Amazon ha lanzado una nueva plataforma llamada Amazon Explore, que permite a los usuarios llevar a cabo experiencias virtuales dirigidas por expertos locales de todo el mundo.
Amazon Explore ofrece diversas experiencias virtuales, que pueden centrarse en cultura y visitas virtuales a los lugares más conocidos del planeta, aprendizaje y creatividad e incluso compra de productos en tiendas locales de todo el mundo.
Las experiencias virtuales serán guiadas por expertos locales respaldados por Amazon, ya sean guías turísticos, chefs o estilistas, que contarán con un plan para la sesión adquirida por los usuarios, según explica la compañía en su página web.
Las sesiones incluyen guías en ciudades como Praga, un tour gastronómico para aprender a hacer tacos mexicanos de pescado ahumado, acudir a una cata de vinos virtual en Argentina e incluso aprender sobre la elaboración de café en Costa Rica. Estas sesiones duran entre 30 y 60 minutos.
Asimismo, los usuarios también podrán comprar artículos que muestren los anfitriones locales durante la sesión y serán los propios anfitriones los que envíen los productos a los usuarios.
Para poder llevar a cabo una experiencia virtual con Amazon Explore, es necesario contar con un portátil o un ordenador de escritorio con suficiente batería para toda la sesión, así como una conexión a Internet de alta velocidad (5 Mbps o mayor), altavoces, micrófono y la versión más actualizada de su navegador, ya sea Chrome, Safari, Edge, Opera o Firefox.
Los usuarios no necesitarán una cámara, ya que la transmisión de vídeo es unidireccional. En este sentido, los usuarios podrán ver a su anfitrión, pero este no podrá ver a los usuarios que realicen la experiencia.
Por el momento, Amazon Explore está únicamente disponible para usuarios de Estados Unidos y todas las experiencias se llevarán a cabo en inglés.
No falta mucho para que las personas puedan dejar de llevar tarjetas de crédito, el smartphone o dinero a todas partes. Eso es, precisamente, lo que busca conseguir Amazon One, la nueva creación de la gigante del retail para pagar directamente con la palma de la mano.
Tras haber conocido que la empresa se encontraba trabajando en un sistema de estas características, Amazon presentó hoy One, su reciente creación para puntos de venta físicos.
Este es un pequeño aparato destinado a suplantar los lectores de tarjetas tradicionales y sistemas NFC por un sensor capaz de leer la palma de la mano de los clientes.
Gracias al mismo, el proceso de pago no solo es más ágil, sino que elimina la necesidad de disponer de un elemento adicional, como la tarjeta o el smartphone, para efectuar la compra.
"Amazon One es una forma rápida, conveniente y sin contacto para que las personas usen la palma de la mano para realizar actividades cotidianas como pagar en una tienda, presentar una tarjeta de fidelidad, ingresar a una ubicación como un estadio o acceder al trabajo con más facilidad", señalaron desde la compañía.
El funcionamiento de Amazon One es muy sencillo. Para comenzar, el usuario deberá asociar su tarjeta de crédito a su mano, para lo cual habrá que introducir la primera en el terminal y seguir unas instrucciones que pedirán mover la palma sobre diferentes puntos para que quede registrada. Podrá registrarse una o las dos palmas.
Una vez completado, en menos de un minuto según Amazon, la persona podrá comenzar a pagar únicamente sosteniendo en el aire la palma de su mano sobre el citado sensor. Esta acción, similar a los pagos NFC, se completa en cuestión de un segundo.
Amazon One se encuentra disponible desde este mismo martes en dos tiendas Amazon Go en Seattle, donde los clientes pueden comenzar a hacer uso del mismo.
No es necesario tener una cuenta de la compañía para ello, sino que bastará con un número de teléfono y una tarjeta de crédito. Desde la firma de Bezos expresan que se encuentran en conversaciones con otros negocios en vistas a implantar esta solución para situaciones como las descritas anteriormente.
Pero qué sucede en el terreno de la privacidad. Este es un aspecto crítico en la actualidad, que se hace más notable si se trata de ceder los datos de la palma de la mano.
Amazon asegura que estos no se guardan en ningún terminal, sino que son almacenados de manera segura en la nube. Además, el usuario podrá eliminar sus datos biométricos en cualquier momento si decide dejar de utilizar el servicio.