Un impostor que se hacía pasar por un el reconocido influencer cripto Ansem perpetró un robo de más de u$s2,6 millones en tokens de la red Solana (SOL). 

Esta estafa tuvo lugar en la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter), donde el estafador se valió del auge de los memes relacionados con criptomonedas. 

El objetivo era seducir a los inversores  hacia una venta ficticia anticipada de un token ficticio denominado "BULL".

ZachXBT, un investigador especializado en análisis de blockchain, detectó esta estafa. 

Y detalló que en el contexto de la creciente popularidad de las criptomonedas meme, los inversores deben ejercer precaución para no caer en las trampas de los estafadores, quienes aprovechan el entusiasmo generalizado para llevar a cabo sus fraudes.

 El impostor, haciendo uso de la identidad de Ansem, promocionó la supuesta preventa del token "BULL" en respuesta a los tweets auténticos que había posteado el influecer cripto. 

El robo fue por una suma millonaria e incluyó suplantación de identidad

Pérdidas considerables

Esta táctica engañosa provocó pérdidas considerables, siendo la mayor víctima afectada con una pérdida cercana a los u$s1,2 millones.

Durante el vertiginoso ascenso del token Book of Meme (BOME), se desencadenó un caso de estafa en el ecosistema criptográfico. 

BOME, una criptomoneda de tipo meme integrada en la red blockchain de Solana, experimentó un rápido aumento en popularidad, especialmente tras su inclusión en la plataforma de intercambio Binance.

De acuerdo con el informe de Scam Sniffer, aproximadamente 57,000 individuos se vieron afectados por estafas relacionadas con criptomonedas durante el mes de febrero, acumulando pérdidas conjuntas que alcanzaron los u$s47 millones

Estas prácticas fraudulentas, predominantemente centradas en técnicas de phishing, se llevaron a cabo en diversas plataformas de redes sociales.

La infraestructura principal de Ethereum, conocida como mainnet, sufrió las mayores consecuencias, con usuarios que experimentaron una disminución del 78% en los fondos afectados por estos actos ilícitos. 

Específicamente, los tokens ERC20, basados en la red Ethereum, representaron la mayor proporción de las pérdidas, ascendiendo a un total de 40 millones de dólares.

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