BlackRock, reconocido como el mayor administrador de activos del planeta, formalizó en Delaware el registro del nombre "iShares Bitcoin Premium Income ETF", un paso inicial antes de una presentación oficial ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos.
El producto se basará en una estrategia de "compra cubierta" con bitcoin (BTC), que combina la tenencia directa de la criptomoneda con la venta de opciones de compra sobre futuros, buscando ingresos adicionales por las primas generadas.
Según el analista de ETF de Bloomberg Intelligence, Eric Balchunas, el objetivo de este enfoque es proporcionar dividendos regulares a quienes prefieren rentabilidad constante por encima de la exposición pura al precio del activo.
Este movimiento muestra el interés de BlackRock por ampliar su presencia en el mercado de criptomonedas con herramientas que ofrezcan estabilidad de flujo de caja sin abandonar la innovación financiera.
El registro de este nuevo ETF se produce tras el éxito del iShares Bitcoin Trust (IBIT), que desde su debut en enero de 2024 ha captado más de 60.000 millones de dólares en entradas netas, alcanzando actualmente unos 87.000 millones en activos administrados.
A diferencia de IBIT, que replica de forma directa el precio del bitcoin, el flamante proyecto pretende suavizar las fluctuaciones del mercado gracias a la generación de ingresos derivados de la venta de opciones.
La estructura legal también varía: la Securities Act de 1933 exige un prospecto detallado para proteger a los inversores en ofertas primarias, un marco que encaja con este nuevo fondo y que podría agilizar su aprobación y distribución.
Por su parte, la Investment Company Act de 1940 supervisa a fondos de inversión tradicionales, con normas estrictas de diversificación y protección al accionista, que no resultan necesarias para esta propuesta.
Elegir la Ley 33 permite a BlackRock diseñar un producto más flexible para quienes buscan retornos constantes, sin los requisitos de diversificación propios de los ETF clásicos.
El especialista Eric Balchunas subrayó la relevancia de que la firma continúe priorizando a bitcoin, a pesar de que otras criptomonedas también se acercan a obtener sus propios ETF en el mercado estadounidense.
"Esto significa que [BlackRock] se centrará en BTC y ether (ETH) y dejarán de lado el resto, al menos por ahora", comentó Balchunas.
"Esto hace que la competencia por estas otras criptomonedas sea mucho más abierta. Por otro lado, todos los demás ETF de opciones de compra cubiertos por bitcoin que están en el mercado o en proceso de registro, es difícil que tengan oportunidad", añadió el experto.
Según datos de SoSoValue y Strategic ETH Reserve, los ETF de Ether al contado gestionados por BlackRock registraron entradas netas por u$s233,5 millones en una sola jornada y rompieron así una racha de cuatro días consecutivos de salidas que había generado preocupación entre los operadores.
Esta inyección de capital elevó las reservas totales del iShares Ethereum Trust (ETHA) a más de 6,42 millones de ETH, lo que representa el 5,31% del suministro circulante de la criptomoneda.
En paralelo, los ETF de Bitcoin al contado, encabezados también por el iShares Bitcoin Trust (IBIT), mostraron señales de recuperación tras sufrir salidas superiores a los u$s970 millones entre el 15 y el 20 de agosto.
El liderazgo de BlackRock en ambos frentes no solo se mide por el volumen de activos bajo gestión, sino también por su capacidad de influir en el comportamiento del mercado.
Durante la última semana, la firma movió más de 1.885 BTC y 59.606 ETH hacia Coinbase Prime, algo que sugiere operaciones de reequilibrio o ventas estratégicas para responder a los rescates de inversores institucionales.
A pesar de estas salidas puntuales, la gestora mantiene la mayor exposición neta a Bitcoin entre todos los emisores de ETF, por encima de otros competidores como:
El repunte en las entradas de Ethereum coincide con compras corporativas significativas, como la realizada por SharpLink Gaming, que adquirió u$s667 millones en ETH y elevó sus tenencias a más de 740.000 unidades.
Este tipo de movimientos refuerza la tesis de que Ethereum, más allá de su rol como activo especulativo, gana cada vez más terreno como reserva de tesorería y activo estratégico para empresas tecnológicas.