Larry Fink, CEO de BlackRock, admitió que visión sobre Bitcoin (BTC) y calificó a la criptomoneda como un "instrumento financiero legítimo" y reconoció que su opinión de hace cinco años "era errónea".
Este reconocimiento se produjo en el contexto de una histórica liquidación en el mercado cripto, que dejó en evidencia la volatilidad del sector pero también su creciente institucionalización.
Fink explicó que su escepticismo inicial se basaba en la falta de regulación y en el uso especulativo de las criptomonedas. Sin embargo, con el tiempo, pudo ver cómo Bitcoin evolucionaba hacia un activo con características similares al oro, especialmente en economías donde las monedas locales se devalúan.
Para Fink "Bitcoin es el oro digital" y destacó su potencial como refugio de valor en contextos de incertidumbre económica y política.
El cambio de postura del ejecutivo no es solo discursivo. BlackRock tuvo un rol clave en el impulso de los ETF de Bitcoin al contado, un hito que contribuyó a la legitimación del activo en los mercados tradicionales.
Después de la aprobación de estos fondos, el ETF de Bitcoin de BlackRock registró una entrada de más de u$s117 millones, reflejando el interés institucional por la criptomoneda.
Para Fink, el valor de Bitcoin está en su independencia
Fink reconoció que "nunca habría predicho" este nivel de adopción, y recomendó a los inversores considerar a Bitcoin como parte de sus portafolios diversificados.
Durante la entrevista, también se refirió a la naturaleza descentralizada de BTC como una de sus principales virtudes.
Al no depender de gobiernos ni bancos centrales, ofrece una alternativa de inversión que escapa a las políticas monetarias tradicionales.
Esta independencia, según Fink, es clave para entender su atractivo en países con alta inflación o controles cambiarios.
El giro de Larry Fink refleja una evolución personal y un cambio profundo en la percepción institucional de las criptomonedas.