Argentina sigue siendo el mayor emisor de turistas hacia Brasil, consolidando un "boom" que no parece tener techo. Entre enero y noviembre de 2025, los destinos brasileños registraron la llegada de 3,1 millones de argentinos, una cifra un 82,1% superior a la del mismo periodo del año pasado. Con las vacaciones de verano a la vuelta de la esquina, surge la duda recurrente: ¿cuál es la forma de pago más conveniente y segura?
La respuesta corta es que el escenario cambió drásticamente con la masificación de PIX, el sistema de transferencias instantáneas que ya utiliza el 76,4% de los brasileños. En un contexto donde el uso de tarjetas de crédito argentinas está sujeto al tipo de cambio oficial más percepciones e impuestos, las nuevas soluciones fintech permiten ahorros de hasta un 40%.
"La facilidad de operar con métodos innovadores es una ventaja que cada vez más usuarios aprovechan. En el poco tiempo que PIX lleva disponible, más del 40% de los clientes que realizan transferencias a Brasil ya usan esta solución", destaca Sebastián Díaz de Valdés, Country Manager de Global66.
A la hora de pagar desde una caipirinha en la playa hasta el hotel en Florianópolis, cada método tiene un impacto distinto en el bolsillo y la seguridad:
Pros: Es de aceptación universal en Brasil (desde shoppings hasta vendedores ambulantes). Permite pagar directamente en reales, evitando comisiones adicionales de tarjetas. Es más seguro porque no expone datos del plástico.
Contras: Requiere conexión a internet o datos móviles para escanear el QR.
Ahorro: Operando con billeteras globales, el costo financiero es significativamente menor al "dólar tarjeta".
Pros: Útiles para depósitos de garantía en hoteles o alquiler de autos. Ofrecen coberturas de seguros.
Contras: Los bancos aplican comisiones por transacciones en el exterior que elevan el costo entre un 4,5% y un 7%. Existe un riesgo latente de clonación y no son aceptadas en negocios informales.
Pros: Aceptación universal y no requiere conectividad.
Contras: Es la opción más vulnerable ante robos o pérdidas. Además, las casas de cambio aplican spreads (diferencia de precio) muy altos, lo que lo convierte en el método menos eficiente financieramente.
Para evitar que los gastos se disparen durante el verano, los especialistas en finanzas personales sugieren seguir cuatro reglas de oro:
Convertí con anticipación: No esperes a llegar a la frontera. Convertir pesos a reales antes de viajar permite aprovechar momentos de tipo de cambio favorable y protegerse de fluctuaciones.
Evitá las casas de cambio: Las terminales en aeropuertos o zonas turísticas tienen las peores tasas. Es preferible usar plataformas digitales que operan con el tipo de cambio real.
Presupuesto cerrado: Planificá tus gastos y convertí solo lo necesario para evitar el costo de "re-convertir" el sobrante al regresar.
Priorizá lo digital: Moverse sin efectivo no solo es más barato, sino que reduce drásticamente el riesgo de delitos en zonas concurridas.
Ya sea para el traslado, las comidas o las compras de último momento, la adopción de PIX se perfila como la herramienta indispensable para el turista argentino en 2026, combinando conveniencia económica con la máxima seguridad tecnológica.