Un número cada vez mayor de inversores en Wall Street considera que Ethereum tiene el potencial de superar a Bitcoin y posicionarse como el activo digital más importante dentro del competitivo y cambiante ecosistema de las criptomonedas.
Durante una charla con CNBC, Paul Brody, líder global de blockchain en Ernst & Young, reafirmó esta perspectiva al señalar con claridad: "Ether será un activo más grande que Bitcoin".
Paul Brody, líder de blockchain en Ernst & Young, proyectó una migración masiva hacia Ethereum tras la inscripción de la Ley Genius, anticipando que más bancos y empresas incluirán ETH en sus reservas junto al Tesoro.
Este fenómeno, según Brody, se verá impulsado por el crecimiento de la tokenización, señalando que movimientos como el anuncio de Robinhood sobre su capa 2 en Ethereum consolidan a esta red como el eje operativo del ecosistema.
"Debido a que ETH es el poder de todas estas transacciones (tokenización) en el ecosistema de Ethereum, impulsará una tremenda demanda de ETH a un activo mucho mayor que Bitcoin" afirmó Paul Brody.
Actualmente, más de 6.000 millones de dólares en ETH están en manos corporativas, lo que refuerza las proyecciones de Brody sobre el avance sostenido de esta criptomoneda frente a Bitcoin en términos de adopción institucional.
Sharplink Gaming, dirigida por Joseph Lubin, y Bitmine, presidida por Tom Lee, cruzaron la barrera de los mil millones de dólares en ETH en menos de tres meses, marcando un hito estratégico.
Bitmine ya controla 300.700 ETH y aspira a adquirir el 5% del suministro total, unos seis millones de ETH, para maximizar las ganancias por staking y beneficiarse del boom de la tokenización.
El desarrollo de las finanzas descentralizadas sobre Bitcoin sigue en una fase temprana, mientras que Ethereum consolida su liderazgo en este sector, lo que podría posicionarlo con un rendimiento superior en el largo plazo.
Durante el segundo trimestre, Ethereum mostró un renovado optimismo del mercado, que impulsó un flujo de capital desde Bitcoin hacia ETH, evidenciado en la recuperación de la relación ETH/BTC tras un mínimo histórico de cinco años.
Este indicador, que mide el desempeño relativo entre ambos activos, pasó de 0.017 a 0.030 entre mayo y julio, lo que representa una ganancia del 72% a favor de los inversores que apostaron por Ethereum.
En otras palabras, quienes sostuvieron ETH en ese periodo obtuvieron más del 70% de retorno adicional en comparación con aquellos que mantuvieron posiciones en BTC, confirmando una clara rotación del interés institucional.
Si bien aún es incierto si esta tendencia continuará a largo plazo, los analistas destacan que el entusiasmo especulativo reciente se concentró más en Ethereum que en Bitcoin, con señales claras desde los mercados derivados.
Sean Dawson, jefe de investigación en Derive, afirmó que los operadores de opciones anticipan un salto de Ethereum por encima de los 4.000 dólares para el 25 de julio, marcando expectativas alcistas en el corto plazo.
Dawson también mencionó que las probabilidades de alcanzar ese nivel aumentaron un 14%, mientras que para un precio objetivo de 5.000 dólares hacia fines de 2025, la posibilidad creció un 27% entre los traders.
"Con los vientos de cola macro, las tasas de caída y la alineación de impulso del ETF, la mitad de 2025 se está estableciendo para ser la más fuerte de Ethereum en años", afirmó Dawson.
A pesar del optimismo, algunos inversores prefirieron cubrirse ante posibles caídas, según Coinbase: "El sesgo ETH 25D Put-Call (30 días) es ligeramente positivo ( 0.95%), lo que sugiere que algunos inversores todavía buscan protección a la baja en ETH a muy corto plazo".