Si hay que nominar un ganador de la pandemia, sin dudas las criptomonedas se ubicarían entre los finalistas. Ante la expansión monetaria de los Gobiernos para hacer frente a la coronacrisis, las divisas virtuales fueron vistas como el método más eficiente de resguardo de valor y su adopción creció casi un 900% según Chainalisys.
Además, estos activos lograron dos hitos: gran cantidad de empresas las sumaron a sus balances (MicroStrategy, Tesla y Mercado Libre) y El Salvador incorporó al Bitcoin como moneda de curso legal, una medida que podrían imitar Panamá y otras naciones.
Argentina también fue parte de ese boom. Ante los controles al mercado de cambios y una inflación que no muestra señales de desaceleración, los ahorristas locales ya abrieron más de dos millones de cuentas. Y crecen día a día la posibilidad de invertir y abonar con estos instrumentos.
No sólo eso: como si faltaran tipos de cambio paralelos, cada vez toma más fuerza como referencia el denominado "dólar bitcoin", que surge al dividir el precio local por la cotización internacional y suele estar muy cerca –a veces, por encima– del blue.
El experto en finanzas y líder libertario local Carlos Maslaton, remarca qué tan "barato" resulta cenar en Argentina junto a una foto del ticket y su conversión a satoshis: unidad mínima de la criptomoneda, que se divide en 100.000.000 de partes.
iProUP relevó una serie de precios medidos en esta divisa digital en varios países (según la cotización en moneda local) para establecer cuán barato está el país respecto al resto del mundo.
Argentina es uno de los principales productores de alimentos del mundo, por lo cual no sorprende que en el Índice Bitcoin sea la nación con los precios más económicos para adquirir comestibles.
En efecto, una cena para dos personas ronda 3.000 pesos, lo que equivale a 0,00034 bitcoins. Es decir, casi 70% menos que en Brasil, la mitad que en México o cuatro veces más barato que en EE.UU., España o Reino Unido.
Un panorama similar ocurre con el BigMac, la hamburguesa estandarte de McDonald's utilizada por The Economist para medir cuán valorizada o depreciada está una moneda.
En el caso del Índice Bitcoin, este platillo (en combo con gaseosas y papas) cuesta unos 600 pesos, lo que equivale a 0,000074 unidades de la criptomoneda líder. La versión argentina también está entre las más económicas de la tabla: 18% en comparación con EE.UU. y 42% respecto a Uruguay, si se pagaran con Bitcoins.
Si bien los consumidores albicelestes notan cómo cada vez llenan menos el changuito, Argentina también pica en punta en dos productos básicos del supermercado: el aceite y la carne.
Tomando como muestra el corte "ojo de bife", el kilo cuesta $1.500 (0,00018 BTC). Lo curioso es que, medido en la criptomoneda, el país –sexto productor global– también tiene los mejores precios respecto a otros pesos pesados de la carne vacuna: Brasil (58% más cara), EE.UU. (1177%) y Australia (115%). En Europa, los precios muestran al menos un 113% de brecha.
En el caso del aceite, las diferencias son mayores. la botella de litro y medio ronda los $237 (0,0000291 bitcoins). Es decir, entre dos y tres veces más barata que en EE.UU y Uruguay.
"El problema no es que los alimentos valgan menos, sino que el peso está super devaluado. Hay una pérdida de valor terrible", remarca a iProUP Damián Di Pace, director de Focus Market.
Por otro lado, Martín Kalos, economista jefe de EPYCA, señala a iProUP que "este fenómeno se explica por los costos más bajos en moneda local. Somos uno de los grandes productores de alimentos y otros países que no lo son tienen que añadirle el flete y otras cuestiones".
La Coca Cola, cuyo precio tiene un componente importado, muestra menor brecha respecto a otros mercados: la lata de 340 mililitros vale $71 (0,0000087 bitcoins en Argentina). Así, cuesta menos de la mitad que en España, Chile, Reino Unido, México y Uruguay.
La industria textil fue, sin dudas, una de las más golpeadas por la pandemia, impactada por el cierre de actividades "no esenciales" durante la primera etapa de la cuarentena.
Pero también es una de las más "protegidas" arancelariamente y una de las que posee mayor carga impositiva en toda su cadena de valor, lo que haría pensar que es uno de los ítems más caros en el país. Al menos, así lo indicaban, hasta antes del coronavirus, los viajes de los argentinos a los malls de Miami a "llenar" las valijas con ropa a precio de ganga.
Sin embargo, el relevamiento de una prenda Levi's, comercializada en la tienda oficial, arroja que Argentina ofrece uno de los precios más económicos del mundo medido en Bitcoins. Un jeans ronda en Argentina los $8.600 (0,0010 bitcoins), una oferta sólo superada por EE.UU., donde cuesta 0,0091. En el resto de los países relevados se vende más caro: Reino Unido ( 186%), España (160%) y Chile ( 19%).
