Hace tan sólo 5 meses tuvimos que adaptarnos a un escenario sin precedentes, que nos llevó a transformar casi todas nuestras actividades cotidianas. En un abrir y cerrar de ojos nos vimos obligados a volcar nuestra vida al universo digital para seguir conectados con nuestros trabajos, nuestros amigos y familias. Más que nunca, la tecnología adquirió un gran protagonismo en nuestras vidas.
En el mundo de los negocios, el nuevo contexto empujó a las organizaciones a acelerar sus procesos de transformación digital. Algunas se encontraban en etapas tempranas y recién comenzaban a construir nuevos canales y aplicaciones, administrar mejor sus bases de datos o mejorar su capacidad de almacenamiento y cómputo, y otras estaban más avanzadas creando nuevos modelos de negocio basados en inteligencia artificial y machine learning. Como si esto fuera poco, sin duda todas las organizaciones se enfrentaron a un nuevo paradigma de colaboración, que excedió el trabajo remoto, donde la clave estuvo en la posibilidad de colaborar de manera inteligente desde cualquier dispositivo y en tiempo real.
Independientemente del estadío, del tamaño o de la industria, hoy se hizo evidente que la nube es la base para habilitar y acelerar la transformación digital de cualquier organización.
Si algo nos demostraron los acontecimientos de este año es que reinventarse es clave. Hoy, más del 75% de las empresas planea acelerar su digitalización, lo cual implica más inversiones en la nube y el uso de esta tecnología alcanzará el 20% para 2023, por lo que todavía queda un largo camino por recorrer. Tal como dijo Thomas Kurian, CEO de Google Cloud, en la apertura de Cloud Next On Air (nuestro evento anual sobre tecnologías de la nube), éste es un momento decisivo para todos alrededor del mundo, en el que se necesita esperanza y optimismo para reinventar los negocios mientras nos recuperamos de la pandemia.
En Argentina, una de las iniciativas que estamos impulsando con nuestros clientes es la posibilidad de, en un solo paso, migrar completamente de un modelo de Datacenter tradicional (propio o de terceros) hacia un modelo de nube. Además, estamos trabajando con diferentes industrias, ayudando a redefinir procesos, optimizar costos y acelerar la toma de decisiones basadas en datos.
Por ejemplo, ayudamos a los retailers a acelerar sus sistemas de envíos mediante la optimización de las rutas con Google Maps y potenciamos las recomendaciones de productos mediante inteligencia artificial (IA) para que los consumidores puedan tener la mejor de sus experiencias online. En las industrias de telecomunicaciones y servicios financieros, estamos aplicando IA para automatizar la atención de los clientes a través del reconocimiento de voz. Y en salud, ofrecemos todo el potencial de IA para mejorar los diagnósticos mediante análisis de imágenes.
Si bien muchas empresas ya venían transitando este camino y únicamente debieron acelerar sus procesos para adaptarse a la coyuntura, es interesante ver cómo aquellas que se resistían al cambio pudieron comprobar que la tecnología de la nube es la mejor aliada en un contexto de incertidumbre. Porque además de permitir procesar y almacenar grandes volúmenes de información para la toma de decisiones, también posibilita escalar o reducir los costos de operación en función de los cambios de la demanda y las necesidades de cada etapa en la que transita un proyecto o negocio.
Aún es pronto para saber exactamente cómo será la nueva normalidad, pero a medida que las organizaciones se transforman, estamos seguros que la gestión y el análisis de los datos, el uso de inteligencia artificial en los procesos de negocios, y la adopción de una forma de trabajo más digital, colaborativa y flexible serán claves para innovar y afrontar los cambios de una manera segura y flexible.
*Gerente General de Google Cloud Argentina y Uruguay