El clima financiero empeora a medida que se acercan las elecciones en la provincia de Buenos Aires. En la última rueda, las acciones argentinas que cotizan en Wall Street sufrieron un fuerte revés, con bajas que en algunos papeles superaron el 4%.
Los bonos en dólares también mostraron debilidad y el riesgo país escaló hasta rozar los 900 puntos, en lo que sería el nivel más alto del año.
¿Qué es el riesgo país?
El riesgo país es un índice que refleja la diferencia de rendimiento entre los bonos de deuda de un país y los bonos del Tesoro de Estados Unidos, que se consideran la referencia más segura del mercado.
Cuanto mayor es ese diferencial, más desconfianza tienen los inversores sobre la capacidad de pago de la economía en cuestión y, en consecuencia, más cara se vuelve su financiación externa.
En el caso de Argentina, el riesgo país es medido a través del EMBI+ elaborado por el banco JP Morgan. Cuando sube, indica que los títulos argentinos caen de precio y los mercados exigen mayores tasas de interés para prestarle al país.
Un nivel cercano a los 900 puntos, como el actual, significa que el país debería pagar hasta 9 puntos porcentuales adicionales respecto de lo que paga Estados Unidos para acceder a crédito internacional.
Acciones golpeadas y contraste con el mundo
En las últimas dos semanas, las pérdidas se profundizaron por una combinación de factores: la incertidumbre electoral en territorio bonaerense, la avanzada del Congreso para aumentar el gasto público y, sobre todo, el impacto del escándalo por los audios de Daniel Spagnuolo vinculados a presuntas coimas en la compra de medicamentos.
El contraste con los mercados internacionales es marcado. Un informe de TSA Bursátil recordó que, mientras los principales índices globales muestran fuertes avances en 2025 —el S&P 500 sube 9,5%, el Euro Stoxx 50 un 22,6%, los emergentes 20,3% y el Bovespa de Brasil 31,8%—, el mercado accionario local acumula una pérdida del 32%.
Algo similar ocurre con los bonos: los Bonares caen 6,4% y los globales 2,6%, mientras que la deuda emergente sube 7,5%.
Pese al panorama adverso, algunos bancos de inversión creen que puede ser un buen momento para posicionarse en Argentina, aunque con cautela. Morgan Stanley señaló que las acciones locales cotizan con un fuerte descuento frente a la región, incluso respecto de Brasil.
Según sus cálculos, el margen de baja adicional rondaría apenas el 10%, mientras que el potencial de recuperación es mayor en caso de un resultado electoral que sorprenda positivamente.
Varios analistas coinciden en que se trata de un escenario de riesgo "asimétrico": las chances de una caída fuerte son limitadas, pero la recuperación podría ser significativa si el resultado supera las expectativas del mercado.
Qué espera el mercado
Para los inversores, el escenario más "tolerable" sería una derrota oficialista no mayor al 5% en el agregado de las ocho secciones electorales bonaerenses. Un resultado mejor —como un empate técnico o incluso una victoria ajustada— podría disparar un rally en los activos argentinos.
En paralelo, el frente cambiario también se mantiene bajo presión. El Tesoro intervino para contener saltos en la previa electoral, mientras que desde el equipo económico insisten en que tanto la tensión cambiaria como las tasas elevadas son fenómenos transitorios.
Además, se muestran confiados en la elección legislativa del 26 de octubre, donde las encuestas favorecen a La Libertad Avanza con una ventaja promedio de diez puntos.
Sin embargo, los analistas advierten que el mes y medio hasta esa votación puede ser particularmente inestable, sobre todo si el resultado en Buenos Aires no juega a favor del Gobierno.