El Banco de Inglaterra lanzó una seria advertencia sobre la posibilidad de que se esté gestando una burbuja financiera vinculada al auge de la inteligencia artificial.
En su último informe de estabilidad financiera, el organismo alertó que las valoraciones de las empresas tecnológicas "parecen exageradas" y podrían provocar una corrección abrupta de los mercados si se enfría el entusiasmo sobre el potencial económico de la IA.
El Comité de Política Financiera (FPC) del Banco Central británico señaló que los precios de los activos siguen subiendo pese a la "persistente incertidumbre" global.
"Las compañías tecnológicas centradas en la inteligencia artificial son especialmente vulnerables, sobre todo si las expectativas sobre su impacto se vuelven menos optimistas", indicó el informe, según Bloomberg.
El auge de la IA, que impulsó en 2024 las acciones de gigantes como Nvidia, Microsoft o Alphabet, genera preocupación entre los reguladores. En apenas meses, las proyecciones de inversión y los múltiplos de valoración se dispararon, alimentando comparaciones con la burbuja de las puntocom a fines de los 90.
El Banco de Inglaterra advirtió que factores como la demanda energética, la escasez de chips y los cuellos de botella en el acceso a datos pueden limitar el crecimiento del sector y afectar las expectativas. "Los obstáculos materiales al progreso de la IA podrían perjudicar las valoraciones", señaló el reporte.
El informe también destacó la incertidumbre que genera la situación en la Reserva Federal de Estados Unidos (FED).
En este sentido, el Banco de Inglaterra alertó que la independencia de la FED está bajo presión por las críticas políticas, y que cualquier alteración en su credibilidad podría desencadenar una revalorización del dólar y una ola de volatilidad en los mercados internacionales.
"La independencia operativa de los bancos centrales es clave para sostener la estabilidad monetaria y financiera", sostuvo el FPC.
El organismo británico también mencionó los recientes impagos en el sector automotor estadounidense como una señal de advertencia sobre la calidad crediticia de ciertos activos.
Según el informe, los altos niveles de apalancamiento y la opacidad de algunas estructuras financieras representan riesgos adicionales para la estabilidad del sistema.
Pese a todo, el Banco de Inglaterra afirmó que el sistema financiero del Reino Unido se mantiene "resiliente", con bancos bien capitalizados y preparados para resistir un escenario adverso.
El mensaje desde Londres busca poner paños fríos a la euforia global por la inteligencia artificial, que ya transformó los mercados bursátiles y captó miles de millones de dólares en inversión.
Para el Banco de Inglaterra, el desafío es equilibrar la innovación con la prudencia: reconocer el potencial de la IA sin repetir los excesos del pasado.