Para cumplir con nuestra misión de eliminar el uso de efectivo y de plásticos, y avanzar hacia una economía de finanzas digitales abierta e inclusiva que permita disminuir la informalidad en el sistema, es clave que la interoperabilidad de los códigos QR sea una realidad.

Si bien el esquema de Transferencias 3.0 lanzado en 2021 marcó un hito comparable con la irrupción, en su momento, de los cheques, las tarjetas de crédito o las de débito, no fue suficiente.

La iniciativa evolucionó la dinámica de cobros y pagos y la escaló a otro nivel, lo que allanó el camino hacia una industria con reglas de juego transparentes, ágiles y competitivas que benefician a todo el ecosistema.

QR interoperable: cómo fue su evolución en la Argentina

¿Hay un sistema realmente interoperable en Argentina? La respuesta es no todavía. Allá por 2018, cuando los únicos medios de pago electrónicos eran las tarjetas, el BCRA emitió una norma que obligaba a que, en un plazo de 180 días, todos los QRs cumplieran con un estándar de interoperabilidad.

Cinco años más tarde, Transferencias 3.0 alcanzó a los pagos "de cuenta a cuenta", pero la mayoría de los QR disponibles en comercios solo admiten transacciones con tarjeta con una determinada billetera.

Este escenario imposibilita a los usuarios y comercios elegir cómo manejar su dinero día a día y con qué productos financieros realizar sus operaciones. Son rehenes de un escenario que los obliga a una elección, sin darles la libertad de elegir. 

QR interoperable: las opciones que brinda al sistema financiero

Los comerciantes, que buscan poder ofrecer todos los medios de pago para mayor beneficio de sus clientes -en un contexto muy competitivo, se ven obligados a usar una sola billetera con altos costos, así como tener múltiples QRs en sus puntos de venta, lo que genera confusión entre cajeros y consumidores.

Por su parte, los usuarios que demandan enérgicamente poder manejar su dinero con total libertad, tampoco pueden hacerlo.

Hoy, el QR no tiene incorporadas todas las modalidades de pago y es clave cumplir con las normas que emitieron el BCRA y las marcas de tarjetas para un mejor producto, más eficiente y simple que beneficie tanto a los usuarios como a los comercios, y que permitareducir el uso de efectivo de verdad.

Como sucedió a nivel regional y como los actores del ecosistema lo hicimos en el contexto de Transferencias 3.0, necesitamos trabajar juntos, poner una vez más en valor la competencia, y lograr que la interoperabilidad sea un hecho en Argentina.

*Por Rafael Soto, CEO de Modo

Te puede interesar