El precio de Bitcoin (BTC) volvió a ponerse en el centro de la escena al iniciar octubre, con un movimiento que lo llevó a superar los u$s120.000 por primera vez desde agosto, cuando marcó su récord histórico o ATH (all time high) de u$s124.500.
Así, la criptomoneda no defraudó: octubre, llamado en la jerga UPtober por ser históricamente alcista, comenzó el mes con la pizarra en verde. El mercado ahora se pregunta si este mes puede marcar el inicio de una etapa de suba sostenida o si la volatilidad seguirá imponiendo cautela.
Los analistas coinciden en que el cruce de variables técnicas, regulatorias y corporativas genera un terreno fértil para que la criptomoneda más grande del mundo busque superar sus resistencias y se encamine hacia un nuevo descubrimiento de precios.
Los datos on-chain muestran que el mercado puede estar atravesando una fase de acumulación. Según Glassnode, la métrica RVT de los holders a corto plazo viene comprimiéndose desde mayo, reflejando un "enfriamiento" del exceso especulativo.
Al mismo tiempo, la presión vendedora de los holders a largo plazo se redujo luego de meses de toma de ganancias. El indicador de cambio neto de posición de estos inversores pasó a terreno neutral, lo que sugiere que el flujo de BTC disponible en el mercado se estabilizó.
"Si esta dinámica se mantiene, Bitcoin estaría construyendo un soporte estructural en la zona entre u$s115.000 y u$s120.000, un rango similar al de marzo y abril, cuando una etapa de consolidación terminó dando paso a un rally que lo llevó a romper resistencias previas", señala a iProUP la contadora y analista cripto Juliana Pereyra.
El mercado también sigue de cerca indicadores de corto plazo. El STH-SOPR, que mide si los tenedores de corto plazo venden con ganancia o pérdida, mostró que durante septiembre estas billeteras atravesaron un período de presión, vendiendo en negativo. Pero la métrica comenzó a recuperarse en los últimos días, lo que podría indicar que la oferta especulativa se está absorbiendo y que los vendedores débiles ya quedaron fuera del juego.
Para varios traders, el nivel de u$s118.000 es clave: consolidar por encima de esa cifra abriría el camino a un escenario de "descubrimiento de precios", donde el mercado ya no encuentra referencias técnicas previas y se orienta hacia nuevos máximos históricos.
"El cierre diario sobre los u$s118.000 es lo único que falta para confirmar el cambio de tendencia", comenta el analista Emiliano Luque a iProUP. De lograrlo, el especialista sostiene que "las proyecciones más optimistas hablan de un rally hacia la zona de u$s130.000 y u$s135.000 en el corto plazo".
La coyuntura macroeconómica también juega un papel determinante. El reciente cierre del Gobierno en Estados Unidos reforzó la narrativa de Bitcoin como refugio de valor. Al igual que el oro, el activo reaccionó al alza en medio de la incertidumbre política, mostrando que los inversores lo perciben cada vez más como un "seguro" frente a la volatilidad institucional. Al borde de los u$s121.000 al momento de esta redacción, las primeras horas de octubre traen buenas sensaciones.
En paralelo, el mercado laboral estadounidense dio señales de debilidad y los futuros de la Fed reflejan una expectativa creciente de recorte de tasas en octubre. Un movimiento en esa dirección podría aumentar el flujo de capital hacia activos de riesgo como Bitcoin y acelerar la entrada de fondos institucionales.
Por si fuera poco, el Tesoro de EE.UU. sorprendió al excluir a los activos digitales del impuesto corporativo mínimo del 15%. La medida fue interpretada como una señal de respaldo a la innovación y un incentivo para que empresas e inversores adopten más criptomonedas en sus balances. Tras el anuncio, el precio de BTC y de otras altcoins reaccionó de manera inmediata al alza.
El plano corporativo también dio señales que impactaron en el ánimo del mercado. Tether, la compañía detrás de la stablecoin USDT, cerró septiembre con la compra de 8.888 BTC, elevando sus reservas totales a 87.475 unidades.
El detalle no pasó inadvertido: la elección del número 8.888 responde a un guiño cultural asociado a la abundancia y la prosperidad en Japón, lo que refuerza la idea de optimismo en torno a la estrategia de acumulación de largo plazo.
Con soporte técnico en u$s115.000, resistencia inmediata entre los u$s118.000 y los u$s120.000, y un contexto macro que favorece a los activos de riesgo, el escenario para octubre se presenta como un punto de inflexión.
Si Bitcoin logra consolidarse por encima de los u$s120.000, los analistas proyectan que la próxima zona de objetivos se ubicaría entre u$s130.000 y u$s135.000. Una ruptura decisiva puede incluso abrir la puerta a la búsqueda de nuevos máximos históricos antes de fin de año.
La expectativa se inclina hacia un "octubre alcista". El cruce de acumulación on-chain, apoyo institucional y señales regulatorias más amigables conforma un cóctel que podría darle a Bitcoin el envión necesario para retomar su camino hacia la cima.