La exchange de criptomonedas FTX, que presentó su quiebra meses atrás, tiene deudas con decenas de empresas de alto perfil, entre las que se incluyen Amazon, Netflix, Apple, Google, Binance, entre otras.
Un documento judicial de 116 páginas muestra que la empresa antes dirigida por Sam Bankman-Fried debe dinero a gobiernos, compañías de medios, universidades, instituciones financieras, aerolíneas, hoteles, organizaciones benéficas, y más.
Entre los nombres también se encuentran varias firmas de criptomonedas de alto perfil como:
Algunos periódicos y empresas de medios conocidas figuran entre los acreedores, incluidos Wall Street Journal, Fortune y Fox Broadcasting.
Las aerolíneas American Airlines, Spirit y Southwest, así como la Universidad de Stanford, en EE.UU., donde los padres del fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, trabajan como profesores, también se enumeran en el documento, indicó el informe.
Si bien los documentos no detallan el monto adeudado a cada uno, brindan una imagen sobre el enorme alcance de las deudas de FTX y el impacto de su colapso.
La compañía reveló previamente que debía aproximadamente u$s3.100 millones a sus 50 principales acreedores, con los dos reclamos individuales más grandes por u$s226 millones y u$s203 millones.
FTX y más de 100 entidades afiliadas se declararon en bancarrota el pasado 11 de noviembre, dejando un agujero estimado de u$s9.000 millones (aunque el monto exacto aún es incierto).
Bankman-Fried, quien renunció como CEO el mismo día, fue acusado de fraude y otros cargos en EE.UU. y actualmente se encuentra bajo arresto domiciliario en casa de sus padres en California.
Los documentos con el listado de acreedores fueron presentados por los abogados de la empresa como parte del proceso de quiebra en un tribunal estadounidense en Delaware. La presentación está firmada por Edgar W. Mosley II, director de la empresa de reestructuración Alvarez & Marsal.
El colapso de FTX repercutió en una industria de las criptomonedas ya asediada, lo que provocó pedidos de mayor regulación y responsabilidad para aquellos que lideraron el intercambio.
Fue una caída sorprendente para Bankman-Fried, una figura líder de la industria que alguna vez se estimó en más de u$s25.000 millones y se convirtió en un importante donante político.
En numerosas entrevistas con los medios después de la declaración de bancarrota de FTX, Bankman-Fried intentó argumentar que el colapso del intercambio se debió a errores de la administración, en lugar de un fraude intencional.
Sin embargo, esa defensa será más difícil de probar luego que el fiscal de Nueva York, Damian Williams, anunciara que dos de los asociados más cercanos de Bankman-Fried, Caroline Ellison y Gary Wang, se declararan culpables de fraude y ahora cooperan con la fiscalía.