Un reciente informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), titulado "¿A cuánto asciende la carga tributaria formal sobre una familia asalariada argentina?", concluyó que el Estado percibe, vía impuestos, cerca del 50% de lo que produce una familia en un año.
La investigación, liderada por el economista Nadin Argañaraz, se enfocó en calcular el "Día de la independencia tributaria" considerando diversos perfiles de asalariados según ingresos, patrimonio, consumo y niveles de ahorro.
Qué impuestos pagan los argentinos hoy
El informe del IARAF revela que la carga tributaria formal total en Argentina, sumando Nación, provincias y municipios, oscila entre el 47,3% y el 49,9%, afectando directamente al bolsillo de los trabajadores formales.
Traducido en tiempo, esto significa que por cada hora trabajada, se destinan aproximadamente 30 minutos al pago de impuestos, dejando solo la mitad de ese tiempo como ingreso neto disponible.
Según este análisis, el llamado "día de la independencia tributaria" se ubica entre el 22 de junio y el 1 de julio, fecha desde la cual los ingresos empiezan a quedar en manos del sector privado.
La actualización de este informe responde a la cercanía de esa fecha simbólica, y busca generar conciencia sobre cómo se distribuye y se siente el impacto de los tributos a lo largo del año.
Aunque los impuestos son devueltos en servicios públicos como educación, salud y seguridad, el informe también subraya problemas estructurales como los 155 tributos vigentes y la gran presión sobre los sectores registrados.
Además, por la alta evasión y la informalidad laboral, el peso impositivo recae en forma desproporcionada sobre quienes sí tributan, especialmente mediante impuestos al trabajo que son regresivos.
En perspectiva histórica, la presión tributaria efectiva pasó de un 20% del PBI entre 1997 y 2002, a un pico del 32,3% entre 2003 y 2015, descendiendo al 29,2% proyectado para 2025.
Si se analiza la carga tributaria formal, la Nación concentra el 86% de la recaudación, mientras que las provincias reciben el 10% y los municipios el 4%, cifras que se modifican parcialmente con la coparticipación.
Impuestos al trabajo castigan más al sueldo
El IARAF advierte que los impuestos al trabajo tienen un peso excesivo en la estructura tributaria argentina, afectando en mayor medida a quienes menos ganan, ya que soportan una carga proporcionalmente más alta sobre sus ingresos.
En las relaciones laborales formales, los aportes laborales se descuentan del sueldo bruto y tienen un tope, lo que genera que los trabajadores de ingresos medios terminen pagando proporcionalmente menos que los de ingresos bajos.
Este sistema tributario se agrava al centrarse más en gravar el consumo y no el ahorro, lo que vuelve regresivo el esquema fiscal, afectando a los sectores con menor capacidad de acumulación.
El IARAF construyó perfiles con ingresos mensuales de $1.550.000, $3.380.000, $4.950.000 y $7.100.000 —todos trabajadores con familia tipo, y desde el segundo nivel con casa y auto propios— para analizar el impacto impositivo.
Según el informe, el trabajador con menores ingresos termina pagando casi lo mismo en términos absolutos que el de mayores ingresos, a pesar de no tributar impuesto a las Ganancias, por la carga regresiva sobre el salario.
Esto se explica por el peso de los impuestos al trabajo y el tope en los aportes personales, mientras que el impuesto a las Ganancias, que sí es progresivo, solo se aplica a los niveles altos.
Para lograr un sistema más equitativo, el IARAF propone eliminar impuestos indirectos como el de los débitos y créditos bancarios, combustibles, impuestos internos, Ingresos Brutos y tasas municipales aplicadas al consumo.