Bitcoin finalizó octubre con una caída del 3,17%, rompiendo su racha alcista de siete años durante el histórico "Uptober", un período tradicionalmente favorable que esta vez marcó un giro inesperado en el sentimiento de los mercados globales.
El retroceso encendió alertas entre los inversores, que observan con cautela el comportamiento histórico: los octubres negativos han anticipado meses de noviembre extremadamente volátiles y, en ocasiones, con fuertes caídas en el valor del activo.
Por primera vez desde 2018, Bitcoin cerró octubre con un descenso de 3,17%, situándose cerca de los 108.000 dólares, un movimiento que puso fin a siete años consecutivos de subas durante este mes históricamente alcista.
Para revertir la tendencia, la criptomoneda necesitaba superar los 114.000 dólares, un nivel que no logró alcanzar pese al impulso inicial que había generado optimismo en los primeros días del mes.
La pérdida del impulso se atribuye a una combinación de tensiones geopolíticas, incertidumbre macroeconómica y ajustes en la política monetaria de la Reserva Federal que fortalecieron la demanda de dólares.
La búsqueda de liquidez en los mercados internacionales redujo el apetito por riesgo, limitando la entrada de capital hacia los activos digitales, y frenando así la expansión sostenida que Bitcoin mostraba desde comienzos de año.
Aunque octubre no fue completamente bajista, el activo tocó un máximo histórico de 126.000 dólares el día 6, antes de un desplome abrupto impulsado por la escalada comercial entre Estados Unidos y China.
Ese choque desencadenó liquidaciones por 19.000 millones de dólares, llevando el precio a 103.000 y dejando a los inversores en alerta frente a un entorno global de creciente volatilidad y tensiones.
El último antecedente de un octubre negativo se remonta a 2018, cuando noviembre registró una caída del 36,57%, un recuerdo que todavía pesa sobre la mente de los operadores más veteranos del ecosistema.
Los analistas destacan que, históricamente, noviembre suele ser positivo para Bitcoin, con un retorno promedio del 46%, aunque los contextos actuales difieren significativamente de los ciclos anteriores.
Cyclop, referente del análisis cripto, advirtió que "en 2018, un octubre negativo del 3% fue seguido por un desplome en noviembre", mientras que AlejandroBTC sintetizó el sentimiento general: "Octubre plano. Noviembre nuclear. Diciembre muerto".
Crypto Profe coincidió en describir el escenario como "aterrador", y ese conjunto de percepciones refleja un mercado dominado por la cautela, en el que la volatilidad macro y las tasas de la Fed agregan incertidumbre.
El mercado de 2025 presenta un entorno distinto al de otros ciclos bajistas, ya que la caída de octubre ocurrió pese a los recortes de tasas de la Fed, que en teoría suelen favorecer a los activos de riesgo.
A la incertidumbre monetaria se suman los conflictos comerciales y geopolíticos que afectan directamente el apetito por inversión en activos volátiles, limitando el impacto positivo de los estímulos económicos.
"$BTC tocó el nivel de soporte de $108,000 y ahora está repuntando. Pero aun así, este repunte no pinta bien. La razón es que los ETF y las ballenas siguen vendiendo. Hasta que Bitcoin recupere el nivel de los 112.000 dólares con una fuerte demanda spot, la tendencia general será a la baja", explicó el analista Ted.
Los expertos señalan que, aunque las condiciones actuales invitan a la cautela, también podrían ofrecer oportunidades si el precio logra estabilizarse y recuperar la confianza institucional en el corto plazo.
Por ahora, las primeras semanas de noviembre serán decisivas para determinar si el quiebre de la racha de Uptober marca un cambio estructural o simplemente una pausa temporal.
El desenlace dependerá de cómo el mercado procese la presión vendedora y si logra capitalizar los ajustes macroeconómicos para retomar una tendencia de crecimiento sostenido.