La impresión 3D se volvió una tendencia para cada vez más emprendedores en la Argentina. En los últimos años, y en medio de una pandemia, fueron muchos los que, en busca de un ingreso extra, decidieron apostar a esta flamante industria. 

De esta forma, crear productos a través de la impresión 3D se volvió una opción económica, fácil, y efectiva para crear nuevos negocios y por lo tanto nuevos ingresos. No obstante, se requiere de cierta inversión inicial. 

A través de esta herramienta muchos emprendedores descubrieron la manera de crear objetos únicos, personalizados y salir al mercado de forma rápida y a bajo costo.

Juguetes, joyas, modelos, accesorios, moldes, fundas para teléfonos, y hasta órganos humanos son apenas algunas de las infinitas oportunidades que brinda esta tecnología.

SOLVO: cómo es el taller de impresión de reingeniería

A nivel nacional, surgieron emprendimientos 3D innovadores que crecen a un ritmo acelerado. Entre tantos, aparece, SOLVO Taller 3D, una marca dedicada a la reingeniería de repuestos elaborados con tecnología de impresión 3D.

Manuel Galdeano Ruiz es un ingeniero y profesor en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan, que fundó y lleva adelante la startup que brinda soluciones a todo tipo de empresas, fabricando prototipos y repuestos a medida de cada industria con esta tecnología, y aprovecha los problemas de importación que vive el país.

Manuel Galdeano Ruiz es un ingeniero y profesor universitario que fundó SOLVO, taller de impresión 3D

En diálogo con iProUP, Galdeano Ruiz define a su desarrollo de la siguiente manera: "SOLVO Taller 3D es un emprendimiento que busca ofrecer soluciones a necesidades a través del diseño y la reingeniería, y materializando productos mediante la fabricación por manufactura aditiva".

El emprendimiento nació como tal en septiembre de 2019, aunque Galdeano Ruiz revela que su primer encuentro con el mundo de la impresión 3D ocurrió en 2014. Y, a partir de 2017, relata que se lanzó a la venta de productos, principalmente repuestos y accesorios para motos.

SOLVO, el taller de impresión 3D que empezó del "boca a boca"

Así, de a poco y gracias al boca a boca, los mismos clientes fueron acercando distintas necesidades, y posibilidades de trabajo a su pequeño negocio.

"Progresivamente, la afición pasa a convertirse en un emprendimiento, y migra de un ámbito hobbista a uno industrial, respaldado principalmente por mi formación como ingeniero, y por la evaluación de ciertas necesidades que pude experimentar durante mi trabajo en estructuras de mantenimiento e ingeniería de mantenimiento", relata el fundador de SOLVO Taller 3D.

Y añade: "Desde hace tres años plantee la idea ingresar en ese nicho de repuestos y componentes de índole industrial, para intentar conformar una propuesta seria y profesional a esta necesidad".

Consultado respecto a la inversión inicial realizada, el ingeniero aclara que fue de $24.000 en octubre de 2018, para una impresora con la que todavía cuenta, y con la que inició a trabajar en el ámbito industrial.

SOLVO brinda soluciones a todo tipo de empresas, fabricando prototipos y repuestos a medida de cada industria, aprovechando los problemas de importación que vive el país

Negocio 3D: ¿qué tipo de impresión 3D utiliza el taller de SOLVO? 

SOLVO Taller 3D desempeña sus tareas con una impresora 3D de tecnología FDM (Modelado por deposición fundida), una técnica que consiste en fundir un material plástico que va depositando capa por capa hasta lograr un objeto físico. 

La matricería o inyección de plásticos es una de las tantas formas de fabricación de piezas de forma masiva, capaz de crear grandes volúmenes de piezas similares en poco tiempo.

El material que emplea es un polímero que funde a una temperatura de entre 200 y 300 grados, según el material y la impresora y suele ser la más empleada por emprendedores y hobbistas, ya que es de menor valor.

"Dadas las características de las necesidades que los clientes acercan al taller, los componentes fabricados deben poseer propiedades mecánicas y térmicas que resistan las condiciones de trabajo, razón por la cual la mayoría de los materiales utilizados son filamentos técnicos", describe Galdeano Ruiz.

Entre los materiales empleados, se encuentran los siguientes:

Irene Presti, CEO y cofundadora de 3DU Digital, confirma a iProUP que una impresora de modelado por deposición fundida cuesta hoy entre $60.000 y $80.000, aunque dependerá de la marca apuntada y las fluctuaciones del mercado cambiario.

La matricería o inyección de plásticos es una de las tantas formas de fabricación de piezas de forma masiva

Negocio de impresión 3D: el objetivo de SOLVO a largo plazo

Con respecto a los clientes, según el ingeniero, estos son principalmente pequeñas o medianas empresas, con necesidades relacionadas a componentes no encontrados de maquinaria que poseen, que se encuentra obsoleta, o que son imposibles de importar.

De todas formas, el negocio también cuenta con algunos particulares con necesidades de repuestos de autos/máquinas cotidianas que, por la misma razón postulada por el emprendedor, no consiguen obtener.

A modo de conclusión, Galdeano Ruiz indica que el objetivo de SOLVO Taller 3D es convertirse en "referente regional en fabricación de componentes con un enfoque industrial, y capacitar gente para incrementar la comunidad y el conocimiento, desarrollando personas y equipamiento".

Actualmente, el negocio mantiene su ritmo de crecimiento y hasta cuenta con un curso para capacitación avanzada en impresión 3D, y brinda asesoría en diseño mecánico para cualquiera que lo solicite.

De esta forma, y gracias a las posibilidades que otorga esta innovadora tecnología, cualquiera puede tener su propia "fábrica" en casa. E, incluso, hacer un gran negocio con ella como en el caso de Manuel Galdeano Ruiz.

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