Meta Platforms, el gigante tecnológico estadounidense propietario de Facebook, Instagram y WhatsApp, adquirió Manus, una startup especializada en agentes autónomos de inteligencia artificial (IA).
La operación se enmarca en la estrategia de la compañía para acelerar el desarrollo de soluciones de IA orientadas al segmento corporativo y comenzar a monetizar de forma más directa su fuerte inversión en esta tecnología.
Si bien se desconoce el monto de la transacción, fuentes cercanas al acuerdo indicaron que la valuación de Manus supera los u$s2.000 millones.
Desde Meta confirmaron que el servicio aún operará de manera independiente y adelantaron que será integrado de forma progresiva a su ecosistema de productos.
"Nos complace anunciar que Manus se ha unido a Meta para ayudarnos a crear productos de IA extraordinarios", indicó Alexander Wang, responsable del área de inteligencia artificial del grupo.
En ese sentido, destacó la experiencia del equipo de Manus, con base en Singapur, y su capacidad para explorar el potencial de los modelos actuales con el objetivo de desarrollar agentes avanzados.
Manus ratificó que mantendrá su operación en Singapur y confirmó que continuará su servicio mediante suscripción, tanto desde su aplicación como desde su sitio web.
"Unirnos a Meta nos permite construir sobre una base más sólida y sostenible sin cambiar cómo funciona Manus ni cómo se toman las decisiones", manifestó Xiao Hong, consejero delegado de la firma.
A comienzos de 2025, Manus registró ingresos anuales por u$s125 millones y comercializa su agente de IA bajo un modelo de suscripción, algo que representa para Meta una vía de retorno inmediata.
El 2025 se consolidó como el año de la inteligencia artificial agéntica, un campo en el que las grandes tecnológicas compiten por desarrollar sistemas capaces de operar con mayor autonomía.
A diferencia de los chatbots tradicionales, estos agentes pueden ejecutar acciones complejas, como:
Meta refuerza con esta compra su estrategia en un área clave de la próxima etapa de la IA y se posiciona como uno de los actores centrales en la carrera por los agentes autónomos, un mercado que promete transformar la forma en que personas y empresas interactúan con la tecnología.