El otorgamiento de créditos en la Argentina mostró un grado de recuperación durante el primer semestre de 2025: Según datos del Banco Central (BCRA) y reportes de entidades financieras, los préstamos alcanzaron su mayor nivel en siete años.
Este repunte comenzó a consolidarse tras la eliminación de los pasivos remunerados del BCRA en julio de 2024, medida que obligó al sistema financiero a retomar su rol de intermediación entre depósitos y créditos.
Sin embargo, aunque los bancos iniciaron el año con una participación en los créditos otorgados de 57% de las personas y de 83% de los montos en pesos, en mayo estas cifras se redujeron al 55% y 82%, según datos de la empresa de tecnología para el crédito y buró SIISA.
La compañía confirma una tendencia de movilidad en el rubro que incluye una mayor participación de los PNFC (Proveedores No Financieros de Crédito). Esta retracción inicial, sumada a la escalada en la morosidad, plantea un "escenario de alerta" para el segundo semestre, advirtieron.
El otorgamiento de créditos alcanza la cifra más alta en siete años
A pesar de que el mercado logró avances en inclusión financiera, como la ampliación del acceso a mayores de 18 años de 49% a 51%, y reportar un aumento de 20% en los montos otorgados, el desafío principal reside en el crecimiento de la mora.
Al tomar como referencia el stock total de créditos, el incumplimiento pasó de afectar a 14,3% de las personas y 5% del capital en diciembre de 2024, a alcanzar a 15,5% de las personas y 6,4% del monto total en mayo.
Esta tendencia se observa de forma diferenciada en los principales actores: Porcentualmente, los PNFC vieron cómo el incumplimiento de sus deudores subió 47%, mientras que los bancos enfrentaron un aumento en la mora de 67%.
Esto indica "mayores dificultades de pago en sectores que normalmente no la tenían, según mostraban los indicadores de períodos previos. Es previsible que esta tendencia al alza se mantenga en la segunda mitad del año", precisaron desde la empresa.
La pregunta clave que enfrenta el sistema de crédito es cómo bajar la mora sin frenar el crecimiento. Para lograrlo, cobra preponderancia cuestiones como:
- Refuerzo de recursos
- Innovación en tecnología
- Procesos de evaluación crediticia
"Instrumentos como los burós, scores de crédito y motores de decisiones de segunda generación permiten a las entidades financieras precalificar a los solicitantes de manera instantánea, minimizando el riesgo de insolvencia y contribuyendo a un crecimiento más sostenible y rentable", explicó Mariano Sokal, director de SIISA.
La automatización permite adaptar la oferta crediticia a la capacidad de pago real de cada persona, algo que beneficia a segmentos históricamente no bancarizados y fomenta un acceso al crédito más amplío.
"En un contexto de alza en la mora, uno de los caminos hacia un sistema crediticio más saludable para las personas en el segundo semestre de 2025 es la capacidad de adaptación de las empresas, que traerá como consecuencia mayor rentabilidad y menor aplazamiento de deuda", completaron desde SIISA.