En el proyecto no de ley enviado por el PSOE, el partido promueve la evaluación de la factibilidad de una moneda pública digital (conocida por sus siglas en inglés como CBDC, siglas de Central Bank Digital Currency). Esta moneda estaría vinculada al precio del euro y sería la primera en Europa de este tipo.
Incluso el Banco Central Europeo tiene un proyecto para implementar el euro digital como moneda única en la Eurozona.
Los motivos con los que se sustenta el pedido se basan en la «estabilidad financiera» que —según los autores del proyecto— podría otorgar esta CBDC. Además, se destaca que esto daría lugar a que se «recupere el carácter del dinero como bien público y bajo control democrático».
Asimismo, se suman otros fundamentos, como por ejemplo la oferta de una alternativa pública ante «el auge de las nuevas formas de pago digitales», muchas de las cuales escapan a la regulación bancaria, dice el proyecto. En el mismo sentido, se explica que esto facilitaría la inclusión financiera de ciertos sectores sociales que hoy no cuentan con este servicio, y también que representaría una solución frente «al declive del uso de dinero en efectivo».
Para diferenciar esta criptomoneda pública de las privadas —como por ejemplo bitcoin (BTC)—, los legisladores españoles remarcan la «elevada volatilidad de la cotización» de las segundas, así como también «su importante impacto ambiental».
Asimismo, se añade un «tercer problema», que sería «la posibilidad de anonimato que estas criptodivisas ofrecen, que facilita su utilización en actividades ilícitas y en evasión fiscal». En este sentido, el diseño de las CBDC prevé un anonimato que se reduce a medida que los montos de las transacciones aumentan. Cabe aclarar, además, que bitcoin no es anónimo, sino seudónimo.
El rol del Banco de España
Más allá de esta iniciativa parlamentaria, el Banco Central ya había hecho público su interés por las monedas digitales oficiales en mayo de 2021. La entidad bancaria más importante del país europeo publicó un análisis sobre los beneficios de una moneda de este estilo en su Revista de Estabilidad Financiera nro. 40, entre los que incluyó su eficiencia, transparencia y la mayor trazabilidad de las operaciones.
Incluso otros organismos del Estado español han expresado su inclinación por adoptar la tecnología blockchain para volver más eficientes sus tareas. Por ejemplo, el Ministerio de Economía trabaja en un nuevo método de procesamiento de las operaciones bursátiles a través de la cadena de bloques. Esto, según reportó este medio, permitiría reducir los tiempos de las transacciones y las comisiones a los intermediarios involucrados en esta actividad.
Fuente: Criptonoticias