Las plataformas de streaming se convirtieron, en el último tiempo, en un nuevo blanco para los ciberdelincuentes: en el último año, más de siete millones de cuentas de servicios como Netflix, Disney y Prime Video fueron hackeadas o duplicadas.

El dato no pasó desapercibido. Muchas de esas credenciales —que permiten el acceso a aplicaciones de entretenimiento masivo y forman parte del día a día digital de millones de usuarios— terminan circulando en foros ilegales, donde se venden o comparten.

Un informe de Kaspersky reveló que los países más golpeados por este tipo de ataques en América Latina son Brasil y México, que lideran el ranking de accesos vulnerados. En tercer lugar aparece Argentina.

Plataformas de streaming: cómo se roban las cuentas

Los ciberatacantes no suelen vulnerar directamente las plataformas, sino que apuntan a los dispositivos desde los cuales los usuarios acceden a ellas.

Muchas veces lo hacen mediante malware oculto en aplicaciones no oficiales, sitios de contenido pirata o extensiones de navegador que se instalan de forma silenciosa.

Una vez activos, estos programas maliciosos recolectan información sensible sin que el usuario lo note: contraseñas, cookies, datos personales e incluso bancarios. Toda esa información termina en bases de datos que luego se comercializan en la web.

De las más de 7 millones de cuentas comprometidas, más de 5,6 millones corresponden a Netflix. Es la plataforma más popular del mundo y también la más vulnerada. Le siguen Disney con 680.850 cuentas filtradas y Amazon Prime Video, con 1.607 casos detectados.

Qué hacer para protegerte

Las recomendaciones de Kaspersky son:

El auge de las plataformas de streaming las convirtió en un blanco cada vez más tentador para los hackers. En muchos casos, las víctimas no llegan a notar que su cuenta fue comprometida hasta que el daño ya está hecho.

"Las amenazas no siempre se ven. Basta con descargar una app no oficial o hacer clic en un enlace sospechoso para que el malware empiece a recolectar datos sensibles", explicó María Isabel Manjarrez, investigadora de Kaspersky.

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