El universo de las criptomonedas era prácticamente desconocido para el argentino común hasta no hace mucho tiempo, pero gracias al avance tecnológico y a la crisis de valor que atraviesa el peso este tipo de inversión comenzó a estar en el radar de cada vez más personas.

Del abanico de opciones en las diferentes casas cambio (o exchanges, como se dice en la jerga) del mercado local –entre las que sobresalen Bitso, SatoshiTango, BuenBit, Ripio, Decrypto.la, Binance y ArgenBTC– el Bitcoin prevalece del resto gracias a su fama mundial y por ser la elección más utilizada de la plaza albiceleste.

Algunos ahorristas lo buscan como refugio de valor. Otros, con miras a hacer un negocio con el aumento de su cotización: el 30 de noviembre alcanzó su máximo histórico (u$s19.700). Así, en la última semana del mes pasado los argentinos compraron $65 millones sólo en la plataforma LocalBitcoins.

Los motivos por los cuales no deja de sumar usuarios día a día son varios: desde una sociedad que comienza a perderle el miedo a este tipo de activos y consume información al respecto, hasta la posibilidad de ser el destino de los devaluados pesos y una forma de dolarizar la cartera.

Otras alternativas

El mercado de las criptomonedas está dividido en dos grandes grupos:

En el primer grupo sobresale el Bitcoin, que cerró la semana del 26 de noviembre al 3 de diciembre con una suba acumulada del 13%. En ese lapso otras criptomonedas de cotización variable también cosecharon cifras positivas:

En el pelotón de las stablecoins, no hubo cambios. Los "dólares digitales" (que mantienen paridad con el billete verde) más usados son Tether (USDT), USDCoin (USDC) y DAI. Esta última es la preferida de los argentinos.

Por su naturaleza, estos dos grupos están destinados a diferentes tipos de inversores: mientras un segmento puede experimentar fuertes subas y bajas de las cotizaciones (y provocarle alegrías inmensas o serios dolores de cabeza a quienes apostaron por ellas) las otras hacen alarde de su nombre y son estables, si bien están atadas a la suerte de la moneda estadounidense.

Bajo la sombra del líder

El mercado de criptomonedas ofrece variantes para quienes están buscando una opción diferente al Bitcoin.

Entre ellas se destaca Ether. Manuel Beaudroit, CEO de Belo, pone la mira en este activo y destaca la posibilidad que brinda de desarrollar acciones que Bitcoin aún no posee, "como los famosos contratos inteligentes".

Se tratan de programas que ejecutan acciones (como movimientos de monedas) en caso de que ocurran ciertos sucesos, de manera automática y sin intermediarios. Así, se abre el juego a las finanzas descentralizadas (DeFi), con nuevas opciones de inversión.

"Ahí radica el fuerte interés por apostar por Ether como red o en los tokens que dan acceso, como los protocolos (instrumentos de inversión) que se montan sobre la red Ethereum", dice Beaudroit.

Y agrega: "Esos tokens tienen la ventaja que los podés prestar en contratos descentralizados para recibir un interés mensual".

Además, plantea abiertamente que este tipo de elecciones deben ser pensadas como alternativa a la divisa norteamericana. "Si bien el dólar es la unidad de intercambio internacional y de referencia para el comercio, refiere a un sistema monetario que irá en decadencia", dispara.

Además, vaticina que "la preponderancia de los sistemas de activos descentralizados, como Ethereum, es el futuro y es una decisión inteligente dar pasos hacia esa dirección".

Matías Bari, CEO de Satoshi Tango, también califica a esta opción como una plataforma en la cual se están desarrollando muchos proyectos interesantes y destaca su atractivo como una inversión a corto y mediano plazo.

"El Ether, como activo especulativo, puede subir de valor por el fuerte uso que se le está dando a la red", subraya. Pero, así como le recalca su atractivo inmediato, el especialista advierte que, quienes la piensen como una inversión a largo plazo, se exponen a un riesgo escondido en el origen de esta opción.

"La red Ethereum no está pensada para que su token sea reserva de valor, sino para que se convierta en el combustible de los contratos inteligentes", señala Bari.

Y añade: "Esta aclaración es importante porque eventualmente la comunidad puede determinar que la emisión de Ether debe aumentar por motivos técnicos o de otra índole, y no hay nadie que pueda oponerse porque esta red no fue concebida como reserva de valor", 

"A corto plazo es atractivo por el gran movimiento que se viene observando. Ethereum es una red impresionante en la que se están haciendo cosas impensadas hace diez años", insiste Bari.

Los tapados

Existen otros proyectos relacionados con altcoins (como se denominan a todas las criptomonedas que no son el Bitcoin) que, fuera de las grandes luces, dieron significativos pasos este año.

Beaudroit destaca entre todos ellos a uno que surgió con mucha fuerza en los primeros meses y al cual le subraya su rol de innovadora oferta de servicios financieros descentralizados: AAVE, que acumuló una suba del 45% en muy pocos días (26 de noviembre al 3 de diciembre).

"Es una opción interesante porque es la síntesis de mucho trabajo y viene a traer una nueva propuesta", agrega.

Otra alternativa que está bajo la lupa de los especialistas es Polkadot (DOT), que cosechó en el mismo lapso un incremento del 11,5%.

Al respecto, Bari la destaca como una propuesta interesante similar a Ethereum, pero también vuelve a insistir en que "no son redes que estén pensadas como reserva de valor, sino que es para hacer contratos inteligentes", por lo cual deben ser vistas como opciones a corto o mediano plazo.

Atentos

Gabriel Vago, CEO de ArgenBTC, en diálogo con este medio advierte que las alternativas al Bitcoin no son de acceso fácil para cualquier usuario que no tenga información previa.

Para quienes recién se inician dentro de mundo de las criptomonedas, recomienda apostar al Bitcoin por ser "un activo que permite que una persona con pocos conocimientos en la materia, pueda comprarlo, atesorarlo y utilizarlo".

Además, enfatiza en la gran aceptación global característica que debe ser tenida en cuenta al momento de buscar una alternativa.

"El camino de entrada a las criptomonedas es el Bitcoin. Todas las demás altcoins tienen más volatilidad. Para quienes no están adaptados a eso, pueden tener en vista la stablecoins, que no les van a dar rentabilidad solo si la cotización del peso frente al dólar varía", completa.

Beaudroit pone el foco en el aspecto de la seguridad de los proyectos alternativos. "Hoy está ocurriendo que por ser más ágiles a veces no se hacen todas las pruebas que se deberían realizar y eso impacta en el producto. Este tipo de información se le aclara al público, pero el tema es a qué público se le comparten estos datos fundamentales".

Bitcoin permite ganar de dos modos: por la suba de su valor o la suba del dólar. Pero es muy volátil y puede depreciarse de un momento a otro

"Los riesgos están en la estabilidad del proyecto al que estas apostando y todos los peligros propios de esta tecnología", explica. El abanico de posibilidades al que puede acceder el inversor que quiere destinar sus pesos es amplio, y abarca a los diferentes perfiles y finalidades: protección de valor o especulación.

La recomendación principal que brindan los especialistas es operar desde una exchange reconocida, al menos hasta saber en profundidad los detalles de estos activos, aspecto clave para evitar fraudes o hacer apuestas con riesgos injustificados.

Te puede interesar