Las criptomonedas prolongan su rally bajista en lo que va de 2022, tras la suba de las tasas por parte de la Reserva Federal (Fed) de los Estados Unidos y aumenta la incertidumbre entre miles de inversores de todo el planeta.
Estos fenómenos pegaron con fuerza en el mercado que, por estas horas, mantiene en vilo a quienes ingresaron para resguardar sus ahorros y ahora ven cómo se desmorona su plan, al tiempo que se preguntan si "se acabó" el tiempo de Bitcoin (BTC).
Varios de ellos, los más efervescentes, apuestan a su potencial en el largo plazo, por lo que difícilmente abandonen el ecosistema.
Otros, por el contrario, muestran sus dudas a la hora de invertir su dinero en cripto por las causas ya mencionadas.
Según un estudio elaborado por Coupon Follow, la mayor parte de las personas que no invirtieron en criptomonedas alegan preocupaciones relacionadas a la volatilidad del valor, las aplicaciones restringidas, el impacto ambiental, y las cuesitones regulatorias.
La investigación, que incluyó a encuestados por encima de los 18 años, fue contestada por un universo de 1.172 personas pertenecientes a diferentes rangos etarios desde Generación Z, y pasó por Millennials, hasta los Baby Boomers.
Cada grupo estuvo representado por muestras comprendidas por un número de entre 172 a 333 participantes. El informe aclaró que todos los encuestados fueron "no coiners", es decir, individuos que todavía no habían invertido en criptomonedas.
La encuesta reveló que la falta de comprensión fue la razón más asentada que suscitan las dudas a la hora de comprar en las personas de todas las generaciones. Al ser interrogados por su negativa a comprar monedas digitales, el 42% de los encuestados aseguró "no entender su valor".
Un porcentaje considerable de los encuestados, el 39%, se siente asustado por la volatilidad de los criptoactivos.
De todas formas, el informe sugiere que el interés por aprender más sobre el mundo cripto no disminuyó. Incluso aún sin estar dispuestos a invertir en ellas, la mayoría de los participantes reveló estar al menos algo interesados en aprender más sobre criptomonedas.
El 18% de los encuestados aseveró que aprender más sobre los beneficios de invertir en criptodivisas resulta el enfoque más efectivo para pasar de escéptico a creyente.
Desglosando en rango etario, los millennials precisaron que tener "una mayor renta disponible" es el factor más probable que los convencería para lanzarse invertir.
En cuanto a los miembros de la Generación Z, se muestran más interesados en la regulación gubernamental y la aplicación de la ley en esta industria.
El concepto de "criptooinvierno" lleva varios años en el ruedo. Sin embargo, muchas son las personas que aún se preguntan su significado.
Según los expertos, ocurre un "criptoinvierno" cuando se enfrían los precios de las criptomonedas y caen de manera sostenida durante varios meses.
Asimismo, este concepto hace referencia a lo que ocurrió en 2018, cuando BTC se hundió hasta 80% desde los máximos históricos.
Este desplome llevó a un pánico generalizado en el mercado de criptomonedas y provocó que la gran mayoría de los activos digitales cayeran todos juntos en picada.
No obstante, recién a mediados de 2019 los criptomercados mostraron diversos signos de recuperación, impulsados por una inversión récord por parte de instituciones tradicionales, como los bancos y los grandes fondos de inversión, según publicó el sitio de la BBC.
Más allá de la volatilidad que las caracteriza, esta caída para muchos expertos, se debe al golpe que recibió Bitcoin por un organismo gubernamental estadounidense.
La moneda digital más grande cayó hasta u$s26.611, la mayor caída intradía desde enero, movimiento que parece aún no haber terminado después de que la Reserva Federal estadounidense (FED) subiera las tasas el miércoles, como forma de combatir una inflación que tocó máximos en 30 años.
"Los inversores están nerviosos porque la Fed continúa aumentando las tasas de interés después del aumento de 50 puntos básicos", explicó Jason Lau, director de operaciones de la bolsa Okcoin con sede en San Francisco, a Bloomberg.
"El potencial de aumento de tasas adicionales hace que la trayectoria de la economía global sea incierta", agregó.
En un entorno de tasas más altas, la corrección de los activos de riesgo, como Bitcoin y acciones de empresas -sobre todo tecnológicas- comenzó a tomar forma en los últimos meses.
De hecho, Bitcoin se negoció en gran medida junto con las acciones tecnológicas: tanto la moneda como el Nasdaq 100 alcanzaron máximos históricos en noviembre y transitan un camino volátil a la baja desde entonces, a punto tal que el Nasdaq 100 cayó por quinta semana consecutiva.