Interpol confirmó la incautación de u$s97 millones en criptomonedas y un total de u$s439 millones en activos durante una operación global contra el ciberdelito que se desarrolló, entre abril y agosto, en 40 países y cinco continentes.

El operativo, llamado HAECHI VI y financiado por Corea del Sur, se centró en fraudes financieros en línea como phishing de voz, estafas románticas, esquemas de inversión, lavado de dinero en juegos ilegales y fraudes de comercio electrónico.

Se congelaron 400 billeteras de criptomonedas y más de 68.000 cuentas bancarias vinculadas a actividades ilícitas.

"Este es un ejemplo de cómo la cooperación global puede proteger a las comunidades y salvaguardar los sistemas financieros", dijo Theos Badege, director interino del Centro de Delitos Financieros y Anticorrupción de Interpol, en un comunicado de prensa.

Los casos más relevantes incluyeron el arresto de 45 sospechosos en Portugal por desviar fondos de la seguridad social y la confiscación de u$s6,6 millones en Tailandia, parte de un fraude empresarial que afectó a una compañía japonesa.

En Corea del Sur, la policía recuperó u$s3,9 millones enviados a Dubái tras detectar documentos falsos, gracias al sistema I-GRIP de Interpol.

Según fuentes policiales, los grupos criminales operaban con estructuras transnacionales, utilizando empresas fantasma y plataformas de pagos digitales para ocultar movimientos de dinero.

En algunos casos, los fondos pasaban por varias jurisdicciones en cuestión de horas, lo que hacía indispensable la cooperación internacional para frenarlos a tiempo.

Aunque el dinero fiat sigue siendo la principal vía de fraude, las criptomonedas se consolidaron, en el último tiempo, como herramienta atractiva para los ciberdelincuentes.

La empresa de análisis blockchain Chainalysis estimó que en 2024 los flujos ilícitos en cripto alcanzaron los u$s40.900 millones, cifra que incluye desde estafas de inversión hasta lavado de capitales en plataformas de intercambio poco reguladas.

"Ninguna agencia o jurisdicción puede enfrentar este desafío sola. La naturaleza transfronteriza de las criptomonedas exige cooperación más profunda entre países y sectores", señaló Ari Redbord, jefe global de políticas de TRM Labs, en diálogo con Decrypt.

Phil Larratt, director de investigaciones de Chainalysis, remarcó a su vez que "los resultados de estas operaciones solo son posibles cuando gobiernos, reguladores y empresas privadas comparten inteligencia y actúan juntos".

Interpol ya había dado un golpe similar en 2024 con la Operación HAECHI V, que permitió recuperar u$s400 millones y detener a más de 5.500 sospechosos. Pero el incremento de los montos y la sofisticación de las maniobras deja en claro que la amenaza del ciberdelito sigue en expansión.

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