El Gobierno de Javier Milei evaluará la creación de una Zona Digital Argentina para empresas de economía del conocimiento, en régimen de zona franca, que convine beneficios impositivos y laborales con la necesidad de desarrollo de los importantes recursos tecnológicos que tiene Argentina.
Milagros Santamaría, líder del Departamento Regulatorio de la organización Crecimiento, y Teo Beato, líder de Asuntos Públicos de la entidad, anticiparon a iProUP que llevarán esta propuesta al Ministerio de Economía en los próximos días.
Cómo es la propuesta de la Zona Digital Argentina
"Con la complicación existente en materia legislativa en el actual marco político, pensamos que la mejor manera no es buscar una nueva ley de promoción para el sector de economía del conocimiento, sino proponer al Ministerio de Economía que reglamente la Ley de Zonas Francas, algo que nunca se hizo", indica Beato.
Esta legislación prevé beneficios impositivos para las compañías que se radiquen, pero nunca se aplicaron por falta de reglamentación. Con esta propuesta, Crecimiento propone avanzar en este régimen de promoción para las empresas, especialmente las de economía del conocimiento.
"El objetivo es posicionar al país como hub regional de innovación, tecnología y economía digital, combinando competitividad global con impacto local en empleo, exportaciones y recaudación", afirman desde Crecimiento.
"La Zona Digital Argentina (ZDA) busca crear un entorno con las mismas reglas de juego que los mejores ecosistemas del mundo. Un espacio donde el talento local pueda desarrollarse sin necesidad de emigrar e incluso que atraiga el regreso del que se fue del país", enfatiza Santamaría.
Las claves de la Zona Franca Digital
En tanto, Beato remarca que "la idea es que la adhesión sea, en primer término, online, y que luego se radiquen físicamente las empresas que lo consideren conveniente. Según la ley, la radicación debe realizarse a través de las provincias".
"La ZDA propone un marco laboral especial, más flexible y adaptado a la era digital, que atraiga empresas y fomente el empleo sin resignar derechos básicos para los trabajadores", remarcan en Crecimiento.
Además, subrayan que se trata de una "herramienta de desarrollo económico, creación de empleo, atracción de divisas y modernización institucional, alineada con experiencias internacionales exitosas, pero con impacto directo en la realidad argentina".
Zona Digital Argentina: cuáles son sus claves y beneficios
El proyecto surge como respuesta al actual desafío en economía del conocimiento y tiene las siguientes características:
- Se basa en el mismo régimen que una zona franca convencional, pero aplicado a servicios propios del sector
- Se trata de un entorno piloto con reglas claras, previsibles y alineadas a estándares internacionales.
- Permitirá acelerar transformaciones estructurales mediante desregulación inteligente, innovación y atracción de inversión
- Moderniza el marco regulatorio, posicionando a Argentina como un hub regional de economía digital
- Se crean con una resolución de la autoridad de aplicación (el Ministerio de Economía) y en el marco de sus facultades para la reglamentación de la Ley de Zonas Francas
- Permitirá lanzar la primera plataforma 100% online y on-chain del Cono Sur, sin necesidad de sancionar una nueva ley ni erogaciones del erario público
- El área física aduanera cerrada se reemplaza por una plataforma web que un operador diseña y administra
- Allí se inscriben las empresas, se gestiona el cumplimiento regulatorio y se conectan los organismos públicos
- El Operador responde ante la autoridad de aplicación con los mismos controles que cualquier zona franca
"En este esquema, el Estado cumple un rol facilitador, no obstructivo, mientras que el financiamiento inicial se apalanca en capital privado y externo, minimizando el costo fiscal directo", enfatizan desde Crecimiento.
Qué beneficios trae la zona franca argentina
En la entidad aseguran que "Argentina posee uno de los sectores tecnológicos más dinámicos de América Latina, con startups líderes en fintech, SaaS y ecommerce, que alcanzaron proyección global. Estas industrias lideran en términos de creación de empresas, atracción de inversiones y generación de empleo calificado, siendo los principales candidatos para constituir los clusters tecnológicos de la ZDA".
