El proyecto de ley conocido como 'Monotributo Tech' (o monotech) se volvió una de las prioridades del Congreso Nacional de la República Argentina en los últimos meses.
El monotributo tecnológico busca ayudar a la retención del talento capacitado y formado en materia de software y tecnologías asociadas a nivel nacional.
El efecto inmediato que se pretende con este es formalizar los ingresos de este sector en divisa extranjera por sus servicios realizados, mayormente de exportación.
El proyecto crea un monotributo tecnológico (monotech) para los profesionales que facturan sus servicios basados en el conocimiento y para quienes "participen en competencias de eSports (nivel profesional)".
El proyecto de ley que lleva adelante el Régimen Simplificado y Cambiario para Pequeños Contribuyentes Tecnológicos, se debatió en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados y obtuvo dictámen de mayoría.
Sin embargo, pese a que se esperaba una rápida resolución y el posterior dictamen, la Cámara de Senadores decidió postergarlo.
Tras la ratificación de las autoridades en el cuerpo, la comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado se encargó de tratar el proyecto el último 10 de mayo, a la espera de un rápido dictámen.
Sin embargo, el senador riojano Ricardo Guerra avisó que "lo van a continuar analizando…vamos a pasar a cuarto intermedio para, en una reunión posterior, poder tratarlo".
Minutos después intervino el vicepresidente de la Cámara, Víctor Zimmermann, quien coincidió en que "es importante poder seguir debatiéndolo, porque es un tema trascendente; pero tenemos algunas diferencias e interrogantes".
Entre ellas, mencionó, desde el punto de vista cambiario, "algún artículo específico que le da una preferencia a quienes están en el mono-tech, que no tienen que cumplir con cambiar los dólares y crea una cuenta especial", al tiempo que alegó notar una "inequidad con respecto al resto".
En base a ello, los senadores expresaron que recibieron un documento firmado por la industria del software, donde analizan "varios planteos, están muy preocupados y no coinciden con el proyecto como está".
En Diputados, los miembros se negaron a convocar al organismo que regula la actividad a nivel nacional para avanzar con un tratamiento de forma más ágil. Así, el proyecto fue aprobado con 111 positivos, 11 negativos y 85 abstenciones.
La propuesta de Monotributo Tecnológico busca regularizar la situación de al menos 30.000 trabajadores de la Economía del Conocimiento (software, servicios profesionales, biotecnología, nanotecnología, industria audiovisual, etc).
Desde la industria marcaron que un trabajador que adhiera al monotech cómo está previsto en el proyecto aporta al fisco $376.164,00 anuales mientras que un trabajador en relación de dependencia en una empresa radicada en el país aporta $13.637.060,24.
En ambos casos, se consideró ingresos por el tope previsto en el proyecto que es por u$s30.000 anuales, con un dólar oficial a $227 y un dólar MEP sobre los $447.
Una vez que se emita oficialmente el proyecto de ley, podrán acceder al programa los siguientes profesionales:
En concreto, el programa abarca a todas aquellas personas que exporten servicios basados en el conocimiento al exterior.
Mientras que los requisitos para incorporarse serán: residir en la Argentina, ser persona humana y que los ingresos de los últimos 12 meses sean inferiores o iguales a una de las tres categorías dispuestas para el monotributo, de hasta u$s10.000, u$s20.000, y u$s30.000 anuales.
De acuerdo al último informe del Centro de Estudios para la Producción del Ministerio de Economía, rescatado por Noticias Argentina, a fines del año pasado se registraron 142.647 puestos de trabajo en informática, que representaron un crecimiento interanual de 6,3%.
Asimismo, la industria de software en Argentina la integran unas 5.000 empresas las cuales exportaron el año pasado más de u$s2.600 millones en servicios. Su proyección es en 7 años llegar a los 400.000 puestos de trabajo con exportaciones por u$s10.000 millones.