El QR finalmente llega este lunes al subte porteño. El unicornio ya tiene todo listo como administrador y como billetera, pero con una muestra de "buena fe" antes del lanzamiento: no desplegaría el servicio "full" para dejar que otras aplicaciones lleguen a tiempo.
Mientras tanto, MODO trabaja horas extra para llegar al lunes luego de que el Banco Central decidiera no mover la fecha de puesta en marcha.
El changüí de Mercado Pago
La llegada del QR a los subtes porteños estuvo signada por la polémica: en diciembre, Mercado Pago iba a salir en soledad con el QR junto a la apertura de las tarjetas, pero el regulador lo freezó hasta que la Cámara Interbancaria para los Medios de Pago (CIMPRA) indicara un estándar, luego de las quejas de la industria.
El unicornio tiene un rol vital en el esquema: no sólo es billetera, sino también administrador, por lo que cobra y habilita a otras aplicaciones a abonar en el Subte. Así, corre con ventaja ya que el Boletín CIMPRA con el estándar y especificaciones se compartió recién el martes de la semana pasada, seis días hábiles previos al lanzamiento.
Fuentes del sector fintech confirman a iProUP que el unicornio "está terminando de calibrar el sistema y próximamente comenzará el proceso de encendido progresivo de los pagos con QR en el Subte para algunos usuarios".
"Mercado Pago ya tiene todo listo: le está dando un poco de tiempo a otras billeteras para que se adapten al sistema. La solución estará disponible para todos durante la próxima semana", aseguran.
Claves de la llegada del QR al subte
Ejecutivos del sector remarcan que MODO ya está testeando el desarrollo de los pagos en el Subte, en tanto que Naranja X y Buepp comenzaron el proceso para subirse al sistema.
"Como todo nuevo medio de pago con una nueva tecnología es un proceso que irá mejorando con el uso y sumando más billeteras, y se irá abriendo a todos los usuarios en la app", completan.
MODO trabaja contrarreloj
Personas cercanas a la billetera de los bancos confían a iProUP que los colaboradores de la firma "están haciendo magia" para poder llegar al lunes o, al menos, a la semana próxima.
"MODO pidió 60 días y el BCRA les dio seis. Pero no van a salir con cualquier cosa: van a respetar la experiencia de usuario, están obligados a sacar un buen producto a la calle", asegura a iProUP un ejecutivo del sector bancario.
El gran desafío de la compañía no es solo sumar un botón para pagar el Subte, sino también llevar esa función a los mobile bankings de cada entidad. Y para eso dependen de los equipos técnicos de cada una de las instituciones participantes.
"Mercado Pago la tiene que certificar y deben salir a testear. Entiendo que MP, como administrador, la habilitará rápidamente cuando esté todo bien. Con esa certificación, MODO deberá ir al BCRA para que le dé el OK. Es todo un proceso", admite un ejecutivo de la banca.
Pero en la industria dan por descontado que estará listo para el lunes. La app de los bancos desarrolló junto a COELSA un sistema apalancado en Transferencias 3.0 y Pago con Transferencia (PCT), bases del QR interoperable.
Esto destrabará el mercado para otras billeteras, como Ualá, que si bien puede estar en la app de los bancos por "herencia" de Wilobank, descartó hacerlo por cuestiones de costos.
"Permite una implementación ágil, con bajos costos operativos, mínima inversión tecnológica adicional y una tasa de acreditación superior al 95%", remarca COELSA ante la consulta de iProUP.
"COELSA ya facilita la integración de billeteras al nuevo esquema mediante mensajería interoperable estandarizada, ampliamente adoptada por bancos y Proveedores de Servicios de Pago. Actualmente, presta este servicio a MODO y la solución se encuentra disponible para todas las billeteras próximas a integrarse", completan desde la compañía.
Lo que viene
A grandes rasgos, el sistema funciona mediante tres pasos. Según fuentes de Mercado Pago, el sistema no necesita que el usuario esté conectado a Internet y hay que realizar lo siguiente:
- Abrir la aplicación y presionar la opción Pagar viaje con QR
- Elegir el medio de pago
- Acercar el QR que aparece en el celular a 10 centímetros del lector del molinete
- El pago se confirma en menos de dos segundos, habilitando el paso
Por otro lado, que se pueda elegir con qué medio abonar es un punto que contrasta con la normativa original, que había fijado sólo el pago con saldo en cuenta bancaria o virtual.
El martes, iProUP anticipó que el mercado iba a desatar una "guerra de promos" para neutralizar al QR y privilegiar a las tarjetas de crédito, débito y prepagas.
De esta forma, Mastercard y Visa establecieron para mayo un 30% y 35% de descuento, respectivamente, para quienes abonen sus pasajes con los plásticos físicos. En tanto, promueven 60% y 65% de reintegro para quienes abonen con sus tarjetas pero a través de billeteras NFC, como Google Pay, Apple Pay o MODO contactless.
Se estima que el 20% de los viajes en el Subte se abonaron mediante estas aplicaciones y que el 70% del parque celular local no cuenta con NFC, pese a que se triplicó la venta de teléfonos compatibles. Esa es la ventana de oportunidad que detectó el unicornio.
El miércoles, Ualá anunció que completaría la devolución hasta el 100% de los viajes con sus Mastercard de crédito o prepaga. Lo mismo ya hace el Banco Nación hasta el 30 de junio.
Mercado Pago no se quedará atrás. Si bien ya ofrece 75% por abonar con su tarjeta prepaga en el transporte, en la industria dan como un hecho que subirá el porcentaje con el QR una vez que el servicio lo tengan todos los usuarios. Ejecutivos del sector no descartan cross-selling con otros servicios o incluso viajes gratis con su reciente sistema de suscripción Meli+.
El Subte es sólo el comienzo. El negocio fuerte será cuando se abra el sistema a los colectivos: en los primeros tres meses se expendieron 10 millones de pasajes con plásticos y NFC en el Subte según Payway. Es decir, unos tres millones por mes, pero todo el sistema SUBE procesa 300 millones de boletos mensuales.
De hecho, bancos del interior mostraron su interés en la solución de MODO y COELSA, pese a que el QR tendrá su première en la Ciudad de Buenos Aires.