Las revelaciones llegaron en paralelo. El viernes por la noche, OpenAI tomó por sorpresa a la industria tecnológica al comunicar la repentina e inesperada destitución de Sam Altman, quien hasta ese momento ocupaba el cargo de director ejecutivo y era el rostro más prominente de la compañía, posiblemente influyendo en el panorama del desarrollo de la inteligencia artificial en general.

La decisión se fundamentó en lo que OpenAI catalogó como una pérdida de "confianza" en las capacidades de Altman para liderar eficazmente la empresa que está detrás de ChatGPT.

Aprovechando el mismo anuncio, los directivos de OpenAI fueron un paso más allá al revelar quién asumirá temporalmente el cargo de Altman. De manera interina, Mira Murati, hasta entonces directora de tecnología de OpenAI, ocupará este rol de liderazgo.

Mira Murati, de CTO a CEO interina

Mira Murati, la directora tecnológica (CTO) de la compañía, asume de manera interina las responsabilidades de Altman.

OpenAI destaca que Murati, como "miembro del equipo de liderazgo durante cinco años, ha desempeñado un papel fundamental en la evolución de OpenAI hasta convertirse en un líder mundial en IA".

La organización subraya su experiencia y compromiso excepcionales, considerándola idónea para liderar temporalmente la transición hacia un nuevo CEO permanente.

OpenAI catalogó el despido de Altman como una pérdida de "confianza" en sus capacidades para liderar eficazmente la empresa.

Aunque la exposición de Murati no ha sido tan prominente como la de Altman, fue una figura visible en el desarrollo de ChatGPT desde 2018, cuando se unió como directora tecnológica.

Su disposición para hablar con la prensa sobre la empresa y los avances en IA, evidenciada en entrevistas con "The Daily Show", Fast Company, TIME, Wired y Fortune, resalta su papel clave en la narrativa de OpenAI.

Cambios estratégicos en OpenAI

En el proceso de transición de liderazgo en OpenAI, la organización destaca la sólida preparación de la nueva directora ejecutiva interina.

OpenAI enfatiza en que Murati tiene un profundo conocimiento de los valores de la organización, una comprensión integral de operaciones y negocios, y destacan su experiencia previa en la dirección de labores críticas de investigación, producto y seguridad. La tarea que tiene por delante se presenta como exigente y crucial para el futuro de la empresa.

Altman no protagoniza el único cambio en el organigrama. OpenAI sorprendió al anunciar que Greg Brockman abandonaría la presidencia de la junta, a pesar de mantener su posición en la empresa.

La renuncia de Brockman, expresada de manera directa en su perfil personal de X, añade un giro inesperado al panorama: "Basándome en las noticias de hoy, renuncio".

Murati fue una figura visible en el desarrollo de ChatGPT desde 2018, cuando se unió como directora tecnológica.

El escenario está marcado por la fuerte competencia en el desarrollo de la inteligencia artificial. Aunque OpenAI cuenta con el respaldo multimillonario de Microsoft, la competencia se intensifica.

El reciente respaldo financiero de Google a Anthropic, un competidor directo de ChatGPT, y su éxito al sumar a Amazon a su proyecto, evidencian el dinamismo del sector. Además, el mes de noviembre inició con la presentación oficial de Grok, la nueva inteligencia artificial de la empresa liderada por Elon Musk.

Trayectoria multifacética de Mira Murati

Mira Murati, nacida en Albania y ahora en torno a los 35 años, forjó una carrera excepcional en el corazón de la innovación tecnológica en OpenAI desde 2018.

Su diverso conjunto de habilidades lingüísticas en inglés, italiano y albanés reflejan su adaptabilidad en la arena global de la tecnología.

No solo ha dejado su huella en OpenAI, sino que su impacto se extiende a través de diversas industrias, desde aeroespacial hasta realidad aumentada.

La carrera profesional de Murati se inicia con una formación en ingeniería mecánica en el Darmouth College.

Murati, durante sus tres años en Tesla, desempeñó un papel crucial como senior product manager del Model X.

Su experiencia posterior como pasante en Goldman Sachs y su contribución al grupo francés Zodiac Aerospace, Tesla y Leap Motion revelan una trayectoria rica en logros.

En 2018, al unirse a OpenAI, asumió roles de responsabilidad inmediata en inteligencia artificial aplicada y asociaciones estratégicas. Su ascenso culminó el año pasado al convertirse en la Directora de Tecnología (CTO) de la firma.

Durante sus tres años en Tesla, desempeñó un papel crucial como senior product manager del Model X, coincidiendo con el lanzamiento del software Autopilot de conducción asistida.

En Leap Motion, ejerció como vicepresidenta de producto e ingeniería, destacando su versatilidad en el mundo de las startups tecnológicas.

En OpenAI, Murati ha sido una figura esencial en el desarrollo de tecnologías revolucionarias como ChatGPT, DALL-E y Codex.

Su visión anticipada de la Inteligencia Artificial como la tecnología más crucial fue fundamental en la estrategia de supercomputación de OpenAI, donde lidera varios equipos de investigación.

Mira Murati afirma que no es demasiado pronto para que políticos y reguladores se involucren para evaluar el impacto de la inteligencia artificial.

La perspectiva de la nueva CEO sobre la inteligencia artificial

Mira Murati, recién nombrada en un papel clave en OpenAI, aún guarda silencio sobre su designación, pero sus recientes reflexiones revelan una visión clara hacia el futuro de la inteligencia artificial (IA).

"Siento que casi todos los años hay algún cambio de paradigma en el que tenemos que reconsiderar cómo hacemos las cosas", expresó durante el verano, destacando la necesidad de una adaptación constante a la sociedad.

En sus declaraciones más recientes, Murati destaca la magnitud del impacto de la Inteligencia Artificial, comparándolo con revoluciones pasadas como la electricidad o la imprenta.

Subraya la importancia de integrar esta tecnología en todos los niveles de la sociedad y aborda temas cruciales como leyes de derechos de autor, privacidad, gobernanza y regulación.

Su enfoque proactivo se evidencia al afirmar en febrero que no es demasiado pronto para que políticos y reguladores se involucren, destacando la importancia de la participación de todos ante el inminente impacto de estas tecnologías.

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