El CEO de Tesla confirmó su salida del polémico Departamento de Eficiencia Gubernamental tras expresar su disconformidad con el nuevo paquete fiscal
29.05.2025 • 07:15hs • "Decepción fiscal"
"Decepción fiscal"
Elon Musk deja su cargo en Washington y lanza críticas al plan fiscal de Trump
La relación entre Elon Musk y Donald Trump, que había ganado visibilidad con el regreso del republicano a la Casa Blanca, acaba de atravesar un punto de quiebre. El CEO de Tesla y dueño de la red social X anunció que dejará su rol como "empleado especial del Gobierno", donde dirigía el polémico Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), tras manifestar su "decepción" con el nuevo proyecto fiscal impulsado por el mandatario.
"Mi tiempo programado como empleado especial del Gobierno llega a su fin. Agradezco al presidente Trump por la oportunidad de reducir el gasto derrochador", escribió Musk en su cuenta de X, en un mensaje donde dejó entrever su malestar con el rumbo económico de la administración.
También sostuvo que el DOGE "se fortalecerá con el tiempo a medida que se convierta en una forma de vida en todo el Gobierno".
La salida del empresario fue confirmada por fuentes de la administración a la cadena CBS.
El anuncio llega un día después de que Musk expresara públicamente su descontento con el nuevo paquete de gastos propuesto por Trump, que ya fue aprobado por la Cámara de Representantes, aunque por un margen mínimo.
En declaraciones al mismo canal, el magnate dijo sentirse "decepcionado de ver el enorme proyecto de ley de gastos, que aumenta el déficit presupuestario en lugar de reducirlo".
Trump, por su parte, minimizó la crítica y defendió la iniciativa: "No podemos estar recortando, necesitamos conseguir mucho apoyo", justificó, en referencia a una ley que prevé mayores recursos para defensa y política migratoria, pero que también extiende recortes de 2017.
Musk había asumido un papel activo en el flamante DOGE, un organismo que en sus primeras semanas se destacó por fuertes recortes presupuestarios y despidos masivos en organismos públicos, incluida la reducción de actividades de ayuda exterior.
Sin embargo, desde abril, el empresario había comenzado a limitar su participación, tras una caída de más del 70% en los beneficios trimestrales de Tesla.