El furor por las memecoins, activos cuyo valor radica más en la cultura de internet que en fundamentos técnicos, atraviesa una caída abrupta que pone en jaque su propósito.
De representar cerca de un 20% del mercado a finales de 2024, hoy apenas captan el 2,5 % del interés del sector, según datos recientes, por lo que nace la pregunta si es una corrección pasajera o el principio del fin de un ciclo.
De acuerdo con datos publicados por KAITO en redes sociales, la cuota de mercado de las memecoins cayó de aproximadamente el 20% a cerca del 2,5% entre diciembre de 2024 y octubre de 2025.
Las tendencias de búsqueda global para el término "memecoins" también reflejan esta caída, ya que el puntaje de Google Trends pasó de un máximo de 100 a sólo 7 en ese mismo lapso.
En las exchanges descentralizadas (DEX) de la red Solana, el volumen de trading de las memecoins se redujo del 60% en principios de 2025 a cerca de 30% en octubre.
Por otro lado, entre las razones que se apuntan a este cambio de ánimo se encuentran el desplazamiento del interés hacia criptomonedas o tokens con utilidad real, como las vinculadas a inteligencia artificial, finanzas descentralizadas (DeFi) o protocolos emergentes.
También existe una fuerte concentración de capital en unos pocos proyectos, por ejemplo, parte del mercado de nuevos "meme-tokens" está dominado por apenas una docena de activos que concentran más del 55% de la capitalización reciente.
Mientras que también existe una caída significativa en la creación de nuevos tokens de tipo meme, ya que los lanzamientos bajaron un 56% en septiembre respecto al inicio del año.
Otro factor es el desplazamiento de recursos hacia activos con mayor "story-telling" o función, por ejemplo, tokens vinculados a inteligencia artificial, agentes autónomos o protocolos DeFi, podría marcar una nueva fase del mercado cripto.
De esta forma, la fuerte contracción en el interés por las memecoins evidencia que el mercado de criptomonedas está transitando un cambio de paradigma, donde la utilidad, la narrativa innovadora y el valor sostenido parecen imponerse sobre el simple efecto viral.
En conclusión, si bien no se puede descartar un rebrote para los tokens "meme", lo cierto es que la fiebre especulativa que los impulsaba perdió fuerza y quedará por ver si se está ante una corrección de ciclo o ante un nuevo capítulo en la historia de los activos digitales.