Con el acuerdo con los acreedores todavía pendiente, los bonos argentinos se mueven al compás de los rumores y de las pocas declaraciones públicas de los involucrados en la negociación. 

Son momentos de alta incertidumbre en este mercado, a la espera de un arreglo que no llegaría antes de mediados de junio. En ese marco, los inversores más osados se preguntan si todavía hay oportunidades para comprar deuda local y obtener una buena ganancia cuando llegue el entendimiento con los bonistas. 

Analistas consultados por iProUP comparten sus opiniones sobre qué puede pasar con los títulos argentinos y coinciden en recomendar cautela. Aseguran que algunos precios reflejan que el mercado ya está descontando un acuerdo y que será la letra chica lo que defina cuánto pueden algunos subir tras el canje.

¿Hay bonos baratos hoy? 

Con cotizaciones actuales, a paridades (valor de mercado por cada u$s100 en bonos) mayores a u$s40, algunos títulos soberanos tienen potencial de suba, si bien no lucen especialmente baratos.

"La respuesta a si hay hoy bonos baratos depende de cuál es el tipo de acuerdo al que creemos que se va a arribar y qué están descontando los precios de mercado", afirma a iProUP Francisco Mattig, estratega de renta fija de Consultatio.  

"Nuestra posición es que, para la ley internacional, se llegará a un punto medio entre la segunda oferta oficial y la oferta conjunta de los Comités Ad Hoc, lo cual podría arrojar un potencial alcista del orden del 20%", añade. 

El ministro de economía, Martín Guzmán, continúa negociando el canje de la deuda con los acreedores

"Mi sensación es que los bonos hoy ya están priceando un acuerdo, con lo cual hay que ver cómo termina siendo y cuánto recorrido más puede haber", afirma a iProUP Nicolás Chiesa, director de Portfolio Personal Inversiones (PPI), quien además considera que es un punto de entrada arriesgado.  

Y añade: "Más allá de que Argentina haga un acuerdo con una exit yield (la tasa a la que cotizarían los nuevos títulos) de 10%, no saldrán a negociarse inmediatamente a esa tasa ya que muchos de quienes los tienen en cartera van a comenzar a venderlos".

En la misma línea, Mattig anticipa que es probable que las cotizaciones inmediatamente posteriores al canje sean más bajas a las que se calculan hoy, teniendo en cuenta una exit yield de 10% o 12%. Esto se debe a que "una parte de los acreedores, en su mayoría los Hedge Funds (fondos de cobertura) que compraron en paridades de 30%, buscará vender". 

"Por este motivo –insiste– creemos que podría ser una mala decisión salirse inmediatamente tras el canje. Además, quedarse con bonos que rinden dos dígitos en un mundo de tasas bajas no luce tan mal"

Para José Ignacio Bano, gerente de research de InvertirOnline, la apuesta por los títulos argentinos no es clara en este momento: "Se está discutiendo la paridad que tendrán los bonos una vez que se normalice la negociación, es decir, los nuevos títulos que se canjeen"

En su visión, "se habla de una paridad aproximada del 50%. Por lo tanto, todos los que estén muy por debajo de esa paridad ahora tendrían una oportunidad de compra porque deberán subir de precio para llegar a ese nivel". 

"Sin embargo, los bonos no están tan por debajo de eso. El más corto de los que entran en la negociación, el Bonar 2021 (AA21), cotiza en paridad de 52%; el Bonar 2022 (A2E2) está en 46%. Hay que irse a uno más largo, como el Centenario (AC17) para encontrar una paridad de 40%. Sin embargo, si se le agrega el horizonte del exit yield, está más cerca de 48% o 50%", ejemplifica. 

Los analistas advierten que, inmediatamente después del acuerdo, podría haber una baja en los títulos por la salida de grandes inversores

Por su parte, Mattig explica que, según el escenario de acuerdo que maneja, los títulos con vencimientos más próximos podrían sufrir algún ajuste a la baja en términos de valor presente. "Si ese es el caso, la curva de paridades de los bonos ley internacional podría aplanarse. Esto es, que los largos suban un poco más que los cortos".

