Sam Altman está en boca de todos desde que Microsoft invirtió u$s10.000 millones en su empresa OpenAI, desarrolladora de ChatGPT, la inteligencia artificial que es tendencia en lo que va del año.
Altman ya era conocido por sus inversiones en sus tiempos en la aceleradora Y Combinator, pero dejó atrás esta etapa para llevar a cabo algunas de sus apuestas más grandes.
Una de sus primeras grandes inversiones fue de u$s375 millones en Helion Energy, firma dedicada a la constucción de un reactores de fusión nuclear.
Ahora MIT Technology Review indicó que Altman invirtió u$s180 millones en otra startup llamada Retro Biosciences que promete retrasar la muerte.
La empresa de biotecnología reveló en 2021 que había cerrado una ronda de financiación inicial de u$s180 millones para trabajar en su objetivo de expandir hasta 10 años la esperanza de vida humana.
Todo ese dinero provino de un cheque de Altman, pero la empresa no hizo pública su participación hasta los primeros días de marzo de 2023.
Retro es una startup creada por Joe Betts-LaCroix, Sheng Ding y Matt Buckley que tiene el objetivo de retrasar 10 años la muerte, para lo que trabajan en la prevención de múltiples enfermedades.
Invierten en tecnologías como la multiómica unicelular y la biología computacional basada en aprendizaje automático. Apuntan a la reprogramación celular y terapias inspiradas en la autofagia y las intervenciones de plasma, aunque todavía no empezaron con ensayos clínicos.
Sam Altman es considerado un personaje excéntrico, que escaló rápidamente a la fama, al igual que su popular invención.
Él mismo admitió que tiene listas sus armas, un alijo de oro, yoduro de potasio, antibióticos, baterías, agua, una máscaras antigás de las Fuerzas de Defensa de Israel y "un gran terreno en Big Sur al que puedo volar" en caso de que llegue el Apocalipsis.
Su interés por expandir la vida humana se basa en sus ideales, los mismos con los que dió origen en 2022 a la herramienta ChatGPT.
ChatGPT es una inteligencia artificial creada para ayudar a distintas unidades de negocios a dar ideas para crear nuevas funciones de la aplicación basadas en: investigación existente (por ejemplo, personas, puntos débiles y competidores), funciones que ya se tienen (como recordatorios), y los objetivos (como disminuir el abandono durante el onboarding.
También se destaca por generar textos publicitarios a escala, escribir correos electrónicos y crear publicaciones en redes sociales son solo la punta del iceberg.
Los marketers de aplicaciones pueden usar la IA de manera efectiva para escribir contenidos y ayudar con la ideación, los resúmenes, el análisis, la edición, la traducción, entre otras tareas.
Sin embargo, el término operativo clave es "ayuda" ya que no se recomienda usar ChatGPT como una solución integral para las necesidades de contenido, pues esta IA no reemplaza la estrategia o creatividad humana.
Sí puede generar nuevas ideas (o imitar las existentes), crear una copia de campaña, editar y optimizar el contenido que una marca produzca.