Luego de un proceso de expansión durante y post pandemia, muchas empresas tecnológicas han dejado de contratar personal y optaron por reducir su nómina de empleados para afrontar el adverso contexto internacional.
Así, en menos de un año, la tecnología ha dejado de ser el lugar ideal en el que trabajar, para convertirse uno de los más competitivos a la hora de tratar de conseguir un trabajo, si es que lo encuentra.
Pero los despidos masivos en las empresas tecnológicas globales también significaron un alivio a la presión que tienen las firmas argentinas por la retención de los recursos humanos más capacitados.
Los gigantes tecnológicos IBM y SAP anunciaron la semana pasada recortes en sus plantas de 3.900 y 3.000 empleados respectivamente, sumándose así a los recientes despidos de firmas como Google, Amazon, Microsoft y Meta, en un sector golpeado por la desaceleración económica mundial y una transición en sus negocios.
Consultado por el impacto en la Argentina de los despidos anunciados por las grandes firmas globales del sector tecnológico, Alejandro Servide, de la consultora Randstad, explicó que "puede incluso aliviar un poco la presión adicional que genera en el mercado laboral local la demanda de empresas del exterior que pujan por el talento argentino".
"Argentina tiene un creciente déficit de perfiles de tecnología, que se hace aún más crítico a partir de la aceleración de la transformación digital y la mayor deslocalización de los trabajos impulsada por la pandemia, que ha roto las pocas barreras que aún frenaban la competencia literalmente global por este tipo de talento", subrayó el experto.
Servide, explicó que "la ola de despidos en las empresas tecnológicas en Estados Unidos tiene más que ver con un factor de corrección de expectativas y otros condimentos atados al mercado de capitales".
Agregó que la posibilidad de trabajar en forma remota "desde cualquier lugar y para cualquier lugar" es visto como "muy bueno", porque "genera más opciones de salida laboral y mayores oportunidades para el talento argentino".
Pero señaló que "la contracara" es que "puede ser una gran amenaza para la competitividad de las empresas locales y a fin de cuentas de la competitividad del país, porque no es otra cosa que una ´fuga de talento´ que se puede agravar aún más desde el momento que la emigración ya no es física, sino virtual, y eso la hace más fácil, ya que de algún modo dejar el país y los vínculos funcionaba como barrera de contención".
El titular de la Asociación Gremial de Computación (ACG), Ezequiel Tosco, añadió que existe una diferencia salarial ya que en Argentina los sueldos no están regulados bajo Convenio Colectivo, por ello hay firmas que pagan sueldos bajos mientras reciben ingentes cantidades de recursos de parte de todos los argentinos.
Por su parte desde la Unión Informática, señalaron a la agencia de noticias Télam que hoy se verifica "una merma en el sector tecno a nivel global, y habrá una baja en todos los sectores y todas las actividades por la tecnología y la cuestión económica en general".
"Hace tiempo que las empresas no están contratando personal, y más precisamente están en un declive de contratación", añadieron, y destacaron que, en muchos países, como en la Argentina, "hay otros sectores que requieren un fuerte trabajo de digitalización y ahí se pueden volver a generar puestos de trabajo en lo inmediato".
"La situación internacional presenta una muy buena oportunidad para desarrollar y mejorar los esquemas de exportación para las empresas argentinas, y el buen trabajo desde la Secretaria de la Economía del Conocimiento así lo entiende, integrando más empresas Pymes a la Ley de promoción", valoraron.
El sitio especializado TradingPedia elaboró un ranking de las empresas que más despedidieron en 2022, tomando como fuentes declaraciones de las emprsas, así como sitios como web Layoffs.fyi, y el resultado es el siguiente:
Amazon es la empresa que durante 2022 más empleados ha despedido; nada más y nada menos que a 18.000 trabajadores.
Su CEO, Andy Jassy, ha apuntado a "la incertidumbre económica" y la excesiva velocidad de las contrataciones en el pasado como principales motivos de los despidos.
Le sigue Google, que reducirá su plantel un 6%, lo que significa despedir a casi 12.000 personas.
El CEO de Google, Sundar Pichai, ha dicho que los despidos son por la situación económica compleja actual y, en especial, por su contraste con el crecimiento que había vivido el sector durante la pandemia.
Apurado por malos resultados y con los gobiernos pegándole fuerteconregulaciones al core de su negocio, Meta tomó la decisiónde eliminar 11.000 puestos de trabajo, un sorprendente 13% del total de empleados.
Microsoft se suma a la ola de despidos ejectandoa 11.000 trabajadores, un 6% de su plantilla.
Para su CEO, Satya Nadella, el tomar esta decisión fue para intentar alinear su "estructura de costes" con sus ingresos con el fin de intentar cumplir con la demanda de sus clientes.
También con la excusa de "reequilibrar la organización" ahorrando 580 millones de dólares, Cisco despide al 5% de sus empleados, lo que significa quecasi 4.100 personas han perdido su trabajo en la empresa.
El fabricante de bicicletas estáticas tuvo un verdadero mal año. Se desplomaron sus acciones y su valor de mercado en picada, ha perdido cuota de mercado,y eso ha redundado en tomar la decisión de despedir a más de la mitad de su plantilla, con 4.000 puestos de trabajo recortados.
Lo de Twitter esuna historia en progreso, porque se especula que aún podría despedir más gente de la anunciada.
Mientras se espera qué pasará, lo cierto es que ya han perdido su trabajo 3.700 personas. Cifra alta considerando que son sólo 7.500 en total.
Una situación llamativa es la de SalesForce, ya que sus números estaban dando bien, y en realidad ha hecho el anuncio,pero aún no se ha llevado a cabo, y lo formalizaría el mes que viene, febrero.
Mientras se esperaa ver si cumple, anunció que dejará en la calle a 2.500 personas.
A estro hay que sumarle los miles que han quedado en la calle por la crisis cripto, y otros miles en despidos de meno rescala alrededor de empresas del planeta, por lo que la cifra final es alta y desalentadora