En un mercado dominado por Bitcoin (también hay que sumar a Ethereum y BNB), dos veteranas del ecosistema cripto comienzan a despertar tras meses de lateralización.
Cardano (ADA) y XRP, dos de las altcoins con mayor capitalización y comunidades más sólidas, se enfrentan a un punto de inflexión técnico que puede definir su destino de cara a fin de año.
Ambos proyectos muestran señales mixtas, pero con un predominio alcista: los indicadores sugieren una base de acumulación, mientras que la presión vendedora todavía limita cualquier intento de despegue sostenido.
Sin embargo, detrás de los gráficos hay factores estructurales y regulatorios que podrían devolverles protagonismo en el cuarto trimestre.
Cardano lleva semanas consolidándose en una franja estrecha, atrapada entre los u$s0,80 y u$s0,88. Aunque el token llegó a cotizar por encima de su media móvil simple de 50 días (u$s0,85), los alcistas no lograron quebrar la línea de resistencia que marca el límite del actual triángulo descendente.
El comportamiento de los grandes holders (LTH) agrega una lectura interesante: el Mean Coin Age (métrica que mide la antigüedad promedio de las monedas en circulación) mostró una leve caída tras meses de ascenso, señal de que parte de los inversores de largo plazo comenzaron a realizar ganancias.
"Aun así, los datos on-chain revelan que buena parte de las ADA retiradas de exchanges fueron a billeteras no vinculadas a venta inmediata, lo que sugiere una fase de redistribución controlada más que de capitulación", aporte a iProUP el analista financiero con foco cripto Emiliano Luque.
El experto destaca que el soporte de u$s0,80 sigue siendo el nivel psicológico clave: "Mientras ADA se mantenga por encima de esa zona, el sesgo sigue siendo constructivo". Una ruptura clara por encima de u$s0,96 podría habilitar un rally hacia u$s1,02, punto que el mercado considera la "barrera de validación".
Superarla implicaría el regreso de la tendencia alcista, con objetivos intermedios en u$s1,30 y u$s1,50. Es decir, hasta 80% de upside.
"La posibilidad de una expansión hacia los u$s2 no está descartada, aunque dependerá del volumen y del apetito de riesgo en el mercado global de altcoins", resalta Luque.
En términos de estructura, ADA muestra un patrón de bandera alcista, un tipo de consolidación que históricamente antecedió subas fuertes cuando coincidió con repuntes de Bitcoin.
Además, el mercado espera novedades sobre el fondo cotizado (ETF) de Cardano con staking propuesto por REX Advisers y Osprey Funds ante la SEC de Estados Unidos. De aprobarse, sería el primero en su tipo en incorporar recompensas de validación, un paso que podría atraer flujos institucionales y dar mayor exposición regulada a la red.
Ripple (XRP) atraviesa un momento técnico de alta tensión. La criptomoneda se encuentra presionando contra una resistencia estructural cercana a los u$s3,10, nivel que la economista y analista cripto Laura Ventura define en diálogo con iProUP como "el muro que separa la consolidación de la expansión".
Según su modelo basado en extensiones de Fibonacci multicíclicas, un cierre mensual por encima de ese umbral puede disparar un movimiento acelerado hacia los u$s9, y eventualmente hacia los u$s13, si el momentum se mantiene. Es decir, hasta tres veces su precio actual.
"No es si, sino cuándo. El gráfico de XRP muestra una base de alta calidad que lleva casi un año en construcción. La línea de conversión del indicador Ichimoku, ubicada cerca de u$s2,63, se mantiene como soporte dinámico desde noviembre pasado", refuerza la experta.
El precio no cerró ninguna vela mensual por debajo de ese nivel, una señal de fortaleza poco común en la historia de XRP. En el plano semanal, la media móvil simple de 50 semanas ronda los u$s2,37, un soporte adicional que sigue "alcanzando al precio" mientras la estructura de mínimos ascendentes se consolida.
En el corto plazo, los analistas observan un triángulo descendente que, de invalidarse al alza, puede empujar al token hacia u$s3,40 y luego a u$s3,66. La zona de u$s2,80 a u$s2,70 funcionaría como rango de absorción si el mercado necesita más tiempo para acumular liquidez.
Aunque ADA y XRP presentan trayectorias diferentes, ambas enfrentan un desafío común: romper la apatía del mercado en un momento en que los inversores concentran su atención en Bitcoin, ETH, BNB, los ETF y las memecoins de alto riesgo.
Cardano intenta recuperar narrativa de utilidad a través de su ecosistema de contratos inteligentes y nuevas integraciones DeFi, mientras que XRP busca validación institucional tras los avances legales de Ripple en su disputa con la SEC. En ambos casos, la estabilidad macro y la posible continuidad del rally de BTC serán determinantes.
Los expertos coinciden en que, si Bitcoin mantiene su rango actual por encima de los u$s110.000 (al momento de esta redacción en u$s122.000), las altcoins pueden recuperar tracción en la segunda mitad de octubre.
En ese escenario, ADA tendría espacio para probar nuevamente el nivel de u$s1, mientras XRP puede consolidarse por encima de u$s3 antes de intentar un breakout más amplio.
"La clave para ambos activos estará en el volumen de negociación y la reacción del mercado institucional", añade Ventura. Por lo tanto, hay dos cuestiones para estar atentos:
Mientras tanto, los niveles de defensa permanecen claros: u$s0,80 para ADA y u$s2,60 para XRP. Perder esas zonas implicaría prolongar la fase de rango hasta 2026. Mantenerlas, en cambio, abriría el camino a un fin de año con fuertes movimientos en el universo altcoin.
La primera batalla será técnica (romper resistencias críticas), pero el verdadero cambio llegará cuando el flujo institucional y el interés minorista confluyan nuevamente en el mercado de altcoins.
El cuarto trimestre puede ofrecer una segunda oportunidad para las grandes olvidadas del ciclo anterior. Si la liquidez acompaña, ADA y XRP estarán en condiciones de dejar atrás meses de inercia y retomar el papel que las convirtió, alguna vez, en los proyectos más prometedores del ecosistema cripto.