El concepto de una transferencia no es un detalle menor: elegir uno incorrecto puede generar problemas fiscales con ARCA. Qué significa cada uno
22.09.2025 • 08:36hs • FINANZAS PERSONALES
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Transferencias desde bancos o billeteras: cómo elegir el concepto correcto y evitar impuestos de más
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Las transferencias, tanto desde o hacia cuentas de bancos o billeteras virtuales, se convirtieron en una herramienta habitual para millones de argentinos.
A principios de mes, son parte de la rutina: pagar alquileres, servicios, expensas, enviar dinero a familiares o repartir gastos compartidos.
Pero no todo depende del monto o el destino. Hay un detalle clave que puede marcar la diferencia entre una operación sin problemas y una retención imprevista: el concepto de la transferencia.
Qué es el concepto y por qué es importante
El concepto es el motivo que se declara al hacer una transferencia. Sirve para informar al receptor sobre el origen del dinero y, a la vez, funciona como respaldo ante reclamos legales o fiscales.
La lista varía según cada entidad, pero los más comunes son:
- Alquileres
- Aportes de capital
- Bienes registrables (habitualistas y no habitualistas)
- Cuotas
- Expensas
- Factura
- Haberes
- Honorarios
- Inmobiliaria (habitualista y no habitualista)
- Préstamos
- Seguros
- Suscripción a obligaciones negociables
- Varios
En algunos casos, como bienes registrables u obligaciones negociables, el banco puede exigir una declaración jurada para validar el motivo.
Además, cada transferencia permite agregar una referencia adicional, de hasta 12 caracteres, que brinda mayor detalle.
Qué pasa si se elige mal el concepto
Una mala selección puede derivar en retenciones fiscales automáticas, como el 2,5% por Ingresos Brutos, si la operación se interpreta como una actividad comercial.
También puede generar requerimientos adicionales de documentación, como facturas, o incluso problemas administrativos si no hay coherencia entre lo declarado y lo pactado.
Por ejemplo: si una transferencia responde a la venta de un producto o servicio, debe estar respaldada con una factura. De lo contrario, el banco puede aplicar retenciones y exigir la regularización vía un Volante Electrónico de Pago (VEP).
Transferencias que no pagan impuestos
Hay casos que están exentos de retenciones:
- Envíos entre cuentas del mismo titular.
- Movimientos entre cuentas judiciales.
- Operaciones de usuarios finales que no realizan actividad comercial.
Además, quienes estén inscriptos en el monotributo unificado pueden evitar algunas retenciones si están correctamente registrados ante ARCA y Rentas.
De esta manera, elegir el concepto correcto no es un detalle menor: de eso depende evitar impuestos que no corresponden, complicaciones legales y retenciones que después pueden llevar semanas de trámites para recuperar.
