La pandemia global de coronavirus COVID-19 puso en jaque a miles de empresas alrededor del planeta y, en ese contexto, los empresarios y emprendedores debieron pensar en nuevos productos y servicios para acomodarse lo más rápido posible a la "nueva normalidad".
En este escenario, las firmas chicas, medianas, y grandes comprendieron que el content marketing se transformó en una herramienta fundamental en cuarentena. Y, en ese panorama, los videos se convirtieron en el formato preferido de los usuarios.
¿Los motivos? Son fáciles de entender y prometen mayor interacción con los consumidores, ya que estimulan varios sentidos al mismo tiempo. Además, con la creciente cifra de herramientas digitales a disposición de los usuarios y marcas, es mucho más fácil crear buenos materiales.
VideoShow es una app que, como muchas otras en el mercado, se posiciona como una plataforma para editar y cortar videos en formato móvil.
Esta aplicación ofrece todas las herramientas básicas de este tipo de software de diseño. Es posible cortar, pegar y modificar ligeramente videos pre-grabados e incluye funciones básicas como ajustar el formato, tamaño o dimensiones para exportar desde imágenes hasta GIFS y videos en forma.
Pero también VideoShow cuenta con una suite de herramientas más profesionales, que algunas rivales en el entorno no siempre ofrecen. Por ejemplo, es posible agregar música popular, o bien un track que los mismos usuarios posean en su teléfono.
También es posible agregar efectos como el pixelado en alguna parte específica de los videos, en lugar de ser un filtro que afecta a toda la imagen. También es posible sumar textos con efectos de aparición, movimiento y transición.
Otra ventaja importante es que permite a los usuarios exportar sus proyectos, aún en la versión gratuita.
En cambio, aquellos usuarios que compran la versión premium podrán librarse de los anuncios, marca de agua y acceder a otras herramientas adicionales en la creación de sus videos.
No obstante, incluso en su formato más básico y gratuito, es una gran forma en que las empresas más pequeñas, o los individuos, pueden empezar a generar contenido.
El video fue el formato protagonista del branded content del 2020. Las estadísticas en la industria apuntan a que el formato audiovisual representará en torno al 80% de todo el tráfico de internet en 2021. Ya sea en forma de stories, tutoriales, paso a paso, reviews de producto… los influencers se convierten ahora más que nunca en productores y distribuidores de contenido.
Además, para las marcas, el contenido generado por estos creadores es una forma muy rentable y eficiente de distribuir su mensaje y contenido de video entre masas de audiencia y por ello recurrirán a influencers con un fuerte aprendizaje en la realización audiovisual.
Las marcas van a enfocar la publicidad y el marketing de influencers hacia canales emergentes como Tik Tok y otros más específicos como Peoople, a pesar de que Instagram y YouTube sigan siendo las redes por excelencia.
El crecimiento sustancial de nuevas redes sociales empujará a las marcas a diversificar su estrategia y a ampliar el contenido en nuevas plataformas que representan, además, buenas oportunidades para llegar a un target difícil de alcanzar y convencer: millennials y generación Z. La creatividad por parte de los influencers y la personalización de las campañas será fundamental para hacerse un hueco en nuevas plataformas.