Así, la nueva Zona Franca digital puede obtener los siguientes beneficios para el país dentro de los próximos años:
- Nueva fuente de inversión extranjera directa: 15% de todos los desembolsos proyectados para la década
- Exportación de economía del conocimiento en alza y repatriación de talento
- Ingresos fiscales indirectos: consumo, Impuesto a las Ganancias e IVA, sin subvenciones
- Efecto demostración: marco estable de libre mercado bajo paraguas constitucional
"La ZDA no representa un costo para el Estado: es una herramienta para atraer inversión privada y capital externo, generando divisas genuinas y empleo de calidad", advierten.
En cuanto a los beneficios para las empresas, mencionan los siguientes:
- Seguridad jurídica en un marco normativo estable y previsible.
- Incentivos fiscales y laborales que reducen costos y riesgos
- Acceso a capital internacional y mercados externos sin relocalizar operaciones.
- Regulaciones sandbox que habilitan mayor flexibilidad para innovar
- Talento argentino de excelencia, con posibilidad de incorporar profesionales extranjeros bajo un régimen migratorio simplificado
Zona Franca digital: cuál es el impacto económico
El régimen de Zona Franca Digital se concibe como un centro de innovación que irradia beneficios al ecosistema nacional por las siguientes vías:
- Participación de empresas locales, con acceso a capital internacional y mercados externos
- Encadenamientos productivos, en los que las empresas de la ZDA demandan bienes y servicios de la economía local, elevando estándares y capacidades.
- Integración federal, con impacto en provincias y ciudades del interior
- Vocación exportadora sin sustituir al mercado interno
- Posicionamiento y consenso, a través de estrategias de comunicación y relaciones públicas
El impacto que tendrá sobre la economía argentina, proyectando para la siguiente década (2025-2035) es ampliamente positivo. Desde Crecimiento, se espera una Inversión Extranjera Directa (IED) acumulada de u$s8.000 millones a u$s15.000 millones.
Además, estiman que entre 3.000 y 3.500 empresas tendrán posibilidad de registrarse en la Zona Digital Argentina. Estas compañías podrán brindar empleo directo para aproximadamente 40.000 trabajadores informáticos e indirecto para 80.000 personas.
Por qué hace falta la Zona Franca digital
Desde Crecimiento ponderan que "el país se ubica entre los principales exportadores regionales de servicios basados en el conocimiento, con ventas externas por más de u$s8.900 millones anuales y talento altamente competitivo".
Sin embargo, matizan, "esto convive con un contexto de inestabilidad y falta de seguridad jurídica, que han limitado la llegada de inversión extranjera e incentivado la emigración".
"A esto se suma el llamado 'LATAM Discount', una subvaluación estructural por parte del capital global frente a riesgos regulatorios y macroeconómicos. Esto no hace más que alargar la distancia entre startups innovadoras y el capital, restándole competitividad a los proyectos argentinos y obligándolos a emigrar", concluyen.
Ante este panorama, surge la propuesta de la Zona Digital Argentina, como un intento de dar previsibilidad e incentivos al sector de economía del conocimiento.
Tras la publicación de este artículo, otra organización se atribuyó la autoría del proyecto. "La Zona Franca Digital es un proyecto creado y registrado por la Cámara Argentina de Empresas Emergentes (Startups), presentado oficialmente ante organismos del Gobierno Nacional en el marco de acuerdos de confidencialidad. Su objetivo es modernizar el marco regulatorio argentino para startups y empresas tecnológicas, inspirándose en modelos exitosos como e-Estonia", afirmaron desde la CAEE.
Además, remarcaron que "el proyecto no pertenece a ninguna ONG ni entidad privada externa, sino que es una iniciativa del sector emprendedor, liderada por la CAEE y acompañada por organismos públicos", y alertaron que "parte de la información publicada proviene de fuentes no autorizadas, lo cual pone en riesgo procesos institucionales y acuerdos en curso con el Estado". Sin embargo, desde Crecimiento descartan que hubiera un registro del proyecto en el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual (INPI).