató una ola de denuncias que aún resuena en los tribunales.
La reciente condena en Córdoba es solo el inicio de un laberinto judicial que se extiende por todo el país. El "trader" enfrenta 150 causas pendientes en la provincia y un juicio en Catamarca, donde 600 ahorristas de Catamarca, La Rioja y Tucumán lo acusan de un fraude estimado en u$s400 millones.
"No sabemos realmente si será posible que las víctimas recuperen el dinero", admite a iProUP uno de los abogados querellantes.
Para el especialista en fraudes financieros José Sucaria "los casos Cositorto y Bacchiani puede sentar un fuerte precedente. Todas las semanas recibimos denuncias de este tipo, lo que indica que aparecen otros de estos personajes estafando bajo la presunción de que podrán acordar una pena excarcelable".
Fueron los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil, y La Rioja, Ricardo Quintela, quienes en enero de 2022 pidieron a la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) que investigara a Adhemar Capital.
El esquema de Bacchiani no discriminó entre inversores modestos y figuras influyentes. Se sospecha que el hermano del gobernador Jalil fue una de las víctimas, lo que evidencia el alcance del entramado y el, probablemente sin saberlo, "grave error" que cometieron en su circuito de engaños.