El 2021 será un año bisagra para el ecosistema de pagos argentino, luego que en 2020 este sector vio un acelerado crecimiento en todo el planeta. Con vistas a este año, una disposición de AFIP obliga a partir del 1 de abril a los comercios de todo tipo y tamaño a reemplazar sus controladores fiscales de primera generación, en principio, por los de segunda.
De este modo, puede ser la oportunidad para que los sellers del canal físico incorporen la opción de la factura electrónica, por ahora dominante en el canal online, aunque de utilización incipiente en las ventas presenciales.
Mientras que el e-commerce recurre en un 90% a la facturación electrónica, en los comercios físicos aún se usa en apenas el 10% de las operaciones, debido entre otros factores a demoras en la despapelización relacionada con postergaciones en su implementación por parte de AFIP, a pesar de que el sistema está formalmente habilitado desde 2018.
Facturante, la startup de facturación electrónica de origen marplatense fundada en 2011, pretende que este año se inicie un proceso de innovación y que este tienda progresivamente a cambiar dicha situación, entre otras cosas porque la pandemia puso en evidencia la necesidad de abaratar costos y sobre todo mejorar la experiencia de compra de los clientes.
La RG 4290/18 de AFIP indica que los contribuyentes tienen la posibilidad de optar por emitir factura electrónica o por utilizar controlador fiscal para respaldar sus operaciones; incluso pueden usarse ambas en forma simultánea, si los negocios lo requieren.
Los controladores fiscales tienen un costo promedio de u$s800 y se requiere uno por punto de venta, además de la necesidad de tener un equipo de back up por sucursal. A esto se le suma lo relativo al soporte y mantenimiento del oficial homologado.
Se trata de una tecnología que se limita a la emisión de facturas, donde lo único que cambia con los controladores nuevos es que pueden generar informes de manera electrónica, suprimiendo el uso de tickets manuales como método habitual.
La factura electrónica, en cambio, es un servicio en la nube que no requiere equipos físicos de envergadura. En este sistema, apenas es necesario contar con una impresora de cualquier tipo, no homologada, para imprimir un ticket solo en el caso de que así lo exija el consumidor.
Básicamente, es un eje en torno al cual se puede articular todo un combo de servicios automatizados que van desde la asesoría contable, el marketing y la inteligencia comercial, partiendo de la experiencia de usuario.
En este sentido, Facturante concibió que el proceso de automatización de la factura remata en un envío final que es, en sí, un medio de comunicación que puede ser vehículo de contenidos para que los sellers mejoren y ahonden en su relación con los clientes.
La misma puede ser a través de correo electrónico o Whatsapp por el que llega la factura en aquellos locales donde el tiempo de permanencia del cliente permite un vínculo a través del cual obtener esa información, o mediante el QR que se imprime en la factura, como en los espacios de consumo masivo.
En todos los casos, el servicio de Facturante permite al comerciante generar recompra y brindar detalles al cliente. Es por esto que la firma acaba de reforzar dentro de su estructura un área de Experiencia de Usuario (UX), que funcionará dentro del Departamento de Producto, para enfocarse en uno de los valores clave de la compañía, que se expresa en la idea de ubicar a cada consumidor en el centro de la estrategia.
Para ello, la empresa renovó su plataforma para centrarla en torno a esta idea con "algo que va más allá del diseño de la interfaz con la que el comerciante interactúa", comentó Daniel Pili, cofundador & COO de Facturante.
Pili enumeró acciones como el diseño de los formatos y los contenidos para enviar un mail, es decir la frase exacta, adecuada, con orientación en usabilidad, para el correo por el que se envía la factura al consumidor, lo mismo para la generación de respuestas automáticas de los correos o whatsapp recibidos; los procesos de selección de promociones que acompañan las facturas y el envío de información relacionada con la compra que acaba de hacer el consumidor, con la oferta de productos relacionados a esa compra y el procesamiento y aprovechamiento de todos los datos que genera el comprador desde donde desplegar acciones de marketing directo e inteligencia comercial.
"Se trata, además, de pensar todo esto como una experiencia omnicanal, borrando las fronteras de un consumidor del canal físico o del online, sino que ya visualizamos a uno prototípico que se maneja por los distintos canales o por todos", añadió el directivo.
A partir de abril, Facturante estrenará una solución específica de facturación electrónica para el pequeño comercio físico que será mobile friendly. Habrá una promoción gratuita de dos meses, una suerte de MVP para que los comercios experimenten la solución y se obtenga de ellos una devolución para aceitando aún más el sistema.
En base a esto, Lorena Comino, Co-Founder & CEO de la startup, describió: "la idea es que pueda emitir una factura con solo cargar el importe y mediante dos taps en una pantalla". Mediante esta acción la startup aspira a incorporar este año 500 pequeños comercios nuevos a su cartera.
Durante el año pasado, Facturante logró la incorporación oficial de 10.000 clientes en total, con una aceleración de adquisición de estos del 351% respecto de la cantidad que poseían tan solo en un año atrás.
Ahora, para 2021, el objetivo de la startup es sumar entre 3500 y 3700 clientes directos más, además de los que se suman con partners como Telefónica o Prisma. Se estima que entre ambos serían otros 5000. Y esto solo para el mercado argentino, ya que el grupo también se encuentra desplegando planes de expansión en el exterior.
Los objetivos de la compañía tienen el marco propuesto por la AFIP con los cambios normativos y la incertidumbre en cuanto al ritmo de recuperación de los negocios en la nueva normalidad post pandémica y cómo esto impactará en la incorporación de la nueva tecnología.
El proceso de recambio se realizará por grupos de comercio de acuerdo a la cantidad de equipos inscriptos. En negocios con 11 o más equipos, deberán hacer el cambio entre el 1 de abril y el 31 de mayo. En los que disponen de entre 2 y 10, el plazo será entre el 1 de junio y el 31 de julio. Por último, los comercios con solo un equipo deberán hacer la migración entre el 1 de agosto y el 30 de septiembre.
Desde la firma también buscan anticiparse a un escenario donde la facturación de este tipo puede habilitar la existencia de locales sin caja, donde cada vendedor, portador de un dispositivo móvil, puede realizar todo el proceso de atención al cliente desde la provisión del producto que el consumidor desea, hasta el envío de la factura con los agregados comunicacionales necesarios.
Omnicanalidad y automatización son dos soluciones que tienen la potencialidad de revolucionar el desempeño del pequeño comercio, tradicionalmente limitados a la hora de destinar tiempo y recursos para aprovechar sus ventajas.
"Nosotros queremos que el comercio venda más y tenga más rentabilidad, no queremos que se especialice en el uso de una herramienta informática más, ni en marketing. En eso estamos trabajando con un concepto innovador que toma lo que mejor resultado le dio al cliente en estos últimos años, los bots que automatizan todo el proceso, y le agregamos valor incorporando inteligencia comercial en el proceso", puntualizó Pili.
Y concluyó: "Facturante va a permitir que todos aquellos que venden en comercios físicos y también online puedan unificar su facturación en un solo sistema".