La cantidad de vehículos eléctricos patentados en todo el país durante 2020 creció 53,9% interanual, al sumar 2.833 unidades, informó la Asociación de Concesionarios de Automotores de la Argentina (ACARA).
Los modelos eléctricos más patentados fueron el Toyota Corolla, el Toyota RAV 4 (ambos con el 67% del total) seguidos muy de lejos por el Ford Kuga (poco más del 8% del mercado).
ACARA destacó que la Argentina tiene proyectos de ley en agenda desde hace tiempo para promover la utilización de vehículos eléctricos y sistemas de movilidad sostenibles.
Sin embargo, advirtió que esas iniciativas "no avanzan por múltiples motivos", aunque destacó que están vigentes decretos que benefician la importación de este tipo de vehículos (331/2017 y 230/2019) los que otorgan aranceles preferenciales para la importación.
Estos decretos reducen la alícuota al 5% para los híbridos (HEV/PHEV) y 2% para los eléctricos puros (BEV), detalló la entidad empresaria.
Y explicó además que dado que todos los vehículos que se ofrecen en el país son producidos fuera del Mercosur, el arancel extrazona aplicable sería del 35%.
Según ACARA, uno de los mayores desafíos de esta tecnología en la región es el que representa la propia geografía de los países: Brasil, Argentina y México tienen mayores dificultades que Uruguay, Costa Rica o Ecuador a la hora de diseñar los llamados "corredores eléctricos", por obvias razones de distancia.
Por otra parte, la entidad consideró clave la matriz energética de cada país, ya que para algunos como Chile (carbón), Argentina o Perú (gas natural), la electrificación del parque vehicular implica también un desafío extra para aumentar la participación de energías renovables en la matriz.
"Sin eso, sólo se produciría un desplazamiento de emisiones del sector transporte al de generación eléctrica", alertó.
Otro punto que agrega "complejidad y disparidad" en la región, según ACARA, es el de los países que hoy tienen industria automotriz nacional, como México, Brasil y Argentina, ya que deben encontrar la forma de armonizar el desarrollo de políticas de electromovilidad con un modelo industrial de producción local.
Otros países, como Chile, cuya oferta es 100% importada y sujeta a acuerdos de libre comercio con casi todas las zonas de producción, representan un potencial más grande para que la tecnología avance y lo haga a buena velocidad, indicó esa Asociación.
Hoy, el mercado cuenta con varias propuestas con diferentes mecánicas y una amplia brecha de precios y beneficios impositivos, que los convierten en vehículos con precios accesibles o similares a otros modelos equivalentes con motores tradicionales.
Hay cuatro opciones de motorización que las marcas que están en Argentina eligieron para desembarcar:
Uno de los sistemas de más fácil utilización es el de propulsión híbrida. En la práctica, funciona como un auto naftero o diésel, con la diferencia que a baja velocidad se activa el eléctrico y, pasado cierto límite, el convencional.
A continuación, un recorrido por las principales propuestas existentes en el país.
El modelo pionero en el país en ofrecer tecnología híbrida fue el Toyota Prius, en 2009, que nació híbrido. Pero no se popularizó hasta que llegaron más competidores y este tipo de propulsión se difundió en el mercado. También ayudó la llegada de la segunda generación del modelo, que lo hizo más atractivo.
En este caso, el vehículo combina un motor a combustible y otro eléctrico, con tres opciones de funcionamiento: el propulsor naftero, el eléctrico o ambos. El precio oficial es de u$s44.000 o $3.385.800 (unos u$s22.000 al tipo de cambio paralelo).
La firma japonesa luego presentó su SUV mediano RAV4.
En este caso, funciona con dos motores (naftero eléctrico) que trabajan conjuntamente, otorgando una potencia total de 222 CV para la versión AWD y 218 CV para las variantes 4x2. La batería se regenera automáticamente cuando el vehículo desacelera o frena, sin necesidad de enchufarse.
El RAV4 se ofrece en tres versiones, alcanzadas por la tasa interna (están exentas del extrazona del 35%, pero sí las afecta el impuesto al "lujo"), con los siguientes precios:
El tipo de cambio sugerido por la marca es de $77 aproximadamente. Sin embargo, quien tiene los dólares y los vende en el mercado informal, requerirá prácticamente la mitad: unos u$s24.000 para el primer modelo.
Otro híbrido que ofrece es el nuevo CH-R, un SUV más chico que llegó al mercado en 2019.
Este modelo se vende en una sola versión que es la HV 1.8 eCVT: en términos de dólar blue, su valor ronda los u$s22.000.
Por último, uno de los modelos más populares de la marca y líder de los sedanes medianos, el Corolla, también tiene motorización híbrida en dos versiones:
De esta manera, para acceder a la gama Corolla híbrida, se requieren de unos u$s15.000 a cotización blue.
La oferta de la marca en esta categoría se limita a modelos híbridos: el Mondeo, un sedán grande, y el Kuga, un SUV mediano.