Otra de las etiquetas más buscadas por quienes viajan al exterior es GAP: el tradicional buzo con capucha es muy demandado por quienes visitan las grandes tiendas de La Florida. En Argentina se consigue por 0,000049 bitcoins ($4.100), la mitad que en EE.UU., Australia o Brasil o el triple que en México. En otras naciones relevadas hay una diferencia mayor al 120%.
En el rubro calzado deportivo se observa una tendencia similar: un par de zapatillas Adidas Superstar se adquiere por $16.000 (0,00196 bitcoins) en el sitio local de la marca alemana. Un precio más barato –medido en criptomonedas– que en el ecommerce oficial de los países del primer mundo, precio similar a Uruguay y más cara (17%) que Brasil.
La Argentina, además, tiene un raro récord. Un vestido de Zara, una marca conocida por sus precios accesibles, cuesta más en la Argentina que en el resto de los países relevados. Una página más para el manual de paradojas vernáculo.
En el caso de los bienes durables, un departamento de dos ambientes y 45 metros cuadrados en zona residencial, Argentina se muestra más económica medida en criptomonedas respecto a la región, aunque no con mercados de otros continentes.
Un inmueble de esas características en Palermo ronda los u$s140.000 (3,23 bitcoins). Esto la ubica 35% por encima de una propiedad similar en la mejor zona de San Pablo (Brasil) y 27% menos que en Montevideo, más económica que en el DF (38%% o Santiago (67%). En relación con el resto del mundo, un departamento en áreas cotizadas de Nueva York o Londres pueden quintuplicar estos valores.
Di Pace indica que en Argentina las propiedades "perdieron cerca del 35% de su valor". Los montos a los que se venden son menores a los que publican inmobiliarias "ya que la oferta no lo valida".
"No hay demanda y está habiendo mucha oferta, porque a los propietarios les genera en dólares la menor renta neta histórica: cerca del 1% del valor de la propiedad, cuando en promedio llegó a estar en 2% y a un pico de 6%. Aparte, la Ley de Alquileres es un recontra desincentivo para ponerlas en alquiler", completa.
Para los autos, se tomó como base Toyota Corolla 1.8 híbrido, ya que autos más "populares" no se venden en todos los mercados que conforman el índice. El vehículo se retira de una concesionaria local al abonar $3 millones (0,38 bitcoins), casi la mitad de los BTC (0,69) que exigiría una agencia en Brasil. La brecha se estira en Reino Unido ( 127%) y es menor en Australia ( 25%) y EE.UU. ( 36%).
Según Di Pace, con los modelos más económicos de autos la situación no sería la misma, ya que la Argentina "tiene los segundos costos más altos para compra y mantenimiento".
El iPhone es otro de los productos que todo turista argentino espera conseguir a precio más bajo cuando viaja a EE.UU. Medido en criptomonedas, se consigue a $209.000 (0,0257). Es decir, más barato que en Uruguay (23%) y Brasil (26%), pero más caro que en EE.UU. (-30%) o Chile (-15%), dos destinos que suelen presentar mejores precios.
El caso de la MacBook es diferente: se puede comprar en una tienda albiceleste por BTC 0,026 ($210.000), apenas más cara que en EE.UU. (0,022) y más baratq que en Brasil ( 105%), Uruguay ( 38%) o Chile ( 9%). Este precio tan competitivo, a diferencia del iPhone, radica en que la Argentina posee aranceles más bajos para el ingreso de notebooks que de celulares.
Otro servicio en el que la Argentina muestra buenos precios es Netflix: el abono más bajo del mundo medido en bitcoins, con 699 pesos o BTC 0,0000082. Es tres veces más bajo que el de Brasil y hasta cinco que el de Reino Unido, EE.UU. o España.
¿Por qué Argentina está tan barata? Según Kalos, "las empresas no tienen margen para subir los precios porque el poder de compra se erosionó muchísimo. Con salarios bajos y un empleo muy deteriorado, no hay poder adquisitivo para validar aumentos. Las empresas ajustan en calidad, cantidad y otros ítems. Eso, en el corto plazo, le pone un tope a los aumentos ", analiza.
Además, afirma que este desfasaje de precios también está basado en los múltiples tipos de cambios: los importadores traen sus productos al dólar importación, que está en los $103, muy por debajo del solidario ($172), el contado con liquidación (174) y blue ($186).
"Argentina tiene su propia capacidad endógena para distorsionar precios en el mercado interno y en términos comparativos a nivel mundial. Es difícil que ese efecto se reduzca si no se equilibran esas tres variables", concluye Di Pace.