El mercado laboral argentino enfrenta una transformación estructural que trasciende la flexibilización de convenios.
El proyecto de reforma laboral, cuyo debate el Congreso retomará el 10 de febrero, introduce cambios profundos en la forma en que los trabajadores perciben su remuneración.
La iniciativa oficialista busca modernizar la Ley de Contrato de Trabajo (LCT) y abre un abanico de opciones que hasta hoy pertenecen al sector informal o al mundo del freelance internacional.
Una de las modificaciones centrales recae sobre el Artículo 105 de la normativa. El nuevo texto establece que el salario debe satisfacerse en dinero, ya sea en moneda nacional o extranjera, especie, habitación o alimentos.
Esta redacción elimina el tope del 20% que rige actualmente para el pago de salario que no sea con pesos. De este modo, la puerta para que un empleado reciba la totalidad de su haber en activos digitales queda abierta.
Desde el ecosistema cripto, los principales actores impulsan la integración de estos activos a la vida cotidiana. Juan Pablo Fridenberg, Director de Asuntos Públicos en Lemon, explica a iProUP la postura de la empresa frente a este escenario.
"Trabajamos activamente en el desarrollo de propuestas regulatorias que integren los activos virtuales a la economía formal, y el pago de remuneraciones en criptomonedas es uno de los temas centrales en ese camino", destaca el directivo.
La propuesta, que cuenta con el apoyo de la Cámara Argentina de Fintech, apunta a una libertad total de elección. Fridenberg señala que la iniciativa "consiste en exceptuar a las remuneraciones pagadas por empresas del límite a los pagos en especie que establece hoy la normativa vigente, siempre que el trabajador lo elija como medio de pago".
Según el vocero de Lemon, este cambio busca reconocer el rol creciente de los activos virtuales dentro del trabajo joven y los nuevos modelos de empleo remoto o híbrido. "Sumar a cripto como medio opcional de cobro salarial aporta libertad, inclusión financiera y modernización al sistema laboral argentino", asegura.
Julián Colombo, director de Bitso para Sudamérica, coincide en que la reforma representa un avance necesario para la competencia.
"Es una muy buena iniciativa, ya que promueve una mayor inclusión de las cripto en la economía y permite la libre elección de las personas a la hora de decidir cómo cobrar sus salarios", afirma.
Para Colombo, la normativa vigente mantenía este servicio como un negocio "cautivo de los bancos" y sostiene que no existe razón para que las billeteras virtuales queden fuera.
El directivo de Bitso aseguraque ya está todo listo para este despliegue masivo. "Tenemos la tecnología preparada para hacerlo y contamos con herramientas que nos dan ventajas frente a los bancos tradicionales, porque los usuarios al recibir su sueldo en una plataforma como la nuestra lo pueden utilizar para sus gastos diarios", añade.
Además, resalta la velocidad y el costo del sistema: "El poder movilizar el dinero a conveniencia de forma simple, rápida y económica es una clara ventaja que ofrecemos nosotros con cripto".
Según su visión, una vez que el sueldo ingresa a una billetera digital, el trabajador accede a beneficios que los bancos tradicionales no brindan de manera tan ágil.
Pese al optimismo de las plataformas, el frente tributario presenta nubarrones que requieren atención inmediata. Fridenberg advierte que el éxito de la medida depende de una limpieza en el sistema de impuestos.
"Para ello es necesario que la reforma impositiva elimine distorsiones que limitan la libertad de elección. El Impuesto a las Ganancias y a las transferencias bancarias son urgentes e indispensables para tales fines", reclama el ejecutivo de Lemon.
Por su parte, el tributarista Marcos Zocaro pone el foco sobre el Impuesto al Cheque. El especialista sugiere que existe un vacío legal que beneficia a los empleadores que opten por activos digitales.
"En principio no se aplicaría ese gravamen, ya que no se trataría de movimiento de fondos en los términos bancarios tradicionales", analiza.
Sin embargo, recuerda que la Corte Suprema ya validó la constitucionalidad del impuesto para cualquier sistema organizado de pagos que reemplace una operación bancaria, lo que genera una incertidumbre que la reglamentación deberá despejar.
La reforma también modifica el Artículo 124 de la LCT. Bajo el nuevo esquema, las remuneraciones encuentran su destino en cuentas de entidades bancarias o en Proveedores de Servicios de Pago (PSP) habilitados por el BCRA.
Esta validación legal permite que las billeteras virtuales, ya registradas ante los organismos de control, gestionen salarios en pesos, dólares o cripto con total normalidad.
Los referentes del sector apuestan ahora a la educación del usuario. Bitso y Lemon coinciden en que la utilidad real de mover el dinero sin fronteras y con liquidez inmediata supera cualquier promoción temporal de la banca tradicional.
La reforma laboral no solo busca cambiar leyes, sino que formaliza una herramienta que los argentinos ya eligieron para proteger el valor de su tiempo frente a la volatilidad económica. El salario del futuro abandona el papel físico y abraza una estructura digital que promete mayor transparencia y libertad financiera para el trabajador.