El sedán fue el primero en llegar al mercado, estrenando al mismo tiempo la versión Vignale, la más equipada del mundo.
El Ford Mondeo tiene un valor de $4.306.500. Sin embargo, en términos de dólar blue, de unos u$s29.000.
En el caso del Kuga, su sistema de propulsión se compone por:
Este SUV tiene un precio oficial de $3.859.900 (u$s26.000 al paralelo).
La segunda ampliación de modelos con tecnologías alternativas y más amigables con el medio ambiente fueron los eléctricos. En este caso, el mayor desafío es garantizar una autonomía lo más extensa posible. Por ejemplo, para el Leaf es de casi 400 kilómetros.
Todo depende del uso, la aceleración y frenado, ya que la recarga se produce en cada uno de los movimientos y paradas del vehículo,
El Nissan Leaf fue el primer auto de pasajeros eléctrico en llegar al país, en 2019. Según la prueba de iProUP, lo más llamativo es el nivel de insonorización, al punto que posee una luz verde en el tablero para saber cuándo está en marcha. Y un sonido suave indica que el vehículo va a retroceder.
El valor del Nissan Leaf es de u$s61.600, pero al tipo de cambio blue se achica a u$s32.000.
Por su parte, el Renault Kangoo se ofrece en dos versiones: una más reducida y otra max. También funciona 100% a batería.
Fue el primer eléctrico del mercado y hoy se vende por $2.681.500. Su principal ventaja es que, al ser vehículo de carga, no sufre el impacto del impuesto interno. Su precio a valor blue es de u$s17.990.
Es decir, es similar al de una pick up 4x4, uno de los segmentos más vendidos. La diferencia es que el costo de recarga de la batería eléctrica es mucho más económico que el combustible.
Además de la oferta de modelos de marcas, existen también propuestas en el segmento premium y fue justamente Audi la que inauguró la categoría de autos mild hybrid con el A7 Sportback.
Se diferencia del híbrido porque uno "convencional" integra un propulsor eléctrico que transmite torque a las ruedas, tiene una función 100% eléctrica para acelerar sólo con la potencia de sus baterías y, en algunos casos, permite recargarla enchufándola en un tomacorriente (plug-in hybrid).
En el caso del mild-hybrid, la función es asistir y complementar al motor de combustión interna. No transmite torque a las ruedas ni puede acelerar en modo 100% eléctrico: su tarea principal es alimentar los sistemas eléctricos del vehículo incluso cuando el motor naftero está apagado.
Los vehículos de este tipo tienen al menos dos baterías: la convencional de 12v (para el encendido del motor, que se recarga con el alternador) y otra complementaria de 48v de iones de litio, que cubre las necesidades de energía cuando el motor térmico está apagado. Esta última se alimenta con un generador de arranque por correa conectada al cigüeñal y con la energía cinética de las frenadas.
En Audi, el sistema mild-hybrid nació con el objetivo de adaptarse a cualquier coche de su gama. La batería de 48v está ubicada en el baúl y tiene el tamaño de una caja de zapatos.
La firma lo estrenó en el A7 Sportback, pero ya existen otros modelos con la misma tecnología: A4 Sedán, A6 Sedán, A6 Allroad, A7 Sportback, A8 y Q8.
En cuanto al A7, se ofrece con un motor V6 3.0 turbonaftero de 340 cv. Cuesta unos u$s80.000 al valor blue.
Por su parte, Mercedes Benz debutó hace más de un año con el EQC, un híbrido enchufable, y luego irrumpió en el mercado con el Clase GLE.
Es la cuarta generación de la SUV de Mercedes-Benz para el segmento grande que cuenta con un motor V6 3.0 turbonaftero con 367 cv, caja automática de nueve marchas y tracción integral 4Matic de acople automático. Además incorpora un propulsor eléctrico de 22 cv. Su precio, a la cotización del paralelo es de u$s90.000 a valor blue.
Por último, Porche ofrece su Taycan, un modelo de última generacion que llegó hace pocas semanas al país. Su versión es la Turbo S, que entrega una potencia de hasta 761 cv (560 kW) gracias a las funciones overboost y Launch Control. Además, es capaz de generar hasta 680 cv (500 kW).
El TaycanTurbo S, acelera de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, tiene una autonomía de hasta 412 kilómetros y una velocidad máxima de 260 km/h. Su precio equivale a u$s200.000 a la cotización informal.
Si bien algunas automotrices están desarrollando nuevos modelos de producción nacional para acaparar el segmento de los autos chicos, otras piensan incluir estas motorizaciones a todo su catálogo.
Uno de los casos más curiosos está en la categoría pickups, como Toyota Hilux, que estrenará motor híbrido; o las Ford F150 y Chevrolet Silverado eléctricas.
En general, las empresas fijan como plazo el año 2050 para abandonar por completo el motor convencional y varias prometen tener al menos una opción híbrida para 2025.
El futuro llegó: solo faltan más políticas de incentivos para que la gente confíe y los nuevos modelos estén al alcance del bolsillo.