Cuando parecía que las aguas se calmaban y Bitcoin rompía su propio récord al tocar los u$s112.000, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender la mecha de la guerra comercial.
Esta vez, el foco de su furia arancelaria es la Unión Europea, una movida que ya está generando ruido en los mercados financieros globales y, como era de esperarse, también impacta en el precio de Bitcoin.
Desde su cuenta en Truth Social, Trump no anduvo con vueltas: acusó al bloque continental de "aprovecharse de Estados Unidos en el comercio" con barreras, impuestos y "demandas injustificadas".
El remate fue contundente: ante la falta de avances en las negociaciones, recomendó un "arancel directo del 50%" para los productos europeos a partir del 1 de junio de 2025.
Qué pasa con el Bitcoin
Como era de esperar, el mensaje de Trump, que muchos interpretan como una amenaza directa, hizo que los inversores salieran corriendo de los activos considerados "de riesgo".
Aunque Bitcoin no encaja del todo en esa categoría, en momentos de crisis suele sentir el cimbronazo. De hecho, su precio de BTC ya muestra una caída en los últimos días desde el récord de u$s112.000 y la mirada está puesta en cómo evolucionará su cotización.
Si bien la noticia de Trump genera un escenario adverso a primera vista, es clave recordar la capacidad de Bitcoin para sorprender. La criptomoneda demostró una y otra vez su increíble habilidad para recuperarse rápidamente de las caídas. ¿Un ejemplo? El derrumbe y el posterior rebote de 2020, en plena pandemia de COVID-19.
Además, en las últimas semanas se desató un verdadero FOMO (miedo a quedarse afuera) institucional y corporativo por Bitcoin. Grandes fondos y empresas están metiendo millones de dólares, y parece que no les importa tanto el precio a corto plazo, ya que actúan con una visión de largo plazo.
El analista Iván Bolé, quien ya venía anticipando los movimientos de BTC a iProUP, reflexiona: "Esto no es la corrección, sino un primer signo de agotamiento".
Cuando se le consulta sobre el grado de incidencia de Trump en esta baja de BTC (u$s109.000 al momento de esta redacción), el experto arremete: "Las noticias pueden acelerar o terminar de decidir movimientos que están cocinándose, en este caso uno bajista, pero no crean el precio o la estructura de mercado".
Bolé entiende que este tipo de noticias ya son algo así como un alfiler que explota un globo que no daba más: "50% de subida ininterrumpida desde el 7 de abril. Demasiado alcista está para la noticia de Trump".
El resto del mercado cripto se contagió del movimiento bajista: Ether (ETH), la segunda criptomoneda, bajó un 3% en 24 horas, y la capitalización total del mercado cripto se redujo un 1% en el mismo período.
La agitación se reflejó también en el mercado de derivados, con liquidaciones que superaron los u$s550 millones, de los cuales casi u$s400 millones corresponden a cierres de posiciones largas (apuestas alcistas).
El próximo récord de Bitcoin
Las expectativas alcistas para Bitcoin en lo que resta del año siguen vigentes. El analista Rodrigo Mansilla sostiene que puede ir rápidamente a buscar la zona de los u$s118.000 y resalta que "los indicadores técnicos dan una señal positiva: Bitcoin se mantiene en tendencia alcista".
"Un clásico indicador como el cruce de medias móviles (simples o exponenciales) de 10 y 20 días lo confirma. Es cierto que BTC es un activo volátil, pero las correcciones bajistas no siempre anulan la macro-tendencia que, por el momento, sigue apuntando hacia arriba", concluye Mansilla.
Bolé sotiene que, considerando que Bitcoin exhibe aún tendencia alcista de mediano y largo plazo, "entendemos que la corrección subsiguiente será un mero proceso de 'oxigenación' del precio, toma de ganancias y renovación de interés compradora".
Respecto al precio, puntualiza que "técnicamente, esa corrección puede llevarlo a valores que oscilan entre u$s88.850 y u$s97.678, con una media de u$s93.265".
Ese puede ser el momento "oportuno" en el que convendrá adquirir más monedas y ganar con la recuperación hasta nuevos máximos.
"El proceso no será inmediato: puede tardar cuatro o cinco semanas, a lo sumo seis. Pero falta mucho aún y una sola vela roja diaria no es corrección", finaliza.