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El economista Fausto Spotorno, exasesor de Javier Milei, afirmó que el préstamo del FMI y las recientes medidas del Presidente tienen como objetivo principal "ir dolarizando la economía" progresivamente.
Además, sostuvo que el llamado plan de "reparación de los ahorros" no representa un blanqueo de dólares, sino que busca ser una estrategia para remonetizar la economía nacional en el corto plazo.
"El Presidente quiere ir dolarizando la economía porque cree que es la única garantía de que no vuelva a aparecer la inflación en la Argentina", expresó Fausto Spotorno al analizar el rumbo actual del Gobierno.
A diferencia de otros economistas, sostuvo que el plan de "reparación de los ahorros" no busca captar dólares no declarados, sino avanzar en la remonetización mediante la reactivación del circuito financiero interno del país.
"La compra de dólares no es prioridad. El acuerdo con el FMI le permite (al Gobierno) comprar dólares y lo podría haber. Lo que quiere el Gobierno es monetizar la economía y que se monetice en dólares", consideró.
Spotorno señaló que, aunque se podría promover la monetización en pesos, el Gobierno opta por otra vía debido a la estrategia que considera clave para estabilizar los precios y frenar la inflación estructural.
"Lo que el Gobierno está necesitando es que se monetice la economía, pero no lo quiere hacer en pesos por temor a que no termine de bajar (la inflación)", afirmó el economista y exasesor presidencial.
El Gobierno lanzó un paquete de medidas para incentivar el uso de los dólares fuera del sistema, facilitar el consumo privado y reducir las restricciones que desalientan el movimiento libre de fondos entre cuentas y usuarios.
La iniciativa también apunta a limitar las obligaciones informativas que recaen sobre comercios, profesionales y servicios, al tiempo que promueve un marco más flexible para operar, ahorrar o transferir dinero sin temores a sanciones.
A continuación, se detallan los primeros cambios anunciados que eliminan regímenes informativos sobre actividades cotidianas:
Además de simplificar la carga fiscal, las nuevas reglas establecen límites más altos para que los movimientos financieros sean informados, lo que otorga mayor privacidad y flexibilidad a los usuarios dentro del sistema formal.
El titular de ARCA confirmó que también se prohíbe a los bancos exigir declaraciones juradas, y que se redefinen los umbrales que activan el control automático por parte del organismo.
Estos son los nuevos montos establecidos para operaciones, saldos y transferencias que ya no deberán informarse a ARCA si están por debajo del mínimo: