Bitcoin (BTC) prolonga su crecimiento con fuerza desde el comienzo del año, y ya roza los u$s25.000 por unidad, su máximo valor alcanzado desde junio del año pasado.
Luego de un 2022 complicado para la industria marcado por el 'criptoinvierno' (tal como se denomina a la fase bajista que se prolongó todo el año pasado), la moneda digital arrojó un crecimiento cercano al 50% y hay optimismo sobre su futuro.
Esto era algo impensado meses atras, cuando se llegó a dudar sobre el futuro de la criptodivisa y de la industria en general. Sin embargo, los índices juegan cada vez más a su favor.
Es así como varios indicadores aparecieron en las últimas semanas con datos positivos que impulsarían aún más el mercado alcista de BTC.
Según la consultora CoinGlass, la volatilidad del precio de Bitcoin mostró un repunte en lo que va del 2023, con su nivel más alto en tres meses. La volatilidad ronda el 2,62%, y días atras estuvo cerca del 3%.
La última vez que el índice alcanzó porcentajes de esta envergadura fue durante diciembre, en medio de la crisis del mercado, suscitada por el exchange FTX.
En aquél entonces, la volatilidad llego al 3,66%, su cifra más alta desde el 7 de diciembre especificamente, cuando el criptoactivo se encontraba en niveles de cotización inferiores a los u$s17.000.
Para ver más incrementos de este dato, hay que ir un mes más atras en el tiempo, puntualmente el 7 y el 9 de noviembre, cuando la volatilidad trepó hasta el 4%, cuando el precio de BTC pasó de u$s20.600 a menos de u$s16.000 en menos de 48 horas.
El indicador está generalmente asociado a tendencias de precio bajistas, por lo menos en el último tiempo. Esto se debe a los golpes que hacen desplomar significativamente los precios de las criptomonedas, sobre todo a lo largo de 2022.
FTX, la firma cripto de Sam Bankman-Fried, pasó de ser el tercer exchange de criptomonedas más grande del mundo, valorado en u$s32.000 millones, a desplomarse dejando un tendal de acreedores y empresas tambaleando.
Cuando a mediados de noviembre se declaró en quiebra, se estimaron daños para sus clientes en torno a los u$s10.000 millones.
Si bien la investigación judicial recién comienza, se sabe que Bankman-Fried hizo un mal uso de los fondos de los usuarios y carecía de estados financieros confiables o de cualquier control interno real.
Arrastrada por esta caída, días después la plataforma de préstamos criptográficos BlockFi pidió la protección por bancarrota del Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras de Estados Unidos para el Distrito de Nueva Jersey.
En la presentación, indicó que tenía más de 100.000 acreedores, con pasivos y activos que oscilaban entre u$s1.000 y u$s10.000 millones.
Ignacio Carballo, director de Ecosistema Fintech y Digital Banking de UCA, explicó a iProUP que la caída de BlockFI puede considerarse como la primera gran réplica luego de la quiebra de FTX".
"La onda expansiva todavía siembra incertidumbre en el sector y, en efecto, comienzan a verse otros efectos luego del colapso. Sin dudas, repercute en el mundo cripto. En el sector en general, se están viendo recortes en personal y salidas de fondos, entre otras cosas", agregó Carballo.
Julián Colombo, CEO de Bitso Argentina, destacó que "a pesar de que es una etapa complicada para la industria, y especialmente para aquellos afectados por el incumplimiento de FTX, creemos que es momento para poner sobre la mesa la importancia de la regulación, medidas de cumplimiento y auditorías, así como las prácticas internas de las empresas que garanticen a los usuarios seguridad, transparencia y confianza".
Además, subrayó en diálogo con iProUP que "hoy más que nunca es importante brindarles a las personas la información y herramientas necesarias para que sepan en qué compañías están depositando su confianza, por lo que la educación de los usuarios será fundamental para incentivar el desarrollo de la industria cripto con mayores estándares relacionados con la seguridad y la confianza".
"Evidentemente, el caso de FTX movió a todo el sector y generó inquietudes que se tradujeron en volatilidad, subiendo así el número de transacciones", añadió.
Desde Buenbit indicaron que la quiebra de FTX no impactó sobre el exchange argentino, por no tener ninguna clase de exposición a los activos de esta compañía. De hecho, remarcaron que continúa con su proceso de crecimiento.
"Acompañamos a la comunidad en este momento y, como siempre, seguimos construyendo para aportar transparencia al ecosistema", completaron desde Buenbit.