La minería de Bitcoin (BTC) y otras criptomonedas será incluida dentro de las categorías que pagan el Impuesto a los ingresos brutos en la Provincia de Buenos Aires.
De la mano del Gobernador Axel Kicillof, se presentó la modificación a la ley, que fue aprobada por diputados y senadores provinciales y comenzará a entrar en función desde el 1 de enero de 2023.
La Ley N° 10.397 del Código Fiscal incorporará la categoría "Servicios de procesamiento y validación de transacciones de criptoactivos y/o criptomonedas por cuenta propia, en forma colaborativa o bajo cualquier otra modalidad".
El impuesto, de un 4%, se aplicará cuando el equipamiento que se utilice para la actividad se encuentre en jurisdicción bonoarense, según explicó el contador especializado en tributación, Marcos Zocaro.
De todas maneras, la ley no especifica qué clase de equipos son los que ingresan en esta categoría.
Por ejemplo, en la minería con Prueba de Trabajo (PoW, por sus siglas en inglés), se pueden usar tarjetas gráficas. Pero en la Prueba de Participación (PoS), se utilizan computadoras para los algoritmos de consenso, por lo que no se aclara si también serían contados.
De acuerdo con lo que detalló el Gobierno, el impuesto a los ingresos brutos es empleado en actividades autónomas, actos u operaciones y consiste en la "aplicación de un porcentaje sobre la facturación de un negocio independientemente de su ganancia".
Su aplicación puede diferir en las 23 provincias de la Argentina, como también en la Ciudad de Buenos Aires, por la autoridad que tiene cada jurisdicción.
Para calcular el pago de la alícuota no se especificó tampoco la cotización que se tomará de Bitcoin y el resto de las criptomonedas, una cifra que puede variar según el sitio de intercambio que se consulte.
La minería de BTC es una actividad que ya paga otros dos impuestos en el país. El impuesto a las ganancias y el impuesto al valor agregado (IVA).
Sin embargo, para la aplicación de estos se debe considerar la situación particular de cada uno de los mineros.
Por su parte, se pueden agregar más adelante otros impuestos en el caso en el que el minero decida vender las criptomonedas que acumuló como recompensa por sus operaciones.
La minería de criptomonedas es una acción completamente legal, aunque sea seguida de cerca por la AFIP.
En conjunto con otras fuerzas de seguridad, la agencia de Gobierno desmanteló distintas instalaciones que consumían altos niveles de energía eléctrica.
Lo que investigó el organismo en los allanamientos recientes fue el cumplimiento con los documentos correspondientes de las distintas granjas, tanto de la actividad en sí como de los ingresos percibidos.
Pero no todas las instalaciones estaban en regla, sino que había algunas que se alimentaban de energía robada, o con dispositivos ingresados al país indebidamente.
Rodolfo Andragnes, el presidente de la organización no gubernamental Bitcoin Argentina, sostuvo que la AFIP puso en regla a quienes no lo estaban y operaban sin declarar la actividad económica.
"Desde siempre la minería paga Ganancias, lo que le corresponde a una actividad que genera una renta", completó.