El mercado cripto atraviesa una fase de marcada fragilidad técnica a medida que se acerca el cierre del año. Los principales indicadores de tendencia reflejan una pérdida de impulso generalizada y refuerzan un clima de cautela entre traders e inversores.
Datos de TradingView muestran que 75 de las 100 principales criptomonedas por capitalización de mercado cotizan por debajo de sus medias móviles simples de 50 y 200 días. Esta señal técnica suele asociarse a escenarios bajistas y revela una salida de capitales del ecosistema cripto.
Dicho de otro modo, la presión a la que está expuesto el mercado radica en que tres de cada cuatro de las monedas más grandes están cotizando por debajo de sus precios promedio de los últimos dos y siete meses. Es decir, una señal de debilidad generalizada.
Bitcoin lidera este movimiento y opera por debajo de los niveles que marcaron su tendencia durante buena parte del año, luego de retroceder desde su máximo histórico superior a u$s126.000 hasta la zona de u$s87.000. La caída del activo de referencia condiciona al resto del mercado y debilita el apetito por riesgo.
Criptomonedas: qué pasó con Bitcoin
Entre los activos que cotizan por debajo de los promedios clave aparecen Bitcoin, Ether, Solana, BNB y XRP. En conjunto, estas criptomonedas concentran cerca del 78% de la capitalización total del mercado, estimada en torno a u$s3 billones.
La señal negativa en estos activos pesa más que en otros segmentos del ecosistema. Se trata de los tokens con mayor liquidez, mayor presencia institucional y participación en productos como futuros de la Bolsa de Chicago y fondos cotizados (ETF) spot. Cuando estos activos pierden soporte técnico, el efecto se amplifica sobre el resto del mercado.
El deterioro técnico también impacta en las altcoins de menor capitalización, en el que la liquidez resulta más limitada y el margen para movimientos abruptos se amplía en contextos de estrés.
Entretanto, la debilidad cripto contrasta con el comportamiento del Nasdaq 100. Solo 29 acciones del índice tecnológico cotizan por debajo de sus medias móviles de 50 y 200 días, lo que refleja una amplitud de mercado todavía favorable para las acciones.
"Bitcoin suele replicar los movimientos del Nasdaq, pero con mayor volatilidad", asegura a iProUP el analista financiero Enrique Nievas. "En fases bajistas, esa correlación amplifica las caídas y acelera los movimientos descendentes, un patrón que vuelve a aparecer en el actual contexto", agrega el experto.
Criptomonedas: cuáles están en zona de sobreventa
A pesar de la magnitud del retroceso, solo ocho de las 100 principales criptomonedas califican como sobrevendidas según el índice de fuerza relativa (RSI). En ese grupo aparecen PI, APT, ALGO, FLARE, VET, JUP, IP y KAIA.
El RSI, vale recordar, mide el impulso del precio en una escala de 0 a 100. "Valores por debajo de 30 indican sobreventa y posibles pausas en la caída", recuerda el analista financiero Rodrigo Mansilla.
"El hecho de que solo unos pocos activos alcance ese umbral sugiere que gran parte del mercado aún dispone de margen para nuevos descensos", señala el especialista.
Para muchos operadores, esta combinación de ruptura de medias móviles y ausencia de sobreventa funciona como una confirmación bajista y refuerza la expectativa de mayor presión antes de cualquier recuperación sostenida.
Criptomonedas: rebote técnico
Aún bajo este escenario de noticias poco alentadoras, hubo rebote moderado. Bitcoin avanzó cerca de un 3% y se ubica, al momento de esta redacción, por encima de u$s87.000, mientras Ether registra un desempeño más acotado (u$s2.945). Algunas altcoins exhiben subas puntuales, pero sin modificar el cuadro general.
Las acciones vinculadas al ecosistema cripto también reaccionan al alza, con subas de firmas como Strategy, Robinhood y Circle. Sin embargo, varios analistas describen el escenario como frágil y advierten que el rebote responde más a factores técnicos que a un cambio de tendencia.
"Las liquidaciones recientes en el mercado de derivados refuerzan esa lectura", argumenta Nievas. Para el experto, "las salidas forzadas de posiciones largas reducen el interés abierto y consolidan un entorno defensivo, en el que muchos operadores optan por reducir exposición y esperar nuevas señales".
Criptomonedas: las dos cifras
El foco ahora se traslada al frente macroeconómico. La demora en un giro monetario por parte de la Reserva Federal limita el apetito por activos de riesgo, mientras los datos de empleo en Estados Unidos suman ruido al escenario global.
En ese contexto, Bitcoin enfrenta una disputa de corto plazo entre la presión vendedora inmediata y su narrativa de largo plazo como activo de oferta limitada. La falta de catalizadores positivos sostiene la cautela y mantiene abiertas las probabilidades de nuevos testeos de soportes clave.
Según Paula Chaves, analista de mercado de HFM, dice a iProUP "por primera vez desde 2022, el mercado contempla la posibilidad de un cierre anual en negativo, no por falta de adopción ni de interés institucional, sino por un cambio estructural en la dinámica del mercado y en la forma en que se desarrollan las correcciones", comenta la experta, quien menciona dos cifras clave:
- "Desde su máximo histórico, Bitcoin acumula una caída cercana al 36%, encontrando una zona técnica mensual relevante en torno a los u$s80.000, niveles que comienzan a despertar interés comprador"
- Una recuperación sostenida por encima de los u$s95.000 sería la primera señal de reactivación del impulso alcista
Por ahora, las métricas técnicas marcan el pulso y dejan en claro que el mercado cripto todavía camina sobre terreno inestable.