Por más de dos décadas, Google fue el motor de búsqueda de internet que monopolizó el juego, aunque esto podría cambiar con la aparición en escena de herramientas como ChatGPT, Perplexity AI o Copilot.
La irrupción de la inteligencia artificial (IA) con sus modelos de conversación podría destronar a Google, que todavía conserva más del 90% del mercado de búsquedas móviles, como motor de exploración.
Según datos de Similarweb, en marzo de 2025 los chatbots de IA registraron 233 millones de visitas diarias, mientras que los buscadores tradicionales acumularon 5.500 millones.
Aunque todavía existe una gran diferencia, el tráfico de los chatbots creció un sólido 80,9% interanual, mientras que el de los buscadores se mantuvo prácticamente estancado, según Lifewire en 2025.
¿Qué se busca hoy con IA?
A diferencia de lo que se encuentra en Google, hoy los usuarios quieren una respuesta directa, contextualizada y escrita en lenguaje natural.
Los usos más frecuentes de estos nuevos motores son:
- Explicaciones conceptuales
- Comparaciones de productos
- Redacción de textos o resúmenes
- Recomendaciones personalizadas
- Traducciones y reformulaciones
Por su parte, Héctor Ferraro, Director Backend y Cognitive en Snoop Consulting, le comenta a iProUP que hoy se está ante un cambio profundo en la forma en que las personas interactúan con la tecnología y acceden a la información.
"La inteligencia artificial ya no es solo una herramienta de automatización, sino un nuevo intermediario cognitivo entre el usuario y el conocimiento. Modelos como ChatGPT, Gemini o Claude están desplazando progresivamente a los buscadores tradicionales en ciertos tipos de consultas, no porque sean más veloces, sino porque ofrecen una experiencia de interacción más humana y resolutiva", sostiene Ferraro.
Es por eso que el ejecutivo hace hincapié en que actualmente se pasa de una lógica de búsqueda a una lógica de conversación, ya que antes se debía saber qué buscar y cómo formularlo para recibir enlaces.
"Hoy, simplemente planteamos una necesidad o una duda y recibimos una respuesta elaborada, contextualizada y, muchas veces, accionable. Ese cambio, aunque todavía en desarrollo, marca el inicio de una era donde la IA no solo acompaña, sino que transforma activamente la experiencia digital", añade.
¿Por qué se critica el uso de ChatGPT como motor de búsqueda?
Por último, Ferraro explica que la crítica sobre el uso de ChatGPT como motor de búsqueda surge del riesgo de tomar a la IA como fuente única y absoluta, y en ese sentido, es un debate saludable.
"Herramientas como ChatGPT están diseñadas para ofrecer respuestas basadas en probabilidades lingüísticas, no en hechos verificados o actualizados en tiempo real. Eso significa que, aunque pueden ofrecer explicaciones claras y útiles, también pueden incurrir en errores, sesgos o desactualización", manifiesta.
De esta forma, el ejecutivo aclara que el problema no es el uso de IA, sino su uso acrítico, ya que esta puede ser un excelente punto de partida para entender un tema, inspirarse o reducir tiempos de investigación preliminar, aunque siempre debe complementarse con contraste de fuentes, chequeo de datos y criterio humano.
"En definitiva, lo que se necesita es más alfabetización digital, entender qué puede y qué no puede hacer la IA, para aprovecharla con responsabilidad y no como un oráculo incuestionable", concluye Ferraro.