Polémico y provocativo, el empresario  Elon Musk logró en un periodo corto de tiempo, que su compañía Tesla sea un referente en el mundo automotriz y también la que más y mejor cotiza.

Incluso, Tesla ya supera la capitalización de diez empresas competidoras. ¿Ejemplos? Toyota, Volkswagen, Daimler y Ford.

De esta manera, la cotización total de la empresa ahora es superior a la combinada de las 10 empresas más importantes del sector automotriz, que alcanzan un valor de u$s1,01 trillones, aproximadamente.

Elon Musk hace oro todo lo que toca: Tesla ya vale más que 10 automotrices juntas

El gurú financiero Claudio Zuchovicki explicó que son varios los factores que se deben considerar para que una situación así se dé en el mundo de los mercados.

Por un lado, está el hecho de que Tesla no se dedica a vender solamente autos. La empresa tiene una gama de productos y servicios que apuntan a un mismo fin: pasar del uso de combustible a la energía eléctrica en el transporte.

"Hoy, Tesla no solo fabrica vehículos completamente eléctricos, sino que también suministra productos de generación y almacenamiento de energía, limpia y escalable", explican en el sitio oficial de la empresa.

Esto también puede verse en las baterías que desarrolla y que suelen ser utilizadas tanto por sus autos como por la competencia, así como también paneles solares y software.

Musk y el Bitcoin: una relación complicada

Entre enero y marzo pasado, Tesla aceptó a Bitcoin, como la criptomoneda con mayor valuación como medio de pago para la compra de sus vehículos eléctricos. 

Esta táctica ocurrió como parte de una adopción más amplia de Bitcoin por parte de Tesla, con la firma también invirtiendo u$s1.500 millones de su tesorería en la criptomoneda durante el primer trimestre de 2021.

Sin embargo, la aceptación a Bitcoin fue rápidamente abandonada después de que la firma se enfrentara a las críticas por soportar al activo a pesar de las percepciones de que la minería de prueba de trabajo tiene un impacto negativo en el medio ambiente.

No para de crecer, la automotriz que vale más que sus competidores

Más adelante, en julio, el magnate tecnológico y fanático de Doge, indicó que Tesla consideraría reanudar el soporte a los pagos de Bitcoin una vez que al menos la mitad de la tasa de hash de la red sea alimentada por energía renovable.

El informe se conoció en medio de la noticia de que la capitalización de mercado de Tesla superó u$s1 billón tras cerrar un acuerdo histórico con la empresa de alquiler de autos Hertz.

El precio de las acciones de Tesla también trepó a cerca de u$s1.000 por unidad por primera vez.

Por otro lado, para consternación de los poseedores de Shiba Inu Coin, Musk tuiteó que sólo posee Bitcoin, Ethereum y Dogecoin.

El lunes pasado, el usuario de Twitter Shiba Inu Holder tuiteó a al CEO de Tesla preguntándole cuánto SHIB tiene, a lo que Musk respondió: "nada". "Por curiosidad, adquirí algunas cadenas de hash ascii llamadas 'Bitcoin, Ethereum & Doge'. Eso es todo", añadió.

El acuerdo con Hertz

Hertz, la firma de autos de alquiler con sede en FloridaEstados Unidos, acaba de realizar un pedido récord a Tesla para modernizar su flota de vehículos: 100.000 unidades del Model 3.

Y si bien no trascendió la cifra final del acuerdo entre las compañías, expertos lo sitúan en la órbita de los u$s4.000 millones al calcular una cifra de u$s40.000 por vehículo.

Es importante destacar que las empresas de alquiler de automóviles suelen exigir grandes descuentos a los fabricantes de automóviles al momento de concretar este tipo de operaciones.

Según explicaron desde la compañía, el acuerdo estipula como fecha de entrega fines de 2022, y también comprará cargadores de vehículos eléctricos.

La empresa de alquiler de autos Hertz acaba de salir del periodo legal de protección que tienen las compañías al declararse en bancarrota, situación a la que llegó en mayo de 2020 debido al impacto de la pandemia.

La que es considerada como la segunda empresa más importante en el mercado de alquiler de autos, se declaró en bancarrota después de amplias restricciones de viaje por la pandemia de COVID-19 y el colapso económico global que tiró la demanda de sus servicios.

Con pérdidas de u$s356 millones, según sus últimas cuentas anuales, y deudas de u$s19 millones –a la que se suman millones en activos– Hertz no tuvo mayores opciones que una reestructuración financiera de su negocio en los Estados Unidos y Canadá.

Esta reestructuración, aunque le permitirá operar en otros mercados como Europa y México, debido a que en estos mercados su operación se limita al franquiciado, deja en una mala posición a la compañía.

De esta manera, la epidemia vino a marcar un punto de quiebre para un negocio que ya tenía problemas desde hace algunos años, los cuales lo llevaron a buscar nuevas opciones de negocio que ahora mismo podrían beneficiar a Uber.

En junio pasado, designó al exCEO de Ford, Mark Fields, como CEO interino en octubre, quien se planteó como objetivo llevar a la firma a tener la flota de alquiler de vehículos eléctricos más grande de Norteamérica.

 

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