BlackRock rediseño uno de sus fondos monetarios insignia para atender específicamente a emisores de stablecoins.
El nuevo vehículo, denominado BlackRock Select Treasury Based Liquidity Fund (BSTBL), busca posicionarse como una solución segura y regulada para la gestión de reservas vinculadas al dólar estadounidense.
La iniciativa responde al crecimiento sostenido del mercado de las stablecoins, activos digitales que mantienen paridad con monedas fiduciarias como el dólar, y que requieren estructuras de respaldo transparentes y confiables.
Con más de u$s13,5 billones bajo gestión, BlackRock apunta a convertirse en el principal gestor de reservas para emisores de estos tokens, ofreciendo liquidez inmediata y cumplimiento normativo en un entorno cada vez más regulado.
El fondo BSTBL se adapta a la Ley GENIUS, que establece estándares más rigurosos para los emisores de stablecoins. Esta normativa exige que las reservas estén respaldadas por activos altamente líquidos y seguros, como bonos del Tesoro, y que sean gestionadas por entidades con experiencia probada en administración financiera.
En este contexto, BlackRock se posiciona como un socio estratégico para empresas que buscan operar dentro del marco legal sin comprometer la eficiencia operativa.
Jon Steel, director global de productos y plataformas del negocio de gestión de efectivo de BlackRock, explicó que el objetivo es ofrecer un "vehículo de reserva confiable" que permita a los emisores depositar los fondos de sus clientes con tranquilidad. Y añadió que la compañía ya se considera "un gestor de reservas destacado" en este segmento emergente.
BlackRock, el mayor gestor de activos a nivel global, registró entradas netas récord en su plataforma iShares durante el tercer trimestre de 2025, impulsadas por una fuerte demanda institucional de exposición a criptomonedas.
La mayor parte de ese flujo estuvo concentrada en los ETF vinculados a Bitcoin, los más elegidos por los inversores institucionales para acceder al mercado cripto de forma regulada.
Según el informe trimestral de la compañía, iShares atrajo u$s205.000 millones en nuevos capitales, consolidando su liderazgo en el mercado global de ETFs.
El ETF de Bitcoin de BlackRock, conocido como IBIT, fue uno de los principales impulsores del trimestre, acompañado por el fondo de Ethereum (ETHA). Entre ambos captaron u$s17.000 millones en entradas netas, una parte sustancial del total.
Esta tendencia se aceleró entre el 30 de septiembre y el 3 de octubre, cuando los ETF de criptomonedas sumaron u$s2.700 millones en apenas cuatro días. BlackRock concentró el 79% de ese flujo.
El CEO de la firma, Larry Fink, explicó que este crecimiento responde a la evolución del mercado cripto y también a la capacidad de BlackRock para anticiparse a las transformaciones financieras globales.