Estados Unidos está decidido a regular el ecosistema de las criptomonedas en su territorio.
Bajo esta premisa, los reguladores del país prohibieron a la plataforma Paxos la emisión de la stablecoin BUSD, de Binance.
La medida afectó negativamente a ambas plataformas y repercutió fuertemente en los usuarios del exchange.
A partir de esta situación, miles de usuarios Binance retiraron sus fondos del servicio de intercambio cripto, desde que se confirmó la postura de los reguladores.
Así lo revelaron datos de la consultora especializada en tecnología blockchain Nansen, que detalló que Binance registró más de u$s820 millones de salidas netas en las últimas 24 horas.
En total, los usuarios habrían retirado aproximadamente unos u$s2.800 millones en criptoactivos, superando los u$s2.000 millones en depósitos, representando la cifra más alta desde noviembre.
De hecho, la ola de retiros fue más grande que la vivenciada por la empresa en diciembre, cuando los resultados de las pruebas de auditoría de reservas preocuparon a los inversores y en medio de rumores de una investigación federal en EE.UU. contra el exchange.
Otro de los datos que preocupa a la compañía es el aumento en la cantidad de canjes de BUSD: datos de Peckshield revelaron que se quemaron más de u$s340 millones en BUSD en el último día.
Paxos avisó a sus usuarios que, por el momento, continuará dando servicio al producto, gestionando los reembolsos y proporcionando la información adicional que sea necesaria, al tiempo que los fondos permanecerán seguros y totalmente cubiertos por reservas en sus bancos, al menos por un año más.
Sin embargo, el éxodo de la stablecoin fue una tendencia entre los usuarios de la comunidad, quienes optaron por hacer efectivo sus reembolsos.
Como consecuencia, la oferta del token se redujo considerablemente en cuestión de horas: antes del 13 de febrero, circulaban cerca de u$s16.000 millones de BUSD, pero esa cifra se derrumó a $15.500 millones.
La huída de los usuarios podría generarle un nuevo dolor de cabeza a Binance, ya que BUSD se trata del activo más grande en reservas de la plataforma después de USDT, con más de 22% de su tesorería y representa 35% de todo el volumen comercial de Binance.
La compañía llevaba más de una semana bajo investigación de los reguladores de Nueva York. De hecho, también sería seguida de cerca por la propia SEC, según informaron otros medios especializados.
En concreto, el organismo busca demandar al emisor de la moneda estable por la presunta violación de las leyes de protección de los inversores en relación con el propio activo BUSD.
Lanzada en 2019, BUSD es una stablecoin vinculada al dólar estadounidense y la tercera más grande de las estables en el mercado, con un suministro aproximado superior a los u$s16.000 millones.
A pesar de esto, el comportamiento de las stablecoins se mantuvo relativamente estable en el mercado.
Particularmente, BUSD se mantuvo sin mayores variaciones en su cotización, para sorpresa de muchos.
De acuerdo a datos de CoinMarketCap, la stablecoin mostró una leve baja de 0,02% en las últimas 24 horas, aunque se mantiene en el rango de u$s1, al preservar su paridad con el dólar estadounidense.
Un comportamiento similar mostraron otras como USD Coin (USDC) de Circle, DAI de Maker Foundation y hasta la propia stablecoin de Paxos, USDP se comporta con normalidad.
Por su parte, Tether (USDT), la moneda estable con mayor capitalización de mercado, mostró un alza de aproximadamente 0,10% en el último día, aunque también se mantiene en torno al dólar.
En cambio, Binance Coin (BNB), otra de las criptomonedas de Binance, cayó casi 10% en el mismo período, en un contexto donde el mercado experimentó un retroceso en general. Sin embargo, este 14 de febrero mostró una leve recuperación.