Donald Trump firmó, en las últimas horas, una orden ejecutiva enfocada en "fortalecer el liderazgo de Estados Unidos en materia de activos digitales y tecnología financiera" y, de esta manera, impulsar iniciativas y acciones concretas para convertir al país en "la capital cripto a nivel mundial".
Este decreto tiene como objetivo, en el corto plazo, la creación del "Grupo de Trabajo del Presidente sobre los Mercados de Activos Digitales". Este equipo identificará las regulaciones existentes, eliminará las inadecuadas e impulsará otras con el propósito de establecer "reglas de juego claras y transparentes" para los activos digitales, desarrollar la tecnología blockchain y proteger la soberanía del dólar aprovechando el peso de las stablecoins en todo el mundo.
Además, estudiará la posible creación de una "reserva nacional de activos digitales", conformada por Bitcoin y otras criptomonedas.
Cabe recordar que ya existe una propuesta de Ley Bitcoin por parte de la senadora Cynthia Lummis, quien presidirá un Subcomité Cripto en el Senado norteamericano, para crear una "Reserva Estratégica de Bitcoin". Sin embargo, Trump podría considerar también una combinación de criptomonedas "fabricadas en los Estados Unidos", como XRP, Solana, Cardano, AVAX e incluso la memecoin Dogecoin.
Entre otras cuestiones, estas acciones posicionan a EE.UU. como un referente cripto, dando "un paso hacia adelante" al impulsar un programa de acciones concreto y enfocado específicamente en el ecosistema, algo inédito.
Esto plantea la pregunta de por qué Argentina, considerando su lugar destacado a nivel regional como jugador clave, con una enorme adopción de criptoactivos (se estima la existencia de más de 10 millones de cuentas cripto en exchanges), pionero en cuánto al desarrollo de empresas y cpm un gran talento en capital humano, no ha podido ocupar ese lugar y por qué podría haber "perdido terreno" a partir de esta noticia.
Es importante destacar que esta situación no es responsabilidad exclusiva de una gestión específica, sino que responde a una falta de transversalidad en las políticas públicas. En muchas naciones, ciertos temas se consideran "prioridad de Estado", sin importar el color político. Sin embargo, la cuestión cripto parece no haber estado entre esas prioridades en Argentina.
Cabe recordar que la idea de una "reserva Bitcoin", que ahora es noticia en Estados Unidos, ya había sido propuesta en Argentina hace una década, más precisamente en 2014, cuando el precio del BTC rondaba los u$s620.
Este proyecto buscaba actualizar la carta orgánica del BCRA, modificando el artículo 18 de la Ley Nro. 24.144, para permitir que la autoridad monetaria administre reservas en oro, divisas y Bitcoin. Sobre el activo digital, se proponía destinar el 1% de las reservas del organismo. Sin embargo, fue ignorado por el Congreso.
Esta tendencia pareciera haber cambiado, al menos en cierta medida, con la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada. En repetidas ocasiones, el mandatario libertario ha destacado el potencial "liberador" de las criptomonedas, especialmente Bitcoin.
"Bitcoin es moneda, pero los estados se resistirán a eso porque le quita al gobierno la potestad de cobrar el impuesto inflacionario. Es devolver a la gente lo que es de la gente: el dinero. La tecnología elimina el monopolio de la moneda", afirmó el ahora presidente en LABITCONF 2020.
Sin embargo, más allá de algunos avances el año pasado, como la creación de la figura de Proveedor de Servicios de Activos Virtuales (PSAV), la eliminación de trabas burocráticas y el desarrollo de regulaciones enfocadas en el ecosistema, que podrían estar listas a finales de este año, el avance en Argentina parece más lento que en Estados Unidos, donde un nuevo mandatario, apenas horas después de asumir, dio un primer paso histórico sin demasiada dilación.
¿Argentina aún puede ser la capital cripto a nivel mundial?
Ramiro Raposo, VP de Growth de Bitwage, resalta que esta noticia no sorprende, ya que "Estados Unidos suele, en casos como este, destacarse por tomar la delantera". "Es muy interesante que un país de tal magnitud adopte una criptomoneda tan cuestionada por ellos mismos", indica, sin embargo, a iProUP.
En esa línea, espera que esta iniciativa "pueda inspirar a la Argentina y a otros países a seguir el mismo camino", aunque subraya que el país enfrenta ciertas dificultades para desarrollar políticas similares. Aunque aclara que esto se debe más a los enfoques de agenda del Ejecutivo que al estado del ecosistema en sí.
"El principal inconveniente es que Argentina probablemente no esté lista para incluir Bitcoin en sus reservas debido a que existen otras prioridades en la agenda económica para estabilizar el país. Hasta que esto se logre, dudo que el Gobierno tome la iniciativa en este sentido", sostiene.
Por su parte, Rodrigo Durán Guzmán, Director de Comunicaciones de CryptoMKT, asegura a iProUP que, si bien la estrecha relación entre Javier Milei y Donald Trump, y los vínculos que buscan construir entre Argentina y Norteamérica, "podrían abrir puertas" para la colaboración entre ambos países, "es fundamental entender que cada nación debe construir su propio camino en esta industria, adaptándolo a sus realidades económicas, sociales y regulatorias".
En esa línea, afirma que, aunque "Estados Unidos está tomando la delantera al establecer un marco regulatorio claro y proactivo, Argentina tiene una ventaja competitiva importante", que es "una de las tasas de adopción de criptomonedas más altas del mundo, impulsada por su contexto económico y la necesidad de alternativas al sistema financiero tradicional".
Sin embargo, remarca: "Lo que simboliza este anuncio es la urgencia de que Argentina actúe rápidamente. Si no se implementan políticas claras y sostenibles, el país corre el riesgo de quedar rezagado, especialmente frente a economías más estructuradas como la de Estados Unidos".
Aunque aclara que "hay margen aún para que Argentina siga los pasos de Estados Unidos", resalta que "esto requiere un esfuerzo coordinado entre el sector público y el privado" y el desarrollo de acciones concretas que el Gobierno Nacional debería implementar para que eso suceda, como:
- Marco regulatorio claro y equilibrado: la regulación debe proporcionar transparencia y seguridad jurídica tanto para empresas como para usuarios, evitando la sobrecarga burocrática que podría frenar la innovación.
- Promover incentivos fiscales y financieros: facilitar la creación de startups del sector cripto mediante beneficios tributarios, así como fomentar la llegada de capital de riesgo e inversiones internacionales.
- Invertir en educación y desarrollo tecnológico: capacitar a más personas en el uso de criptomonedas y blockchain. Además, es fundamental asegurar una infraestructura tecnológica robusta que permita la expansión del sector.
- Fomentar la cooperación internacional: establecer alianzas con países líderes como Estados Unidos, no solo para intercambiar conocimientos, sino también para crear acuerdos que impulsen el crecimiento del ecosistema a nivel global.
- Generar confianza desde el liderazgo político: es crucial que el gobierno promueva las criptomonedas como una herramienta de desarrollo económico y financiero, y no únicamente como una solución coyuntural ante crisis económicas. La estabilidad política es fundamental para dar una imagen de certezas a potenciales inversionistas, atraer capital humano y apalancar la economía local generando oportunidades tanto de negocios como de empleos.
"El país debe desarrollar un ecosistema regulatorio, fiscal y tecnológico que fomente la innovación y atraiga inversiones internacionales. Estados Unidos está marcando la pauta al dar certidumbre jurídica a empresas y usuarios, y Argentina puede aprender de este modelo adaptándolo a sus propias necesidades y fortalezas", concluye.