Por otro lado, cree que los títulos globales lucen más atractivos que los exchange (es decir, que provienen del canje de 2005, como el Discount y el Par).

Chiesa, señala que, de tomar posiciones, conviene hacerlo en aquellos papeles con vencimientos más largos y bajo ley extranjera, "como el Bonar 2048 (AE48), el Bono Centenario (AC17) o el Discount en dólares (DICY)". 

¿Ley argentina o extranjera?

Al momento de elegir, la legislación de cada título no es un dato menor, ya que hay diferencias de cotizaciones. Por ahora, el Gobierno sólo está negociando con acreedores que tienen bonos regulados por la ley de Nueva York (son los que muestran las paridades más altas). 

En una segunda fase lo hará con los acreedores locales. En este terrenos, las aguas están divididas: mientras algunos esperan un tratamiento igualitario, otros creen que el Ministerio de Economía tratará de ahorrar costos al negociar a nivel doméstico.

"En términos de legislación, los títulos en dólares ley local descuentan un tratamiento bastante similar (a los de ley extranjera) y pensamos que podría no ser el caso", señala Mattig. Por esta y otras consideraciones, su opinión es contundente: "Preferimos los bonos globales largos".

Para Chiesa, en tanto, "los emitidos bajo ley local están caros, especialmente el Bonar 2024, que se es el más líquido y se usa para operaciones de contado con liqui o dólar MEP. Además, después de la pesificación a dólar oficial de las Letes, hay muchas dudas sobre qué pasará con los bonos ley argentina".

En esa línea, Bano considera: "Los títulos en dólares bajo ley nacional tienen una paridad mucho menor y podrían tener un buen premio si la negociación resulta exitosa. Hoy poseen un precio tan bajo porque la gente estima que pueden llegar a ser una variable de ajuste y pueden ser más riesgosos". 

"Dos bonos iguales pero con distinta legislación, como el DICY (ley Nueva York) y el DICA (ley local), tienen paridades de 48% y 37% , respectivamente. Hay mucha diferencia. En ese caso, para un inversor agresivo, yo creo que debería comprar el DICA o el PARA, bajo ley local pero en dólares. Se presenta como una buena alternativa, aunque más riesgosa, si sale bien la negociación", señala. 

Al alcance de un clic

Comprar bonos argentinos es una apuesta arriesgada. Para quienes confían en un desenlace amistoso del conflicto con acreedores y se animen a invertir, el consejo es hacerlo de forma cautelosa. Si bien la recomendación varía según el tipo de inversor y el plazo, sugieren destinar una porción reducida del portafolio, ya que se trata de activos de alto riesgo en este momento. 

Se puede abrir una cuenta para operar en Bolsa y realizar la compraventa de títulos públicos desde aplicaciones móviles

Desde las apps de los agentes de Bolsa se pueden comprar estos y otros activos sin moverse de casa. Tanto Consultatio, como PPI e InvertirOnline permiten hacerlo, con tres simples pasos: 

- Abrir la cuenta de forma remota y digital, desde la aplicación móvil

- Transferir los fondos desde el banco

- Empezar a comprar los bonos 

En el caso de los minoristas, lo único que se debe tener en cuenta es la ficha mínima de cada título, ya que en algunos casos se requiere adquirir una cantidad importante para poder acceder al título. 

"A través de nuestra app puede operarse con títulos que cotizan en bolsa. El Bonar 2022 (A2E2), Bonar 2027 (A2E7) y Bono Centenario (AC17), entre otros, tienen una ficha mínima de u$s1.000", expresa.

En la misma sintonía se manifiesta Bano, quien explica: "Algunos tienen una lámina mínima muy alta. Para comprar el Bonar 2046 (AA46), el piso son u$s150.000 nominales. Si estamos hablando de una paridad del 50%, habría que pagar u$s75.000 como mínimo". 

Sin embargo, también expresa que "hay otros mucho más bajos, como el Centenario (AC17), por ejemplo, o el mismo Discount (DICY), que tienen láminas de 1.000".

Con todo, los analistas recalcan que es una jugada arriesgada. Por lo tanto, recomiendan que sólo los inversores osados opten por entrar a la renta fija argentina.

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