La polémica que se desató este domingo en la red social X entre Carlos Maslatón y Marcos Galperin, dos de las voces más influyentes del ecosistema económico y tecnológico argentino, vuelve a poner el foco en el rol del Banco Central (BCRA).
Todo comenzó con un hilo del economista Ramiro Castiñeira, que celebraba los 90 años del BCRA y destacaba los avances recientes hacia una política monetaria más ortodoxa.
Castiñeira enumeró los hitos del organismo y sostuvo que el país atraviesa un "upgrade institucional" inédito, con tipo de cambio flotante, tasas de interés libres y control sobre la cantidad de dinero primario. Afirmó que, por primera vez, el Banco Central dejó atrás la "dominancia fiscal" y ya no emite para financiar al Tesoro ni sostiene deuda remunerada.
Sin embargo, la lectura fue rápidamente intervenida por Marcos Galperin, fundador y CEO de Mercado Libre, quien respondió al hilo con una frase tajante: "Cerrarlo es el camino", en referencia al BCRA.
La declaración desató una catarata de respuestas, pero fue Carlos Maslatón, abogado, analista político y referente del liberalismo argentino, quien protagonizó el contrapunto más filoso.
Maslatón le contestó directamente a Galperin con un extenso posteo técnico en el que argumentó por qué el cierre del BCRA no es viable en un sistema como el actual.
"Para cerrar el Banco Central el sistema monetario tiene que ser como el del Bitcoin o el del patrón oro clásico, sin posibilidad de multiplicar el dinero", comenzó Maslatón, aludiendo a un esquema sin expansión crediticia.
Explicó que mientras los depósitos bancarios puedan convertirse en más crédito, se requiere un ente regulador como el BCRA que supervise encajes y actúe ante corridas financieras o crisis deflacionarias.
Además, apuntó directamente a las operaciones de Mercado Libre: "Lo que hoy hace Mercado Libre remunerando depósitos a voluntad y prestando dinero, o sea creando y multiplicando moneda bancaria, no podría técnicamente existir sin Banco Central", disparó.
Y advirtió que un retorno a una moneda convertible sin ese respaldo implicaría una medida extrema: "No habría otra que confiscar los actuales depósitos y derogarlos de pleno derecho. Porque no se puede revertir este sistema creado de moneda fiduciaria salvo defaulteándolo por completo".
El fundador de Mercado Libre no dejó pasar la respuesta y volvió al centro del debate con una nueva declaración: "La banca fraccional debería estar prohibida. Alternativamente, el que la hace, no debiera tener un BC que lo salve cuando las papas queman", sostuvo Galperin, criticando la lógica de rescates estatales a bancos.
Y cerró con una sentencia provocadora:"El sistema de la banca fraccional no funciona. No funcionó en Argentina en 2001, ni en EE.UU. en 2008, ni en Europa en 2008. Equivale al socialismo en las pérdidas y el capitalismo en las ganancias".
El intercambio entre Galperin y Maslatón deja al descubierto las tensiones entre quienes promueven un sistema financiero sin intervención estatal y quienes consideran al Banco Central un actor necesario para evitar crisis sistémicas.
Mientras algunos celebran una mayor libertad monetaria, otros advierten que eliminar al BCRA sin rediseñar todo el sistema implicaría riesgos severos para la estabilidad económica y los derechos adquiridos por los ahorristas.